Si recaigo en mi adicción, ¿tengo ninguna posibilidad de ser perdonado?

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Tengo una pregunta. He sido adicto a la marihuana durante 20 años y recientemente la dejé y comencé a arrepentirme por ello, pero luego tuve una recaída. ¿Significa esto que ahora no tengo posibilidad alguna de ser perdonado porque me arrepentí pero lo hice de nuevo?

 Respuesta

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Pienso que es maravilloso y loable que hayas tomado los pasos necesarios para abandonar tu adicción. Asimismo, siento tu decepción y desánimo por lo que ha sucedido.

Debes saber que la sinceridad de nuestros actos se miden por el deseo que tenemos de seguir adelante y mantenerse alejado de aquello que es una debilidad para nosotros.

Ademas, es importante que sepas que las recaídas con frecuencia son parte del proceso de recuperación, esto no debe usarse como una excusa. Siempre debemos esforzarnos por mantenernos “limpios”.

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Así como la recuperación es un proceso, también lo es el arrepentimiento. Moroni 6: 7 relata que hubo personas entre los santos nefitas que cometieron pecado y se negaron a arrepentirse y que fueron excomulgados. 

Luego, en el versículo 8 leemos esta frase sumamente alentadora:

“Mas cuantas veces se arrepentían y pedían perdón, con verdadera intención, se les perdonaba”.

¡Lo mismo sucede con nosotros! Todos tenemos debilidades que nos hacen recaer, algunas son más visibles que otras y esto es porque somos personas imperfectas.

Sin embargo, aun en nuestra imperfección debemos esforzarnos por hacer lo bueno, por alejarnos de aquello que sabemos solo nos traerá decepción y miseria.

“Come, be not afraid” por Dan Wilson

¡Ten ánimo y sigue intentándolo! Satanás quiere que te rindas, pero el Salvador, TU abogado ante el Padre, te apoya y está ahí para sostenerte.

Algo más que me gustaría compartir contigo es una cita del autor Steven A. Cramer: “Lo que llama tu atención, te poseerá”. Esto es un hecho.

Recuerda que Pedro pudo caminar sobre las aguas siempre que su atención estaba centrada en Jesús. Si puedes enfocar tu atención en Cristo cuando sientas esa lucha interna, estarás atado a Su poder y Él es “poderoso para salvar” (Alma 34:18).

Mi otra recomendación es que puedas leer El Cristo viviente: El Testimonio de los Apóstoles para que puedas volver a centrarse en Él fácilmente. ¡Tú puedes!

Fuente: Askgramps

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