Haley es miembro de la Iglesia de Jesucristo y durante nueve largos años de su vida, experimentó los dolores más terribles debido a una enfermedad crónica.
Ella pasó gran parte de su vida, enfrentándose a tratamientos médicos que laceraron su piel. Oró muchas veces a Dios preguntándole dónde estaba la sanación que Jesús prometió.
Finalmente, pudo ser aliviada del dolor y actualmente, se encuentra siguiendo sus sueños en Nueva York.
Haley pasó varios años de su vida enfrentando una dolorosa enfermedad. Imagen: Canva
Si tú estás experimentando el mismo sufrimiento por alguna enfermedad, ella desea que sepas esto:
“Pasé nueve años de mi vida adulta luchando contra una enfermedad crónica debilitante. Pasé cada día en los consultorios médicos, soportando tratamientos dolorosos, enfrentando un sinfín de síntomas y deseando que gran parte de mi vida hubiera sido diferente.
Oré constantemente para recibir sanación. ¿Dónde está mi bálsamo de Galaad? ¿Dónde está la sanación de Jesucristo para mí? ¿Por qué no se cumplen mis deseos justos?
Con el tiempo, agregué un apéndice a mis oraciones: si la salud estaba fuera de mi alcance, ¿podría Dios darme el valor que necesitaba para superar cada día?
“Tú y yo sabemos que no puedo hacer esto”, decía. “Por favor, dame la fuerza para lograrlo de todos modos”. De alguna manera, día tras día, creo que Él me ayudó a seguir adelante.
Ella le preguntaba a Dios por qué no la aliviaba de los dolores que sufría. Imagen: Canva
Viví de esas tiernas misericordias durante casi una década, hasta 2020, cuando me sometí a un agresivo tratamiento médico que mejoró significativamente mi salud. Finalmente, pude ser aliviada de este dolor.
Mi vida ha sido completamente diferente desde entonces. Mientras sigo una carrera de interpretación artística profesional en la ciudad de Nueva York, mis brazos que antes sostenían agujas, ahora pueden hacer movimientos de ballet.
No me duelen las piernas por la fiebre sino por los saltos largos del ballet. Mi mente está trabajando para retener la coreografía, no para recordar el último horario de medicación que me recetó el doctor.
Una vez escuché que Dios nos compensa por las pérdidas en nuestra vida; que un día sentiría como si esos nueve años [de dolor] nunca hubieran sucedido.
Finalmente, Haley pudo superar la enfermedad que la aquejaba. Imagen: Canva
Aunque los recuerdos de mi enfermedad crónica todavía retumban en lo más profundo de mí, creo que he empezado a comprender lo que quiso decir esa persona.
Si estás en medio de tu implacable sufrimiento, quiero que sepas que lo siento mucho. Sé que observar el progreso de otra persona puede ser esperanzador, pero también puede ser desalentador cuando a ti se te ha negado lo mismo.
Las cicatrices en mi piel, las cicatrices en nuestro corazón que surgieron de años de dificultad, se conectan con las cicatrices de Jesucristo.
Si tú estás experimentado algo parecido, confía en Dios y pon tu dolor en Él. Imagen: Canva
Nuestro dolor, nuestra angustia, nuestra determinación de recurrir a Él incluso en esos momentos terribles en los que no estamos seguros de volver a estar completos, nos conectan con Su momento en el jardín [de Getsemaní] cuando le pidió a Dios que pasara la copa de Él.
Cualquiera que sea tu dolor, por largo que sea, la paz se puede encontrar en el Salvador. Espera un poco más”. — Haley
Fuente: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Video relacionado
@masfe.org Este mensaje es para ti estás pasando por un momento duro en tu vida. Aunque todo se vea muy oscuro ten fe de que pronto la luz del sol volverá a salir en el horizonte para ti. Sanarás esa enfermedad, de esas heridas que no le cuentas a nadie y de esos traumas de tu infancia. Solo ten paciencia y confía en el proceso que Dios tiene para ti 🥹❤️ #sanar #paciencia #fe #proceso #cristianos #mensajecristiano #animo #sisepuede ♬ sonido original – Bill
