Un lunes por la mañana, en pleno inicio de mayo, un grupo de misioneros de servicio de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días comenzó una tarea que parecía sencilla, pero que con el tiempo se convertiría en una experiencia transformadora: digitalizar cientos de fotografías en el Martin Luther King Jr. International Chapel de Morehouse College, la reconocida universidad afroamericana en Atlanta.
Una colaboración inesperada

El proyecto nació de la amistad entre el reverendo Lawrence Edward Carter Sr., decano fundador de la capilla, y líderes de la Iglesia de Jesucristo.
Carter, conocido cariñosamente como “Dean Carter”, es considerado un guardián de la memoria histórica de Morehouse.
Durante casi cinco décadas ha reunido en su oficina una colección personal de imágenes que retratan la influencia de la universidad en los movimientos de derechos civiles y no violencia en Estados Unidos.
En una visita a los archivos de la Iglesia en Salt Lake City, Carter comentó que debía llevarse estas fotografías cuando se jubilara, pues eran de su propiedad.
Fue entonces cuando amigos cercanos y líderes locales imaginaron la posibilidad de preservarlas digitalmente con la ayuda de jóvenes misioneros. La propuesta se convirtió en realidad pocas semanas después.
Lunes de cámaras y luces

Cada lunes, durante 12 semanas, un pequeño grupo de misioneros llegaba al campus con cámaras, trípodes y lámparas.
El proceso era meticuloso: retirar un cuadro, acomodarlo bajo la iluminación correcta, enfocar y capturar la imagen con precisión. Así, uno tras otro, lograron digitalizar cerca de 400 fotografías.
El reverendo Carter expresó su gratitud al ver cómo los jóvenes dedicaban tiempo y energía a lo que él llamó “hacer hablar a las paredes”.
Para él, colocar estas imágenes en formato digital no era solo un acto de preservación, sino una manera de ampliar el acceso al legado histórico de Morehouse y su rol en la construcción de una nación más justa.
Crecimiento personal y espiritual

Uno de los misioneros, el élder Garrett Wilson, asumió el papel de fotógrafo principal. Para él, esta oportunidad representó “el punto más alto” de su misión.
Con experiencia previa en fotografía y tras un cambio inesperado de misión por motivos de salud, Wilson encontró en este proyecto una nueva forma de servir y de crecer.
“Usar mis talentos en una misión de servicio me ha permitido disfrutarla y amarla».

Su padre añadió que esta experiencia reafirmó el valor de los misioneros de servicio, quienes a menudo sienten que su labor es menos visible que la de quienes predican de puerta en puerta.
“El Señor ve el mismo potencial en ambos”.
Otro joven, Gavin Rhinehart, también con experiencia en fotografía, finalizó su misión con gratitud por haber participado. Contó que el servicio le permitió conocer personas y comunidades diferentes a las suyas, y que eso fortaleció su testimonio.
“El servicio me ayuda a sentir el Espíritu y a construir puentes con quienes piensan distinto”.

Más allá del beneficio personal para los misioneros, líderes de la Iglesia y del propio Morehouse coincidieron en que el proyecto tuvo un impacto comunitario.
El presidente de misión Russell V. Judd subrayó la importancia de documentar una parte fundamental de la historia de los líderes del movimiento por los derechos civiles.
“Es un beneficio invaluable para la comunidad y un servicio que, sin duda, agrada al Salvador”.
Las copias digitales se entregarán a la dirección de la capilla, que planea publicarlas en línea y utilizarlas en un futuro libro sobre la historia de Morehouse.
Fuente: Church News
Video relacionado
@masfe.org No puedo solo Señor ❤️🩹 #masfe #inspiracioncristiana #jesusteama #jovenescristianos #juventudcristiana ♬ original sound – Masfe.org



