Multitudes de Santos de los Últimos Días salieron del Centro de Conferencias el domingo por la tarde después de la última sesión de la más reciente Conferencia General mundial de la fe, con un llamado de sus líderes a vivir una vida centrada en Cristo en una iglesia centrada en el hogar.
A lo largo de dos días “históricos,” los líderes anunciaron el ajuste en el horario semanal de los domingos de La Iglesia, anunciaron 12 templos nuevos en lugares remotos como Guam y Camboya, alentaron reiteradamente la firmeza en Cristo a través de la adversidad y enfatizaron enérgicamente el uso del nombre completo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días durante la Conferencia General Semestral N° 188.
Jesucristo nombró a La Iglesia, declaró el Presidente Russell M. Nelson, Él se siente ofendido y se suprime “su nombre sagrado” cuando las personas usan apodos para Su Iglesia. Además, este acto puede tener un costo personal para los Santos de los Últimos Días, agregó.
“Al omitir Su nombre de Su iglesia, ¿estamos quitándolo inadvertidamente a Él como el punto central de nuestra vida?” Preguntó el Presidente Nelson, que dio una explicación ferviente, detallada y sincera de su anuncio, de hace seis semanas, con respecto a que la religión ya no usaría los apodos “mormón” o “la iglesia SUD.”
[El Presidente Nelson] Dijo que el énfasis en el nombre completo [de La Iglesia] es una corrección y un “mandamiento del Señor,” no es un cambio de nombre, no es un cambio de marca comercial, no es algo cosmético, no es un capricho y no es intrascendente.
Se puso sensible cuando dijo que La Iglesia misma, la administración y los Santos de los Últimos Días, han perpetuado apodos que no incluyen el nombre de Cristo, “ignorando sutilmente todo lo que Jesucristo hizo por nosotros, incluso Su Expiación.”
“Después de todo lo que sufrió,” dijo el Presidente Nelson, su voz temblaba ligeramente, “después de todo lo que hizo por la humanidad, me doy cuenta con profundo remordimiento de que hemos transigido inconscientemente a que a la Iglesia restaurada del Señor se le llame por otros nombres y cada uno de ellos suprime el sagrado nombre de Jesucristo.”
Centrarse en Cristo
También te puede interesar: Un vistazo al plan de estudios, centrado en el hogar, de La Iglesia para el 2019
Al inicio de la primera sesión y al término de la última sesión, el Presidente Nelson dijo que los ataques contra la fe y las familias están incrementándose exponencialmente. El contraataque proactivo de los líderes de La Iglesia fue anunciar un ajuste “centrado en el hogar y apoyado por La Iglesia” en el horario dominical diseñado para fortalecer el compromiso y la conversión de los Santos de los Últimos Días a Cristo a través del estudio y el servicio en el hogar.
Mientras que el Presidente Nelson instó a los Santos de los Últimos Días a mantener el nombre de Cristo como parte esencial del nombre de La Iglesia, él y otros discursantes de la sesión de la mañana les rogaron [a los Santos de los Últimos Días] que mantuvieran a Cristo como parte esencial de sus vidas para ayudarlos a través de las inevitables aflicciones, incluidos el dolor, el sufrimiento y la angustia causados por las enfermedades físicas y el pecado. La “grandeza” y el “poder incomparable de la Expiación de Cristo” vencen a ambos, dijo.
El Presidente Henry B. Eyring, segundo consejero de la Primera Presidencia, dijo que muchas personas enfrentan pruebas a causa de sus cuerpos mortales, compartiendo un ejemplo íntimo de su propio hogar, donde las enfermedades físicas que sufre su esposa, Kathleen, la limitan a pronunciar unas pocas palabras cada día.
[El Presidente Eyring] Hace una oración por ella y canta con ella todas las mañanas y noches mientras ella pronuncia las palabras.
“Mi consuelo es este,” dijo. “El Dios amoroso que les permite estas pruebas también crea un camino seguro para superarlas. El Padre Celestial amó tanto al mundo que envió a Su Hijo Amado para ayudarnos.”
Visión consoladora
Justo antes del funeral de su esposa y su cumpleaños 90, el Presidente Russell M. Ballard habló de manera conmovedora sobre el significado del centenario de la visión de su bisabuelo sobre la redención de los muertos, una escritura y doctrina clave de los Santos de los Últimos Días.
El Presidente Joseph F. Smith recibió la revelación en vísperas de la Conferencia General en octubre de 1918, semanas antes de su muerte y después de una vida llena de dolor que lo vio perder a su padre Hyrum Smith, su tío José Smith y su madre Mary Fielding Smith, como joven. Luego, dos esposas, 13 hijos, un hermano, dos hermanas y muchas otras personas, como adulto. En ese tiempo, también lamentó la pérdida de 20 millones de personas en la Primera Guerra Mundial y otras 70 – 120 millones de personas en la epidemia de gripe de 1918.
“La revelación que recibió el 03 de octubre consoló su corazón y dio respuestas a muchas de sus preguntas,” dijo su bisnieto, el Presidente Ballard, y agregó, “La visión reveló de manera más completa la profundidad y la amplitud del Plan del Padre Celestial para Sus hijos y el amor redentor de Cristo y el poder incomparable de Su Expiación.”
La llamó celestial y dijo, “Me siento agradecido de saber que mi amada Bárbara vive y que volveremos a estar juntos con nuestra familia por toda la eternidad.”
El Élder Neil L. Andersen del Quórum de los Doce compartió el ejemplo de Richard Norby, uno de los misioneros Santos de los Últimos Días que resultó herido en el atentado terrorista en el aeropuerto de Bélgica en 2016.
“Junto a los brillantes colores de la felicidad y el gozo, los oscuros hilos de la prueba y la tragedia están profundamente tejidos en la tela del plan de nuestro Padre,” dijo, y agregó que su mensaje fue para los Norby y otras personas que se enfrentaron a desafíos y pruebas inesperadas y dolorosas.
“Estas pruebas, aunque difíciles, a menudo se convierten en nuestros mejores maestros. Cuando pacientemente permanecemos firmes en el crisol de las pruebas terrenales, el poder sanador del Salvador nos brindará luz, comprensión, paz y esperanza,” dijo el Élder Andersen.
Dijo que el templo es un bálsamo sanador para las almas heridas.
“Independientemente de lo profundas que sean las heridas de su alma, o cual sea la causa, el momento o el lugar en que suceden, o que persistan más o menos en el tiempo, ustedes no han nacido para morir espiritualmente. Están hechos para sobrevivir espiritualmente, y para vivir e incrementar su fe y su confianza en Dios.”
Ministros y pastores
Los Élderes Jeffrey R. Holland y Gary E. Stevenson del Quórum de los Doce y la presidenta general de las Mujeres Jóvenes, la hermana Bonnie H. Cordon, centraron sus discursos sobre el programa de ministración, que lleva seis meses en La Iglesia, en Cristo.
El Élder Holland se centró en el ministerio del perdón.
“El milagro de la reconciliación siempre está disponible para nosotros. Perdonar y abandonar las ofensas, viejas o nuevas, es esencial para la grandeza de la Expiación de Jesucristo.”
Aquellos que acceden a ella. Entonces, deben ministrar a los demás.
“Jesús nos pide que seamos instrumentos de Su gracia, que seamos embajadores en nombre de Cristo en el ministerio de la reconciliación… El Sanador de toda herida, aquel que rectifica todo agravio, nos pide que trabajemos con él en la impresionante labor de rectificar en un mundo que no hallará la paz de ninguna otra forma,” dijo el Élder Holland
La hermana Cordon dijo que los miembros deben desarrollar un corazón de pastor para llegar a ser hermanas y hermanos ministrantes efectivos. Además, dijo que los miembros pueden convertirse en los pastores que Dios y Su profeta necesitan al conocer y contar sus ovejas, cuidarlas y reunirlas en el rebaño de Dios.
“Contar las ovejas del Señor no es una cuestión de números, es asegurarnos de que cada persona sienta el amor del Salvador por medio de alguien que sirve por Él.”
“Espero que aquellos a los que ministren los vean como un amigo y se den cuenta de que en ustedes tienen un campeón y un confidente, alguien que estará al tanto de sus circunstancias y los apoyará en sus esperanzas y aspiraciones,” agregó.
El Élder Stevenson del Quórum de los Doce Apóstoles dijo que la nueva iniciativa de ministración de La Iglesia devela la ayuda divina para los demás.
“Elevemos nuestra mirada a esa visión profética para que podamos pastorear almas hacia el templo y finalmente, hacia nuestro Salvador, Jesucristo. Él no espera que llevemos a cabo milagros, solo pide que llevemos a nuestros hermanos y hermanas a Él porque Él tiene el poder de redimir almas.”
Instó a los miembros a aprender de un pastor moderno con un rebaño de 2000 ovejas, hoy. El pastor le contó al Élder Stevenson que “cuanto antes encontraban a las ovejas perdidas, antes de que se alejaran demasiado del rebaño, había menos probabilidades de que sufrieran algún daño. Recuperar a las ovejas perdidas, requería mucha paciencia y disciplina.”
Cristo como sanador
El Élder Dale G. Renlund del Quórum de los Doce Apóstoles dijo que el plan de Dios consiste en permitir que Sus hijos escojan lo que es correcto. Inevitablemente, todos cometen errores y pecados. Pero, Cristo brinda un camino de regreso a la senda para todos.
“Después del bautismo, todos los miembros se salen un poco del camino, algunos incluso nos lanzamos fuera de él. Por lo tanto, ejercer la fe en Jesucristo, arrepentirse y recibir ayuda de Él y ser perdonado no son hechos que ocurren una sola vez, sino procesos de por vida, procesos que son repetitivos e iterativos. Así es como perseveramos hasta el fin.”
La sanación de Cristo está disponible para todos, dijo el Élder Robert C. Gay de la Presidencia de los Setenta.
“¿Puede alguno imaginarse a nuestro Salvador dejando que ustedes y sus cargas pasen desapercibidos por Él? El Salvador miró al samaritano, a la adultera, el recaudador de impuesto, el leproso, todos eran hijos de Su Padre y todos eran redimibles. ¿Pueden imaginarlo alejándose de alguien con dudas sobre su lugar en el reino de Dios o de alguien afligido de alguna forma? Yo no. Ante los ojos de Cristo, cada alma tiene un valor infinito, nadie está preordenado a fracasar, la vida eterna es posible para todos.”
Bálsamo del templo
El Élder Andersen dijo que el templo es un bálsamo sanador para las almas heridas.
“Independientemente de lo profundas que sean las heridas de su alma, o cual sea la causa, el momento o el lugar en que suceden, o que persistan más o menos en el tiempo, ustedes no han nacido para morir espiritualmente. Están hechos para sobrevivir espiritualmente, y para vivir e incrementar su fe y su confianza en Dios.”
El Presidente Nelson volvió a abordar el tema del templo para concluir la Conferencia General, instando a los Santos de los Últimos Días a considerar la asistencia regular al templo como una inversión en sus familias y futuro.
“Nuestra necesidad de estar en el templo regularmente nunca fue mayor. Les ruego que bajo oración observen la manera en que emplean su tiempo, inviertan tiempo en su futuro y en el de su familia. Si tienen acceso posible a un templo, les insto a que encuentren la manera de fijar con regularidad una cita con el Señor para estar en Su sagrada casa y después, asistan a esa cita con exactitud y gozo. Les prometo que el Señor les proporcionará milagros que Él sabe que necesitan al hacer estos sacrificios de servir y adorar en Sus templos.”
Dijo que cada Santo de los Últimos Días necesita fortaleza y guía espiritual regularmente, que “solo es posible en la Casa del Señor.” El nuevo énfasis de La Iglesia en el aprendizaje espiritual “centrado en el hogar” hace posible otro santuario, agregó.
“El nuevo curso de estudio integrado centrado en el hogar y apoyado por La Iglesia tiene el potencial de desatar el poder de las familias al seguir cada una de ellas dicho curso de manera consciente y cuidadosa para transformar su hogar en un santuario de fe.”
Artículo originalmente escrito por Tad Walch y publicado en deseretnews.com con el título “Historic conference: Church members will strive to live a Christ-centered life in a home-centered church.”