Aquellos que están estudiando el Antiguo Testamento saben muy bien que contiene pasajes que muchos en el mundo encuentran fantásticos. Desde el Arca de Noé hasta Jonás y la ballena. Muchas historias que se encuentran en el tomo sagrado contradicen el descubrimiento científico moderno.
Algunos fieles mantienen una creencia literal mientras que otros han llegado a ver el texto de forma simbólica. Sin embargo, todos pueden estar de acuerdo en que las palabras antiguas han tenido un impacto enorme en la historia del mundo.
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Algunos de los versículos más singulares del Antiguo Testamento se refieren a los unicornios.
Por supuesto, debido a historias desde escapar de las guaridas de los leones, derribar las murallas de la ciudad hasta dividir enormes cuerpos de agua, es fácil pasar por alto estos pasajes. Sin embargo, aquí están, extraídos directamente de la versión del rey Santiago de la Biblia:
Referencias de unicornios en la Biblia
Números 23:22
“Dios los ha sacado de Egipto; tiene fuerzas como de un [unicornio]”.
Números 24: 8
“Dios lo sacó de Egipto; tiene fuerzas como de un [unicornio]; devorará a las naciones enemigas, y desmenuzará sus huesos y las atravesará con sus saetas”.
Deuteronomio 33:17
“Su gloria es como el primogénito de su toro, y sus cuernos como cuernos de [unicornio]; con ellos arrinconará a todos los pueblos hasta los confines de la tierra; y estos son los diez millares de Efraín, y estos los millares de Manasés”.
Job 39: 9-12
“¿Querrá el [unicornio] servirte a ti o quedarse en tu pesebre?
¿Atarás tú al [unicornio] con coyunda para abrir el surco? ¿Rastrillará los valles en pos de ti?
¿Confiarás tú en él por ser grande su fuerza, y le dejarás tu labor?
¿Confiarás en que él devolverá tu semilla y en que la recogerá en tu era?”
Salmo 22:21
“Sálvame de la boca del león. De los cuernos de los [unicornios] me has rescatado”.
Salmo 29: 6
“Y los hace saltar como becerro; al Líbano y al Sirión, como cría de [unicornios]”.
Salmo 92:10
“Pero tú acrecentarás mi poderío como el de un [unicornio]; seré ungido con aceite fresco”.
Isaías 34: 7
“Y con ellos caerán [unicornios], y toros, y becerros; y su tierra se embriagará de sangre, y su polvo se engrosará de grasa”.
Nota: En la versión del Rey Santiago de la Biblia en inglés se menciona “unicornio” y en español este término se tradujo como “toro salvaje”, para hacer énfasis en ello, colocamos los corchetes.
¿Qué son los unicornios? ¿Existieron?
Los unicornios son una bestia mítica, no más real que los dragones, que por cierto también se mencionan en la Biblia (véase Apocalipsis). Pero, ¿qué vamos a hacer con esto? Con tantas referencias a la criatura, ¿podrían haber existido realmente los unicornios?
La mayoría de los expertos dicen que no, y también dicen que los manuscritos originales no deberían hacernos creer que lo hicieron.
El texto fuente de cada una de estas referencias nos da el hebreo “re’em”, que la Enciclopedia Judía describe como:
“Un animal salvaje e indomable de gran fuerza y agilidad, con poderosos cuernos”.
Si esto suena menos a un unicornio y más a un rinoceronte, es porque muchos estudiosos creen que estos versículos probablemente se refieren al mamífero africano.
Otras traducciones a veces designan al re’em como un tipo de antílope, mientras que otros eruditos creen que se refiere a un buey de un cuerno.
Un grupo de creacionistas fundamentales incluso propuso una teoría algo improbable de que estos versículos se referían a un tricerátops (dinosaurio con cuernos).
Sin embargo, todavía hay esperanzas para quienes les guste la idea de que existieron los unicornios.
Answers in Genesis, un ministerio fundamentalista cristiano sin fines de lucro que rechaza el concepto de evolución y envejecimiento científico de la Tierra, reconoce la posibilidad de que el unicornio en cuestión pueda ser alguna otra bestia, pero no está tan seguro.
Explica:
“Los lectores modernos tienen problemas con los unicornios de la Biblia porque olvidan que una característica de un solo cuerno no es infrecuente en el menú de Dios para el diseño de los animales, tomemos como ejemplo al rinoceronte y narval”.
Luego, afirma:
“La ausencia de un unicornio en el mundo moderno no debería hacernos dudar de su existencia en el pasado”.
Después de todo, dicen que la extinción del pájaro dodo no significa que nunca existió. Asimismo, señalan que “informes del siglo XVIII del sur de África representaron dibujos en rocas y relatos de testigos presenciales de animales feroces, con un solo cuerno y parecidos a los equinos”.
Así que ahí lo tienes.
Lamentablemente, la mayoría de los estudiosos están de acuerdo en que los unicornios en cuestión probablemente no eran unicornios reales, sino otro animal más familiar.
Después de todo, ningún hallazgo científico o descubrimiento arqueológico hasta la fecha ha demostrado la existencia de tal criatura. No obstante, la ausencia de evidencia no es evidencia de ausencia. Así que, para muchos, la esperanza de la existencia de los unicornios aún puede permanecer.
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Jeff Hampton y fue publicado en ldsliving.com con el título “8 Times Unicorns Were Mentioned in the Bible”.
