Presidente Holland: Sean creyentes y los milagros y el poder llegarán

Presidente Jeffrey R. Holland habla durante una reunión de liderazgo del sacerdocio en Saratoga Springs, Utah, el sábado 19 de octubre de 2024. Créditos: Adam Fondren, Deseret News

En una reunión con líderes locales de seis estacas del norte de Saratoga Springs, Utah, el presidente Jeffrey R. Holland, presidente en funciones del Cuórum de los Doce Apóstoles, testificó sobre el Señor Jesucristo y prometió que al aumentar la fe en Él, las personas podrán ayudar a otros a acercarse a Él también.

“Testifiquen”, dijo. “El poder de Dios y la virtud del cielo vendrán”.

En Alma 31:5 se explica que la predicación de la palabra tenía una gran tendencia a guiar a las personas a hacer lo que es justo, y tenía un efecto más poderoso sobre ellos que cualquier otra cosa. Por lo tanto, Alma sintió que deberían “probar la virtud de la palabra de Dios”.

El presidente Holland destacó que la raíz latina de la palabra “virtud” es virtūs, que significa poder. Recordó la historia de la mujer que, necesitando sanación, tocó el borde de la ropa de Jesucristo. Él dijo: “Yo he percibido que ha salido poder de mí” (Lucas 8:46).

“Alma creyó que era oportuno probar el poder de la palabra de Dios”, explicó el presidente Holland.

La fe en Dios desbloquea Su poder, afirmó el presidente Holland, citando al presidente Russell M. Nelson en la conferencia general de abril de 2021:

“El Señor no requiere una fe perfecta para que podamos acceder a Su poder perfecto. Pero sí nos pide que creamos”.

El presidente Holland también enfatizó que cada maestro y líder en la Iglesia debe compartir su testimonio con frecuencia, orar con frecuencia y estudiar las Escrituras junto con su clase, cuórum o congregación. “Queremos que entiendan que somos creyentes”, subrayó.

El élder Ulisses Soares a la izquierda y el presidente Jeffrey R. Holland se agradecen mutuamente al final de una conferencia de liderazgo combinado en Saratoga Springs, Utah. Créditos: Adam Fondren, Deseret News

El élder Ulisses Soares a la izquierda y el presidente Jeffrey R. Holland se agradecen mutuamente al final de una conferencia de liderazgo combinado en Saratoga Springs, Utah. Créditos: Adam Fondren, Deseret News

En la reunión, el presidente Holland estuvo acompañado por el élder Ulisses Soares del Cuórum de los Doce Apóstoles; el élder Brian K. Taylor, Setenta  Autoridad General y segundo consejero de la presidencia del Área Utah; y la hermana Amy A. Wright, primera consejera de la presidencia general de la Primaria. Las reuniones fueron dirigidas por el élder Jason C. Jensen, Setenta de Área en Utah.

Cualquier persona con un llamamiento para liderar o enseñar debe esforzarse por ayudar a aquellos a quienes sirven a tener una experiencia espiritual en cada reunión. Los fundamentos de la oración y el estudio de las Escrituras proporcionarán el “encendido espiritual” que los guiará el resto de sus vidas, enseñó el presidente Holland.

“¿Cómo logramos que las personas quieran asistir, que sientan el deseo de servir? En el corazón de eso —siempre en el corazón de eso— está una experiencia espiritual”.

El poder de la oración

El presidente Holland compartió una experiencia personal, recordando cuando estuvo gravemente enfermo y, en ocasiones, inconsciente en el hospital. El fallecido presidente M. Russell Ballard, quien era el presidente en funciones del Cuórum de los Doce Apóstoles en ese momento, lo visitaba casi a diario, a menudo dándole bendiciones del sacerdocio.

Cuando le informaron a presidente Ballard que parecía que el presidente Holland no iba a sobrevivir, él respondió: “Tendremos que seguir orando y ejercitando nuestra fe”.

El presidente Holland afirmó que sigue con vida gracias a esa fe, y también debido a las oraciones y la fe de personas de todo el mundo, incluidas las de quienes estaban en la capilla en Saratoga Springs.

“Los amo por orar y por creer”, les dijo. Luego, con énfasis, golpeó la mesa: “Sean creyentes. Y los milagros llegan, y el poder llega”.

Al final de la conferencia, el presidente Holland les bendijo para que reciban todo deseo justo de sus corazones, ya sea en esta vida o en la eternidad. “Sucederá”, prometió, especialmente en lo que respecta a sus hijos y las respuestas a sus oraciones por ellos.

“Testifico sobre la divinidad del Señor Jesucristo. Les bendigo para que Él sea un huésped bienvenido en sus vidas y nunca un desconocido”.

Fuente: Church News

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