Cuando muchos pensaban que su época de servir ya había pasado, él decidió creer que aún había más por vivir. Y más por dar.
A sus 70 años, el élder Paul Newton no solo hizo sus maletas para cruzar el mundo hasta Croacia. También hizo historia.
Él es el primer hombre soltero mayor oficialmente llamado a servir como misionero de tiempo completo para La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, tras una reciente actualización que permite a los hombres solteros mayores de 40 años servir en misiones.
Pero esta historia no comienza con un llamado, sino con una pérdida… y una promesa.
Una misión pospuesta, un amor eterno
Durante años, Paul soñó con servir una misión con su esposa, Kathleen. Hacían planes, hablaban de posibles destinos, llenaban formularios… hasta que un diagnóstico inesperado cambió el rumbo de todo.
Kathleen cayó gravemente enferma en 2019. Su diagnóstico fue fibrosis pulmonar. Los planes de una misión juntos se detuvieron. La enfermedad avanzó, y en noviembre de 2022, tras 46 años de matrimonio, Kathleen falleció.
Paul, viudo y con el corazón roto, regresó a Utah y se volcó al templo, al trabajo de historia familiar y al servicio. Pero algo seguía latiendo en su interior: el deseo profundo de volver a servir como misionero.
Una nueva puerta se abre
El 1 de noviembre de 2024, mientras salía del templo, Paul recibió un mensaje que cambiaría su vida: la Iglesia ahora permitía que los hombres mayores solteros sirvieran como misioneros.
No lo dudó. “Me apunto”, respondió de inmediato.
Pero ser el primero significó abrir caminos: el sistema de solicitudes aún no estaba completamente preparado para candidatos como él. Hubo obstáculos, pausas, formularios especiales y ajustes técnicos. A veces, parecía que no iba a suceder.
Sin embargo, su paciencia, fe y determinación inspiraron al equipo del Departamento Misional, que lo llamó “un pionero literal”. Gracias a él, muchos otros hombres podrán seguir sus pasos con mayor facilidad.
Croacia: su nueva tierra de promesas
El 10 de marzo de 2025, el élder Newton ingresó al Centro de Capacitación Misional en Provo (CCM). Apenas días después, ya estaba sirviendo en la oficina de la Misión Norte del Adriático, con sede en Zagreb, Croacia.
Pero no está allí solo para manejar papeles.
Se le ha asignado un programa piloto para reactivar a miembros menos activos, un esfuerzo que podría impactar a muchas personas que alguna vez conocieron el Evangelio, pero se han alejado.
Con su experiencia como abogado y su amor genuino por las personas, el élder Newton está más que calificado. Pero hay algo más: su corazón roto, ahora lleno de propósito, le permite conectar con otros de maneras únicas y profundas.
No vino solo
El presidente de la misión, Brian Cordray, lo resumió así:
“No creo que el élder Newton haya venido solo. De una manera muy tangible, su esposa Kathleen está con él. Él siente su amor y apoyo desde el otro lado del velo”.
Ese amor no se ha detenido. Solo se ha transformado.
Un ejemplo para todos nosotros
Para muchos hombres mayores, la vida después de los 60 puede sentirse como una recta final. Pero el élder Newton está demostrando algo diferente:
Que Dios no termina Su obra en nosotros solo porque cumplimos más años.
Que el dolor puede convertirse en poder.
Y que aún cuando creamos que no tenemos mucho que ofrecer, el Señor nos muestra un camino… si tenemos el valor de dar el primer paso.
Hoy, Paul sirve. Mañana, muchos más.
Gracias a su decisión de intentarlo, cientos —quizás miles— de hombres solteros mayores podrán algún día vestir una placa misional y decir con gozo: “Soy misionero de Jesucristo”.
El élder Newton no es solo el primero. Es un pionero. Un ejemplo de fe tardía, sí, pero vibrante y llena de vida.
Y aunque su compañera eterna no esté físicamente a su lado, él sabe que no está solo.
Porque donde hay fe, hay compañía celestial.
Y donde hay amor… siempre hay una misión por cumplir.
Fuente: Church News
Tengo esperanzas. Le gustaría ser Misionero de tiempo completo pero estoy en silla de ruedas. No sé si me aceptarán
Que noticia tan esperanzdora !!!! Ójala pueda aplicarse a mujeres solas que tienen un ferviente deseo de transmitir el evangelio.
Claro que si
Desde el día que conocí el Evangelio sentí que mi obra en el mundo era servir y ayudar a los demás a creer y ser salvos, no tengo ni 2 años de bautizado pero deseo crecer en mi testimonio.
muchas felicidades, fue la mejor decisión
Me encantaría ser misionera en la manzana del templo , en español y de paso aprender inglés ,
No sé si podré , tengo casi 72 años, soy viuda , en mí juventud fui misionera de tiempo completo, en mí país, serví en la misión Rosario .
Ho misionera de bienestar , ayudar a empaquetar cosas .
Quiero ser misionera de tiempo completo a donde me mandes iré
Serás una excelente misionera
Soy Sylvia Hernandez de Uruguay fui misionera de templo y me encantaría poder servir una misión no importa donde solo servir soy sola y tengo 67 años. Saludos
Hola Silvia que hermosos deseos de servir, conversa con tu obispo, el te ayudara
Me encantó servir en una mision serví cuando joven porque no ahora
¿Dónde serviste Francisco?
Si??? Me alisto!! Me voy de nuevo. Servir es lo más grandioso que puede existir
serás un maravilloso misionero
Fui misionero hace 32 años y me case pero no resulto.y desde mi divórcio a la cual amaba y no resulto me enfrasque en Seguir trabajando duro en la obra y mantenerme fiel hasta el último día de mi vida. Soy líder misional y amo la obra misional. Me encantaría volver hacer misionero de tiempo completo y ayudar en la obra .apenas me jubile quiero hacer una misión otra ves.
Me he jubilado hace un par de años y siento la necesidad de seguir trabajando pensé que era esa ka inquietud que invade mi mente , sin embargo al leer este artículo sentí que es servir al señor , es a ese trabajo al que me debo preparar….
que hermoso tener esos deseos de servir al Señor, habla con tu obispo, el te ayudara a encontrar la manera de servir
Tengo 43 años actualmente sirvo como misionera en el templo, pero me gustaría seguir perfeccionando mi servicio al salvador y ser una misionera de tiemplo completo
serás una increíble misionera
Admirable su fé y conversión
Que Hermosa. Y Las mujeres tambien podran servir?
claro que si
La Obra del Señor no se detiene. Esta es una iglesia de constante revelación y por tanto el Padre Celestial, dispone de medios y de persona para llevar a cabo Su propósito con sus hijos en la Tierra. Que bueno sería volver a la Misión en unos años.
así es, Su obra seguirá creciendo
Hacé unos días Ore y le pedí a mi creador y Salvador Jesucristo que me permitieran ayudar a sus hijos y yo me gustaría fortalecer sus su fé y que me gustaría predicar el evangelio otra vez tengo 70 años y hoy veo este anuncio donde a los adultos sé les puede permitir predicar el evangelio otra vez que bendición tan grande para ellos que queremos volver a servir Yo tenía años pensar que me gustaría servir espero que me creador me permite volver ser misionero otra vez
que hermoso, gracias por compartir tu testimonio con nosotros
Soy mujer viuda desde hace ya 20 años..tengo 60 , hay un deseo inmenso de muchos años que árde fuertemente en mi corazón…Conozco mi propósito! , pero no sé si algún dia lo podré cumplir…Sueño con que ese sueño se haga realidad!..Servir a Dios en tiempo completo…+1 385 866 4510
Que hermosos deseos Lidia, habla con tu obispo, el te ayudara a encontrar la manera de servir
Ese es mi meta volver a servir al Señor en mis años Dorados …servi a los 21 años y ahora cerca de mis 60 quiero volver a servir..
serás una excelente misionera
Es muy grandioso poder servir al Señor ,tengo 62 años, soltera, soy de Ecuador ,me gustaría ser misionera.
claro que si, te invitamos a hablar con tu obispo, el te ayudara a encontrar la manera de servir
A mí me gustaría estudiar algo cerca de mi estaca que es pinos en Mérida Yucatán
acércate a tu obispo, el puede ayudarte
Quiero ser misionero y tengo 33 años. Que hago?
Tengo 74 años y soy viudo, debo usar silla de ruedas pero me encantaria servir en una misión aunque sea para morir en ella. Que puedo hacer?
Hola Amonio, qué hermosos sentimientos de servir. Te animamos conversarlo con tu obispo. Esperemos saber de ti pronto como misionero.