En julio, un grupo de estudiantes de teología de la Escuela de Graduados en Teología del Seminario San Carlos de Manila, Filipinas, se reunió virtualmente con misioneros Santos de los Últimos Días de la Misión Filipinas, Ciudad Quezón.
Cada grupo compartió sus creencias religiosas y su testimonio, y los misioneros se centraron en “La Restauración de la Plenitud del Evangelio de Jesucristo: una Proclamación para el Mundo en el Bicentenario”, que el presidente Russell M. Nelson presentó en abril de 2020.
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El líder de estos seminaristas católicos es el reverendo padre Richard James Babao.
Él tiene como tradición llevar cada año a los estudiantes graduados en teología a la oficina de la Iglesia en Manila.
Esto con la finalidad de que los graduados se reúnan con los misioneros de tiempo completo además de recorrer el CCM y los terrenos del Templo de Manila, Filipinas.
Sin embargo, este año, el debate y el recorrido, se realizaron virtualmente debido a las restricciones de COVID-19.
Pero, ¿por qué el padre James lleva a sus seminaristas católicos al CCM cada año?
“Creo que esta es una de las mejores cosas que he hecho en el campo del ecumenismo y el diálogo interreligioso.
No quiero que los seminaristas salgan después de su graduación sin experimentar lo más hermoso: conocer a estas personas buenas y hermosas.
Esta reunión es una bendición para todos. Incluso con nuestras diferencias, hay mucho que compartir”, dijo el padre James.
Asimismo, el hermano Patrick Luke, un estudiante de seminario de tercer año, expresó lo siguiente sobre esta experiencia:
“Por mi parte, no sentí que fuéramos tan diferentes. Sus actividades nos han hecho sentir muy bienvenidos.
Para ser honesto, al principio me sentí nervioso porque era la primera vez que asistía a un diálogo interreligioso.
Sin embargo, mi nerviosismo fue reemplazado por alegría porque no sentía que perteneciéramos a religiones diferentes.
En cambio, sentí que éramos una familia, hermanos y hermanas en Cristo”.
Para concluir, el presidente Welch de la Misión Filipinas, Ciudad Quezón, agregó:
“Nos sentimos muy agradecidos de haber sido invitados a participar con usted [padre James] y sus maravillosos colegas.
Nos sentimos agradecidos de que haya sido tan amable de acercarse a nosotros con un espíritu tan cálido y sincero de amistad y amor.
Ustedes ejemplifican la autenticidad, la bondad y la amabilidad. Realmente, los consideramos hermanos en Cristo y amigos”.
Después del encuentro interreligioso se realizó el recorrido virtual por el CCM de Filipinas. Este recorrido fue dirigido por el hermano Flores, un maestro del CCM.
El recorrido incluyó las habitaciones de los misioneros, los salones de clases, la sala de correos, la lavandería, el gimnasio, la cafetería y la famosa cancha de básquetbol de tamaño estándar de la NBA.
Fuente: Newsroom