En el 2002, Pat Broussard se encontró a dos misioneros mormones tocando a su puerta. Lo que pasó después sorprendió a sus visitantes.
“Los miré y pensé: “Ustedes se ven hambrientos. Entren. Los voy a alimentar”, dijo Broussard. “Había algo en ellos que me hizo pensar: ‘Déjalos entrar; Háblales”.
En el momento en que se fueron, Broussard había iniciado una travesía de fe inusual. Y el misionero Andrew Blackwell no ganó un converso pero ganó un amigo duradero.
El 27 de mayo, Broussard, de 56 años, y Ryan Hallford fueron ordenados sacerdotes católicos por el obispo Robert Muench, de la diócesis de Baton Rouge. En la audiencia estaba Blackwell, aquel misionero mormón, quien regresó a Louisiana desde Utah para brindarle su apoyo.
“Te lo prometo, nunca verás a un mormón y a un católico de la manera como esto se ha desarrollado”, dijo Blackwell. Pat es mi hermano. Yo aprecio a Pat tanto como cualquier persona puede apreciar a otra con la que no está relacionada. Él es uno de los mejores seres humanos que he conocido en toda mi vida.
Cuando se conocieron hace 15 años, Broussard era un padre casado con dos hijos. Su esposa, Aminthe, había sido profesora antes de inscribirse en el Centro de Leyes Paul M. Hebert de la Universidad LSU. Broussard estaba en Nueva Iberia alistando la casa para venderla para irse a Baton Rouge para reunirse con su esposa cuando los misioneros mormones llegaron a tocar su puerta.
Broussard confesó a los misioneros que él no era muy devoto. Ellos lo desafiaron a explorar una relación más profunda con Dios. Aunque ellos querían que lo hiciera a través de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Broussard dijo que nunca se sintió presionado.
“Lo que pude experimentar fue que ellos estaban más interesados en mi alma eterna y se preocuparon por mí como un ser humano, lo cual se quedó conmigo”, dijo Broussard: “Ellos me enseñaron mucho acerca de su fe, pero nunca me dijeron, ‘Tienes que creer esto o nunca irás al cielo”.
Este artículo fue originalmente escrito por Meridian Magazine y fue publicado en ldsmag.com con el título: “Catholic Priest Says His Spiritual Journey Started with a Visit from Two LDS Missionaries”