Pokémon se ha convertido otra vez en un fenómeno en todo el mundo debido al reciente lanzamiento de la aplicación “Pokémon GO”. Al recordar la época en la que yo veía la serie animada “Pokemon”, coleccionaba figuras, muñecos y jugaba en “batallas”, me di cuenta de que algunos aspectos del “Mundo Pokémon” no sólo encajan con las verdades restauradas del Evangelio de Jesucristo, sino que parecen provenir de ellas.
Obviamente no me refiero con este artículo, que los creadores de “Pokémon” tuvieron alguna inspiración directa del Mormonismo o las escrituras. [1] Pero como la verdad es universal – sus principios llaman la atención al ser utilizados de forma recurrente en libros, películas, conferencias para ejecutivos y música – Reflexioné sobre el mundo ficticio de Pokémon y lo compare con las verdades constantes en mi religión [ 2]. Al hacerlo, me di cuenta de que hay límites de comparación porque, en definitiva, Pokémon no pretende enseñar religión, y el Evangelio es una cosa, y Pokémon otra.
Además, varios de los puntos mencionados a continuación también pueden ser encontrados en otras obras de ficción. Esto es interesante porque grandes obras de ficción repiten temas principales, que son lógicas en los principios de la religión (el bien contra el mal, maestro y/o aprendiz, la diversidad de las criaturas, etc.) Encontré estas comparaciones interesantes:
1.Diversidad
Los Pokémon son pequeñas “criaturas” que pueden ser capturadas por una “Poké Bola”. Una de las cosas más interesantes en “Pokémon” es que se puede coleccionar distintos Pokémons. Ellos se basaban en la diversidad que tenemos en el mundo: plantas, animales e incluso objetos creados por el hombre. La diversidad pokémon, se limitó a 151 al comienzo del anime . Ese número subió a 700 [3]. La diversidad de los Pokémons es uno de los puntos que han hecho de la serie un gran éxito, y no es más que un reflejo de la diversidad que existe en el mundo en el que vivimos. La diversidad de nuestro universo es un gran testimonio del poder y la gloria de un Dios ilimitado. Contemplando esta obra ficticia hace que nos sorprenda, y glorifiquemos al Señor (Salmo 8). El salmista declaró: “Cuán numerosas son tus obras, oh Jehová! Las has hecho todas ellas con sabiduría; la tierra está llena de tus creaciones. (Salmo 104: 24). si bien hay un numero exacto de pekémons, el hombre aún no conoce todas las creaciones del Señor.
2. Evolución
Los Pokémon están clasificados según su “tipo”. Algunos son agua, otros fuego, etc. La debilidad de un Pokemon de agua no es la misma que la de un pokémon fuego – donde uno es fuerte, el otro es débil. El maestro Pokemon debe aprender las fortalezas y debilidades de su Pokémon para afrontar los retos en su viaje. Además, el Pokémon puede ser entrenado para desarrollarse. Se trata de cambiar totalmente su forma, evolucionar y ser cada vez más fuerte. Así Bulbasaur puede a través de los desafíos y la formación, volverse en un Ivysaur que a su vez puede convierte en un Venusaur. La evolución (avance a un nivel más alto) es uno de los aspectos más significativos de la teología cristiana. Nos sentimos alentados por las Escrituras para evolucionar y alcanzar niveles más altos de espiritualidad, al desarrollar nuestros talentos y perfeccionarlos. Pablo dice que recibió muchos y variados talentos (1 Corintios 12) y nos animó a buscar “diligentemente los mejores dones” para encontrar un “camino aún más excelente.” (1 Corintios 12:31). En la Iglesia, o el cuerpo de Cristo, los dones se comparten – y no todos reciben los mismos dones. Dios da ciertos dones a algunos, y otros reciben diferentes dones – pero en la unión, los miembros de la Iglesia son mutuamente perfectos – todo el mundo puede utilizar sus dones para bendecir a los demás (Moroni 10 y D & C 46).
3. Perfeccionamiento
Convertirse en un maestro Pokémon fue el sueño de todos los niños que vieron y siguieron el anime. Un maestro Pokémon captura diferentes Pokémons, aprende acerca de ellos y se enfrenta a desafíos para hacer más fuerte a su Pokémon. Tiene que ser un estratega y ganar insignias de los Maestros Pokémon en los gimnasios. El deseo de ser mejor y llegar a una posición de honor es también un principio del Evangelio. Los deseos del joven Abraham son similares a los deseos de Ash Ketchum (Personaje ficticio de la serie animada) observa: “y hallando que había mayor felicidad, paz y reposo para mí, busqué las bendiciones de los padres, y el derecho al cual yo debía ser ordenado (…) deseando también ser el poseedor de gran conocimiento, y ser un seguidor más fiel de la rectitud, y lograr un conocimiento mayor y ser padre de muchas naciones, un príncipe de paz, y anhelando recibir instrucciones y guardar los mandamientos de Dios “(Abraham 1: 2) Abraham quiere mejorar, quiere llegar a ser un maestro, un príncipe de paz. La superación y mejorar es el reto de todos nosotros: necesitamos progresar. Como Cristo, de gracia en gracia hasta que recibió la plenitud. (D. y C. 93:13)
4. Vencer Desafios
Las insígnias eran en el mundo Pokémon, premios, dados por los profesores de los gimnasios Pokémon para los entrenadores que ganaban. Una insignia simbolizaba que el entrenador había superado un reto, y que estaba listo para una nueva etapa. En nuestra vida hay necesitamos simbólicamente alcanzar diversas insignias o premios. Pero no se lucha contra otras personas utilizando pokémons. “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra las fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12). Cuando ganamos un desafío de la vida nos hacemos más fuerte y ganamos experiencia. Tales desafíos nos preparan para la vida eterna, esa es nuestra meta.
5. El Camino
El camino para convertirse en un Maestro Pokémon incluye aventuras en distintos lugares, con muchos amigos en el camino. También hay profesores con experiencia, enfermeras y policías – y, por supuesto, rivales. El viaje comienza a edad temprana: entre los ocho a diez años debes elegir un Pokémon para iniciar la aventura. La edad de responsabilidad viene exactamente en ese tiempo – y necesitamos a través de nuestras propias decisiones superar los retos y superar los obstáculos de nuestra vida. En nuestro camino de la vida así como en el mundo Pokémon, tenemos mentores, amigos y enemigos. Algunos nos ayudarán en nuestra meta, otros no. Necesitamos, como dijo el presidente Thomas S. Monson, “encontrar la alegría en el camino”: “Esta es nuestra única oportunidad en la vida mortal – aquí y ahora. Cuanto más tiempo vivimos, mayor es nuestra comprensión de que es breve. Las oportunidades vienen y se van. Creo que una de las mayores lecciones que hemos aprendido en nuestro corto camino por la tierra son las lecciones que nos ayudan a distinguir lo que es importante de lo que no lo es. Les pido que no dejen que las cosas más importantes pasen por centrarnos más en como hacer planes para un futuro ilusorio e inexistente cuando se tiene todo el tiempo del mundo para hacer lo que quieren. En su lugar, encuentren la alegría en el camino, ahora “[4].
El siguiente fue escrito originalmente por Lucas Guerreiro para mormonsud.net en portugues
¿Y tu? Eres fan de Pokémon? ¿Puedes encontrar otros principios del Evangelio en Pokémon? Comenta!
Notas
[1] Según Wikipédia, la inspiración de crear “Pokémon” vino de Satoshi Tajiri, que uno de sus pasatiempos favoritos era la recolección y colección de insectos. Algunas obras ficticias tienen origen directo del cristianismo como “Superman”, que fue creado a partir de la figura de Moises, de la Bíblia. Otras obras, como es el caso de Pokemon tienen relaciones indirectas con la religión.
[2] Este artículo que busca encontrar principios del evangelio en obras seculares no es nuevo, en nuestra versión en portugués se pueden encontrar los siguientes artículos Star Wars foi influenciado por um mórmon y Snap, de Harry Potter, ensinou sobre o Evangelho.
[3] Fuente Wikipédia.
[4] “Alegria na Jornada“, Conferencia General, octubre de 2008