La semana pasada se dio a conocer en el diario Daily Beast, la historia que narra acerca de una joven política rusa que intenta conseguir la prohibición de existencia de miembros de nuestra religión en Rusia.
Yekaterina Steniakina, es una de las jóvenes políticas más influyentes de ese país; líder del Movimiento pro Kremlin llamado popularmente “Los Guardias de la Juventud”. Ella está decidida en cambiar muchas cosas dentro de su país, pero lo que marca la diferencia en su plan de trabajo es una de sus más persistentes propuestas y es la que va dirigida directamente a “los mormones”.
Yerekina es la cara de una incentiva que intenta cambiar la legislación del país y prohibir miembros y misioneros de nuestra Iglesia. Actualmente existen 400 misioneros sirviendo en Rusia y hay aproximadamente 21 mil miembros viviendo ahí. Aunque estos números son una pequeña cifra en comparación a la cantidad que existe en otras ciudades grandes, en donde los misioneros tienen presencia muy visible dando clases de inglés gratis o ayudando con la limpieza de lugares públicos.
Como “Un Culto Totalitario” define a los mormones, la politica, y señala que supuestamente están enviados por el FBI y la CIA “para engañar al pueblo ruso”. Esta idea es su prioridad en la próxima campaña política.
Según lo señala Daily Beast: [El año pasado, Putin pidió a la policía rusa vigilar a las sectas totalitarias, supuestamente porque “amenazan la seguridad interna del país”. En una reunión en su residencia en Novo-Ogarevo el pasado mes de Octubre, también dio a entender que los grupos religiosos podrían tener motivos menos santos para atraer miembros. “Esto no es sólo una cacería de almas, si no que una caza de propiedad de personas”. Las palabras de Putin desataron una breve ola de manifestaciones de odio del grupo de derecha contra los misioneros mormones. Tres días después de este discurso, el ala juvenil del partido gobernante Rusia Unida envió a un grupo de provocadores a desfilar por las calles con pancartas que proclamaban: “Mormones Adiós!” y otros que decían: “Hackers de la CIA!”].
Por su parte La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se quejó ante los fiscales rusos que los “Guardias Jóvenes” violaron las leyes de libertad de culto, pero uno de los voceros señaló que la investigación no llegó a ninguna parte.
Andrei Filiminov, portavoz de la Iglesia en Rusia, afirmó: “Creo que es parte del ataque general hacia los Estados Unidos, amparado por ONG’s no gubernamentales. Nos convertimos en víctimas de una campaña xenofóbica”.
Asimismo, Filiminov reconocío que muchos rusos ven a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días con una mirada de suspicacia. “Nosotros ofrecemos ayuda en los jardines infantiles o escuelas, pero sus directores dicen: No, gracias, no necesitamos ayuda de ninguna secta”.
Los rumores en la población acerca de la Iglesia y la suma de hechos en su contra por parte de Steniakina, se repiten de manera reiterada. Uno de ellos es que los miembros han estado “inflando” la cifra de números de membresía: “Escuchamos que, en la década de los ’90, los mormones pagaron para tener acceso a los nombres de personas fallecidas y algunos de ellos fueron bautizados -tal vez la mayoría de sus 21 mil activistas son almas muertas en realidad-”, señaló la joven política.
Marina Kharlamova es parte de la Administración de la Iglesia en la ciudad de Moscú, y aclaró los dichos: “De hecho puedo bautizar a miembros fallecidos de mi familia para unirla más; así, todos estaremos juntos. Pero también creo que, por ejemplo mi abuela fallecida que está en el cielo, también tiene el derecho a decidir si quiere o no unirse a nuestra Iglesia” Por su parte, Steniakina dice que si su propuesta legislativa tiene éxito no sabe a dónde van a ir los creyentes de la “secta americana” cuando salgan de Rusia: “Ya es hora para los mormones americanos de empacar sus maletas e irse. No es mi problema a donde deban marcharse”, sentenció.
Claramente la Iglesia y sus miembros en general se mantendrán en alerta mientras continúe esta historia.
Esta noticia esta circulando en varios sitios web pero mormonsud.org contacto a LDSLiving.com y la historia esta basada en hechos ocurridos en 2012. Aparentemente la campaña no tuvo éxito, y solo se muestra que el mal nunca podrá contra la verdad.
Fuente: LDSLiving.com