En el distrito de Punchana, en Iquitos, Perú, la paz de una noche común se vio interrumpida por un insólito hecho: un sujeto fue sorprendido intentando llevarse varias sillas de un centro de reuniones (capilla) de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El incidente ocurrió en la sede ubicada en la calle Trujillo, cerca de la intersección con la avenida Freire. Las cámaras de seguridad del centro de reuniones captaron el momento en que el presunto delincuente cargaba las sillas y, en un acto desesperado, intentaba arrojarlas a la calle trepando el muro con rejas de fierro.
Sin embargo, su plan quedó frustrado gracias a la rápida acción de los agentes del Serenazgo de Punchana, quienes intervinieron de inmediato, impidiendo que el hurto se concretara.
Más allá de lo anecdótico, este hecho resalta la importancia de contar con sistemas de seguridad y vigilancia activa en los lugares de culto, no solo para proteger los bienes materiales, sino también para preservar la tranquilidad de la comunidad que se reúne en ellos.
La capilla seguirá siendo un espacio de paz, y este intento de robo quedará como recordatorio de que la vigilancia ciudadana y la respuesta rápida pueden marcar la diferencia.
Fuente: Iquitos al Rojo Vivo
