El 3 de marzo, se estrena el documental “Mark Hofmann: Un falsificador entre Mormones”, una miniserie que relata la historia de Mark Hofmann, los documentos que falsificó y los crímenes que cometió en 1985 en Salt Lake City.
Este documental fue co dirigido por Jared Hess, un Santo de los Últimos Días conocido por dirigir la película “Napoleon Dynamite”.
Hofmann fue un hábil falsificador que logró engañar a museos, coleccionistas e historiadores con documentos falsos de personajes de la historia de los Estados Unidos y La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Jared Hess compartió con Deseret News las razones detrás de la realización del documental en un entrevista esclarecedora.
También te puede interesar: “La historia de Mark Hofmann, la Carta de la Salamandra y los atentados en Salt Lake”
Deseret News: La decisión que has tomado ha llamado mucho la atención. ¿Por qué realizaste este proyecto?
Jared Hess: Yo era bastante joven cuando todo sucedió. Vivía en Inglaterra en ese momento. Mi papá era el obispo del barrio Hyde Park y yo tenía alrededor de 6 años, por lo que no supe mucho al respecto hasta que de adolescente escuché a personas mencionarlo sin dar más detalles al respecto.
Al crecer y servir en una misión para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, llegué a desarrollar un gran amor por la historia de la [iglesia]…
Leí todos los libros que se han escrito sobre [Mark Hofmann], la cual es una historia bastante compleja. Soy un gran aficionado de las historias policiacas y la suya tiene muchos niveles de complejidad.
Se relaciona tanto con nuestra comunidad y nuestra cultura que me pareció muy interesante como cineasta. También pienso que contiene muchos temas que son relevantes para nuestros tiempos.
¿Qué reacciones has recibido de quienes han visto el documental antes de su estreno?
Pude compartir algunas de las primeras ediciones con algunos de mis hermanos y familiares que también son Santos de los Últimos Días, solo para que me dieran su opinión.
Es un tema que algunos conocen culturalmente, es algo que pasó, sin embargo las personas no saben mucho al respecto. Mi hermano me dijo que fue bastante informativo y que le ayudó a aclarar algunas de los conceptos que tenía.
Al final, los buenos ganan y el hombre malo va a la cárcel, con la excepción de aquellas inocentes personas que perdieron la vida, un aspecto desgarrador de la historia, debido a los actos atroces de este terrible hombre.
Esta es una historia diferente al resto y pienso que hay muchas cosas importantes que podemos aprender de ella.
Algunas de las personas que atravesaron esta experiencia han descrito que aun sufren por aquellos que fallecieron, que fueron el blanco principal o víctimas de las falsificaciones de Mark Hofmann. Algunos estuvieron renuentes a hablar de ello, ¿qué tan difícil fue hablar de lo sucedido para las personas a las que entrevistaste?
Honestamente, para la mayoría de ellos fue extremadamente catártico. La mayoría no había hablado de esta experiencia desde que sucedió.
Hablamos con personas que conocían a Mark e hicieron negocios con él, como Brent Ashworth. Hablamos con Brent Metcalfe, un historiador de la Iglesia que realizaba investigaciones para Hofmann. Hablamos con Randy Rigby, un amigo cercano a una de las víctimas. Hablamos con Dorie Olds, la ex esposa de Mark Hofmann.
Hablamos con todos los que pudimos contactar y encontrar y que pasaron por esto. Queríamos escuchar sus historias de primera mano, tal como la vivieron, y contarlas desde su perspectiva, la de todos de hecho, desde los investigadores encargados del caso, hasta las personas que trabajaron con Hofmann, los miembros de su familia y los colegas que estuvieron directamente involucrados con él.
Rick Turley, un historiador Santo de los Últimos Días, nos brindó una perspectiva increíble de lo que la Iglesia y los líderes estaban pasando… En el documental podemos ver las diferentes perspectivas y escuchar las declaraciones de las personas involucradas a medida que se desarrollan los eventos.
¿Tuviste la oportunidad de hablar con Mark Hofmann?
Tyler Measom, mi co-director, le escribió a Mark en muchas ocasiones para poder comunicarse con él, pero nunca recibió una respuesta suya. Lo que sabemos es que, al parecer, solo ha tenido contacto con algunos de sus familiares directos y eso es todo.
Ha guardado silencio durante los últimos 30 años, pero pudimos obtener las cintas de su confesión, por lo que no lo necesitábamos para contar la historia. En ellas uno realmente puede ver lo despiadado e insensible que era, y eso es impactante, eso es realmente impactante.
¿Cómo se sentirán los Santos de los Últimos Días al respecto?
Algunas personas tienen una reacción instintiva al título. Nuestro título provisional era “La salamandra”. Luego cambió a “Los asesinos de la salamandra”. Netflix quiso cambiarlo, y nos dijo: “[El título] parece de una película sobre cómo matar lagartijas o algo por el estilo”.
Nos dijeron que lo sucedido era un verdadero crimen: “Queremos expresar claramente de qué se trata [el documental]”. Las historias de crímenes reales más efectivas tienen los títulos más claros: “Las cintas de Ted Bundy”.
[Encontramos] una noticia archivada de la época, creo que fue parte de un informe nacional de noticias sobre Utah que decía: “Hay asesinatos entre los mormones”.
Netflix sintió que ese era un título muy claro, “Murder among the Mormons” ese sería el titulo en su idioma original. Lo que pasó, ocurrió entre la comunidad de los Santos de los Últimos Días, entre los mormones, y sí, hubo un asesinato. Eso queda muy claro.
Algunas personas pueden reaccionar de manera diferente, pero creo que para mí lo más importante es que solo tienen que mirar el documental, ver por sí mismos.
Creo que muchas personas podrían tener suposiciones equivocadas sobre la intención detrás del documental, el porqué se hizo esta historia. Pero como dijo mi hermano, es muy informativo, despeja las dudas y tiene detalles que muchos no conocen y eso es algo muy bueno. Una vez más, los chicos buenos ganan y el hombre malo va a la cárcel.
Fue una situación realmente incómoda para la Iglesia en cuanto a los medios de comunicación en aquel momento. Los líderes estaban bajo una gran cantidad de presión, trataban de comprender lo que estaba pasando, para ellos era normal obtener y recopilar historia de la Iglesia.
De pronto, cuando todo esto comenzó a suceder, hubo mucha confusión, pero lo bueno es que, nuevamente, los buenos ganaron.
No queríamos pasar por alto o ignorar el hecho de que fue una situación realmente incómoda para todas las partes involucradas, sin embargo cada una de ellas lo enfrentó, en mi opinión, de una manera muy admirable.
Existen muchas historias, pero creo firmemente que las que elegimos y en las que nos enfocamos en el documental fueron definitivamente las más relevantes y cruciales.
Incluso para aquellos que saben quién es Mark Hofmann, sé que nunca antes han visto una inmersión tan profunda como la que compartimos en el documental.
Fuente: Deseret News