Mucha gente no busca una iglesia verdadera, ellos busca una buena iglesia. Ellos quieren ser parte de una organización que sea fundamentalmente sólida y que mejore a sus miembros y al mundo que la rodea.
No estoy tratando de decir que la Iglesia es perfecta. Sin embargo, a veces sólo nos enfocamos en sus fallas menores y en sus afirmaciones de veracidad y nos olvidamos que simplemente es una organización excepcional. Aquí hay 21 razones por las que somos afortunados de ser miembros.
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Cuida de los suyos
La Iglesia cuida a sus miembros. A través de ofrendas de ayuno, almacenes de obispos y servicios de trabajo, junto con los consejos de barrio y los maestros, la Iglesia se asegura de saber de las necesidades de sus miembros
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La Iglesia y sus barrios sirven regularmente a nivel comunitario
Ya sea participando en proyectos de servicio local, trabajando en bancos de alimentos locales o organizando el nuevo sitio web de JustServe.org, los Santos de los Últimos Días se esfuerzan por mejorar el lugar donde viven.
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Hace bien alrededor del mundo
La Iglesia no sólo se enfoca localmente, sino que mantiene su perspectiva en todo el mundo. Ellos son elogiados regularmente por su rápida respuesta a los desastres. La iniciativa de agua limpia de la Iglesia ha ayudado a más de cuatro millones de personas en África solamente. La Iglesia misma está presente en más de 137 países haciendo el bien en sus comunidades.
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Seguridad a largo plazo
Si usted está buscando una organización para hacer el bien. Es probable que esté buscando una que dure mucho tiempo.
A través de sus sabias inversiones, La Iglesia de Jesucristo y de los Santos de los Últimos Días está entre las instituciones más seguras financieramente en todo el mundo. Usted puede estar seguro de que sus esfuerzos allí tendrán una duración a largo plazo.
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Tiene un voluntariado muy eficaz
Cuando estoy donando a la mayoría de las organizaciones, me gusta saber que un poco del dinero va a gastos generales. Debido al ministerio no pagado de la iglesia y a la infraestructura comprada y pagada, la Iglesia es increíblemente eficiente con sus recursos y provee una gran cantidad de voluntarios por su dinero.
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Responde bien a la crítica
La Iglesia pide a cada uno de los miembros que sostenga su liderazgo cada seis meses. Y cualquiera que no esté de acuerdo es invitado a hablar con sus líderes.
La Iglesia también responde bien a las críticas externas. Aunque la Iglesia es frecuentemente objeto de burla, la respuesta es casi siempre de buen humor.
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Está abierta a la verdad
Nosotros buscamos lo virtuoso o de buena fama o digno de alabanza. La Iglesia no sólo admite, sino que publica documentos y ensayos que abren dudas sobre sus afirmaciones de veracidad.
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No hace cambios para estar a la moda
Muchas organizaciones están constantemente al pendiente para mantenerse estar de acorde con las cosas que están pasando en la actualidad y a menudo persiguen cualquier tendencia que esté de moda.
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Tiene coraje moral
Puede ser difícil defender posiciones profundamente impopulares simplemente porque son correctas. Sin embargo, la Iglesia regularmente lo hace. En asuntos de castidad, alcohol, refugiados, abuso infantil y doméstico, y pornografía, la Iglesia ha sido la guía de la carga moral mientras que otros discuten y luchan sobre lo que es correcto.
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Físicamente más saludable
Los miembros de la Iglesia son físicamente más saludables. Más expectativa de vida, menores tasas de cáncer, menores tasas de enfermedades cardíacas son simplemente algunas de las muchas ventajas de la salud que las enseñanzas SUD les brinda a sus miembros.
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Mentalmente más saludable
Aunque algunos sugieren lo contrario, una investigación muestra que los Santos de los Últimos Días también tienen ventajas en la salud mental. Tanto los hombres como las mujeres mormonas son menos propensos a estar deprimidos que los estadounidenses en general.
Los adolescentes mormones son más optimistas y menos propensos a suicidarse. Y en general, cuanto más activo se esté en la iglesia, más sentido encontrará en su vida.
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Más educados
Los Santos de los Últimos Días tienen una rica teología en torno a la educación, tres universidades de clase mundial y muchas iniciativas para aumentar la educación en todo el mundo.
Y a diferencia de prácticamente todas las otras demografías, los Santos de los Últimos Días, que están más comprometidos con la Iglesia, son más educados.
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Autosuficiente
Si bien la Iglesia es fantástica en brindar ayuda a los miembros que la necesitan (véase el punto 1), las enseñanzas de la Iglesia también ayudan a que más miembros sean autosuficientes.
Los mormones tienen menos probabilidades de estar en grupos de ingresos más bajos y mucho más probabilidades de ser de clase media.
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Está preparada para emergencias
No sólo los miembros son más autosuficientes en el día a día, sino que también son más preparados para los momentos en crisis. La iglesia institucional hace esto con su estabilidad financiera, pero los miembros individuales también son más propensos a ahorrar para los momentos difíciles, tienen suministros de emergencia y almacenamiento de alimentos.
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Sus miembros están conectados con sus antepasados
Los Santos de los Últimos Días están mucho más conectados con sus antepasados. Aunque esto es para realizar rituales religiosos significativos, tiene impresionantes efectos secundarios.
Conocer su historia familiar ayuda a los niños a moderar los efectos del estrés y aumenta su confianza en ellos mismos entre otros beneficios.
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Proporciona historias impresionantes
Las historias son la base de una cultura. Y los mormones tienen grandes historias. Ellos siguen contando las historias bíblicas y conservando la tradición de los primeros pioneros cristianos. A eso agreguemos las historias del Libro de Mormón y la historia de los pioneros del siglo XIX.
Además, cada nueva generación de profetas trae consigo historias actualizadas para vivir con rectitud.
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Variedad de orígenes
La Iglesia SUD está creciendo. Mientras que muchos grupos religiosos vienen de un origen religioso similar, casi cada congregación mormona tendrá muchos conversos que provienen de muchas religiones, razas, habilidades y países diferentes.
Tanto el número de mormones como el número de congregaciones mormonas están creciendo rápidamente, y casi todos los Santos de los Últimos Días conocen a muchos conversos en su congregación local.
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Sus miembros son felices
Los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días son felices. Los Santos de los Últimos Días son las personas más felices de todo el país, y esto no es sólo auto-reporte. El sondeo Gallup midió la felicidad a través de seis índices de bienestar.
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Promueve comportamientos pro-sociales
Cuando los psicólogos de la Universidad de Pensilvania querían averiguar por qué los mormones se desempeñaban tan bien en las métricas de bienestar, descubrieron lo relacionados que estamos con otras personas.
Mientras muchas personas se están volviendo cada vez más individualistas, los investigadores encontraron diez creencias y prácticas de los Santos de los Últimos Días que los hacen más comprensivos y que hacen que se preocupan por quienes los rodean.
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Crea conexión social
Esto tiene que ver con el punto 18. La Iglesia crea tanto una comunidad local como una comunidad mundial.
En los barrios y las ramas locales, las conexiones son sociales y auxiliares. Los maestros orientadores y las maestras visitantes hacen que incluso los más vulnerables estén conectados con el cuerpo de Cristo.
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Proporciona apoyo familiar
Los mormones son bien conocidos por su énfasis en la familia. Pero la Iglesia pone su obra donde está su teología. Los jóvenes empiezan a aprender desde que tienen 3 años.
No sólo aprenden lecciones morales, sino que desarrollan sus talentos, escribiendo, hablando y planeando habilidades.
Cuando discutamos sobre la Iglesia y estimemos su valor, tengamos en cuenta lo valioso que es como organización.
Escrito por Christopher D. Cunningham, para mormonhub.com. Traducido por Andreea Tamas
