Los pasajes de la Biblia nos enseñan que Dios siempre ha buscado comunicarse con Sus hijos, ya sea para guiar a Su pueblo, brindarle conocimientos, hacer promesas con ellos o amonestarlos cuando se están alejando de Su camino.
Sin embargo, los días de Adán, Abraham y Moisés parecen tan lejanos que la existencia de un profeta parece más un cuento de hadas que algo real.
Hay, incluso, muchos que sugieren que no habría necesidad de un profeta en estos tiempos.
¿Por qué la humanidad necesitaría tener un profeta o un mensajero de Dios en la tierra?
El Padre Celestial sabía que no podíamos atravesar esta vida mortal sin orientación ni consejo de Su parte. Él sabía que en un mundo de oscuridad necesitaríamos de la guía que Él solo puede dar.
Nuestro Padre Celestial revela esa sabiduría a todas las personas sobre la tierra por medio de Sus profetas.
“Porque no hará nada Jehová el Señor sin que revele su secreto a sus siervos los profetas”.- Amós 3:7
Entonces, ¿es posible que haya profetas en la actualidad?
¡Sí!
El Señor ama a todos Sus hijos por igual y nunca nos dejará solos.
¡Parte del glorioso mensaje de la restauración de la Iglesia de Jesucristo es que Dios no ha cesado de comunicarse con nosotros!
Él no está escondido en los cielos, sino que continúa comunicándose con Su pueblo al igual que lo hizo en los días de los profetas de la antigüedad.
Los profetas de hoy cumplen muchas funciones. Hablan en nombre del Señor y nos revelan Su voluntad, testifican de Cristo y enseñan Su evangelio, son videntes y reveladores, todo esto mientras presiden la Iglesia de Jesucristo sobre la tierra.
1. Hablan en nombre del Señor y nos revelan Su voluntad
En el antiguo Israel y en El Libro de Mormón, los profetas con frecuencia recibían instrucciones de Él para luego comunicar a su pueblo lo que Dios había dicho. De esta manera, los profetas son mensajeros de Dios para Sus hijos y revelaban Su voluntad a la humanidad.
Gran parte de lo que el Señor le revela a Sus profetas tiene el propósito de prevenir el pesar que podamos sentir como individuos y como sociedad.
Cuando Dios habla, lo hace para enseñar, inspirar, refinar y aconsejar a Sus hijos.
Cuando las personas y las sociedades hacen caso omiso de las instrucciones de su Padre Celestial, lo hacen bajo el riesgo de enfrentar pruebas, tormento y ardua labor.
Dios desea lo mejor para nosotros. Es por eso que Sus instrucciones son de importancia crucial, y algunas veces apremiantes.
2. Testifican de Cristo y enseñan Su evangelio
“Peace of God” por Yongsung Kim
Los profetas en la antigüedad testificaban claramente de Cristo y enseñaban a los pueblos Su evangelio. Esto con el fin de que puedan hacer promesas con Dios de seguir y vivir aquellas enseñanzas a fin de recibir todas las bendiciones que Él tiene reservado para ellos.
En la actualidad, los profetas testifican del Padre y de Cristo a toda nación, dan a conocer la voluntad y el verdadero carácter De Dios, condenan el pecado, advierten de sus consecuencias y nos ayudan a evitar caer en el camino que nos lleva a la infelicidad.
El presidente Russell M. Nelson, profeta actual de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y su esposa, la hermana Wendy Nelson
Ellos siguen instando a los hijos del Padre a seguir Sus enseñanzas a fin de recibir todas Sus bendiciones siempre que hagamos nuestra parte. Nos enseñan el Plan de Salvación para toda la humanidad y cómo acercarnos a Dios y a Su hijo y obtener nuestro propio testimonio sobre Ellos.
El Señor a su vez a prometido que jamás permitirá que ningún hombre pueda desviar a su pueblo.
3. Son videntes y reveladores
Tanto en el antiguo Israel como en la antigua Mesoamérica, con frecuencia se ven ejemplos de videntes.
En el Antiguo Testamento, se hace referencia al profeta Samuel como un vidente (1 Samuel 9: 9), al igual que Gad (2 Samuel 24:11) e Iddo (2 Crónicas 9:29), entre otros.
En El Libro de Mormón también encontramos la presencia de videntes, así como Nefi que tuvo visiones sobre lo que pasaría con la Iglesia de Cristo y la apostasía que vendría después de Su muerte (1 Nefi 14).
En la actualidad, tenemos un profeta viviente en la tierra y este profeta es el presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Él tiene el derecho de recibir revelación para toda la Iglesia; posee las “llaves del reino”, lo cual significa que tiene la autoridad para dirigir a toda la Iglesia y el reino de Dios sobre la tierra, los profetas también reciben revelación de Dios para el mundo.
Cada seis meses el profeta y los apóstoles de la Iglesia de Cristo se dirigen a todos los Hijos de Dios con guía e instrucción divina para nuestros tiempos.
En busca de una respuesta
Quizá esto sea algo completamente nuevo para ti o quizá este no sea el caso, sin embargo, puedes saber por ti mismo si estas cosas realmente son verdaderas.
“A todo aquel que se pregunte si eso es real, que pudiera preguntarse: “¿Es posible que Dios nos hable hoy?”, de todo corazón lo invito: “Ven y ve” (Juan 1:46).
Lean las palabras de Dios que se encuentran en las Escrituras. Escuchen [los discursos de los profetas] con un oído dispuesto a oír la voz de Dios dada a través de Sus profetas de los últimos días.
¡Vengan, escuchen y vean con su corazón! Porque si buscan “con un corazón sincero, con verdadera intención, teniendo fe en Cristo, [Dios les] manifestará la verdad de ellas por el poder del Espíritu Santo” (Moroni 10:4)”.- Dieter F. Uchtdorf
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