En redes sociales, dos videos recientes han captado la atención por mostrar algo que muchas veces pasa desapercibido, lo cual es la forma en que los misioneros sirven con todo el corazón, incluso bajo la lluvia o entre el trabajo más pesado.
Sirviendo bajo la lluvia
El primer video, viral en TikTok, muestra a un grupo de misioneros caminando bajo una lluvia torrencial, sin paraguas y empapados, pero sonrientes. El texto del video dice:
“Si no me vas a buscar bajo la lluvia como los misioneros, entonces no quiero nada.”
@mon_serrath7
Aunque la frase se usa con humor, el mensaje es que hay personas dispuestas a salir bajo cualquier circunstancia para compartir esperanza, como los misioneros y misioneras. Es un recordatorio de que el amor cristiano no se demuestra solo cuando es cómodo hacerlo.
Servir sin cámaras, sin reconocimiento y sin excusas
En otro video, esta vez en Facebook, se ve a un grupo de tres misioneros ayudando a descargar ladrillos de un camión.
No están predicando con palabras, pero sus acciones nos enseñan que el servicio es una forma poderosa de enseñar el Evangelio.
Mientras conversan con los trabajadores y comparten sonrisas, se nota que su presencia no busca protagonismo. Ellos simplemente ayudan porque quieren seguir el ejemplo del Salvador, quien dijo:
“El que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor” – Mateo 20:26.
Servir como Cristo
Estos dos momentos reflejan que el discipulado real se vive en lo cotidiano, en las acciones que hacemos sin pensar. A veces bajo la lluvia, a veces con las manos llenas de polvo, pero siempre con el corazón dispuesto.
Los misioneros de hoy, igual que los de antes y los que recién serán llamados, no solo comparten mensajes, sino que encarnan el mensaje.
Enseñan con su ejemplo que servir al prójimo no requiere condiciones perfectas, sino disposición sincera.
Cuando servimos, algo cambia en nosotros
Ver estos videos nos invita a pensar en nuestra propia manera de servir. Tal vez no todos tengamos una placa en el pecho, pero sí podemos llevar el nombre de Cristo en el corazón y buscar formas de aliviar las cargas de los demás.
Como enseña el presidente Russell M. Nelson:
“El gozo que sentimos tiene poco que ver con las circunstancias de nuestra vida y todo que ver con el enfoque de nuestra vida.”
Y cuando el enfoque es servir, incluso bajo la lluvia, encontramos ese gozo que el mundo no puede ofrecer.
