El Presidente Russell M. Nelson de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días llegó a Sudamérica junto a su esposa Wendy Nelson quien en cada devocional, viene ofreciendo su discurso previo al del profeta.
Un impactante discurso
Desde el primer devocional en Perú hasta el tercero que se efectúo en Paraguay, los miembros y en especial las mujeres de la iglesia, resaltan que lo más sorprendente después de escuchar al Presidente Nelson hablar en español, fue escuchar el discurso de la hermana Nelson.
“Esta noche mi mensaje se trata de que Russell M. Nelson es un profeta de Dios en estos días y que él recibe instrucción del Señor. Algunos de ustedes se preguntarán cómo es que son las cosas en nuestro hogar desde que el Presidente Nelson es el Presidente de la Iglesia, permítanme contarles: Durante nuestros 12 años de matrimonio, me he acostumbrado a que mi esposo se levante algunas veces por la noche con ideas para sus mensajes de la Conferencia General, pero desde que él se ha convertido en el Presidente de la Iglesia, el número de mensajes que él recibe en las noches desde los cielos, se han incrementado dramáticamente”, testificó la hermana Nelson.
La discreción y devoción que necesita tener la esposa de un profeta
La hermana Nelson explicó que los mensajes que recibe del Señor, el Presidente Nelson los transcribe en unas hojas amarillas que guarda en la mesita de noche al lado de su cama y ella recalca: “Así que yo tengo mucho cuidado de nunca leer esos pensamientos”. Además contó: “Algunas veces, el Señor permite que yo esté cerca mi esposo mientras él recibe instrucción. Por ejemplo, algunas veces por las noches, mi esposo me dice: ‘okey, cariño, está sucediendo y yo permanezco callada mientras él está escribiendo sus notas”.
“Sin embargo, un sábado de enero, yo fui despertada mucho más temprano de lo que yo quería despertar y pude sentir que tenía que salir de la cama, aunque yo no había terminado de dormir, sentí ese impulso que debía salir de la cama en ese momento. Así que salí de la habitación y trabajé en varios proyectos en nuestro hogar y dos horas después, mi esposo salió de nuestra habitación y me dijo: ‘Wendy, no vas a creer lo que ha pasado, por las dos últimas horas desde que tú saliste de la habitación, el Señor me ha dado instrucciones detalladas sobre un proceso que debo seguir´. Este tipo de experiencias sucede muy a menudo, de que yo me despierto y salgo de la habitación para que mi esposo pueda recibir más conocimiento”.
Una testigo especial
“Yo soy un testigo por estar presente y soy testigo por también estar ausente de que el Señor en realidad instruye a Su profeta”, testificó la hermana Wendy Nelson, quien compartió otra experiencia:
“En los últimos 9 meses, ha sido una experiencia bastante interesante enviar a mi esposo al trabajo porque cuando él regresa de un día arduo de trabajo, de reuniones y decisiones que se toman en la Iglesia, el hombre al que recibo al final del día es un poco diferente del que me despedí en la mañana y ¿cuáles son algunos de esos cambios que he visto? Lo he escuchado que es un poco más claro cuando habla sobre doctrina y utiliza términos que nunca lo había escuchado hablar… Incluso lo noto más joven cuando lo veo en el púlpito”.
Un contundente testimonio
Antes de concluir su mensaje, la hermana Nelson declaró: “Es mi testimonio de que Russell M. Nelson es el Profeta del Señor en la tierra, hoy en día, que fue preparado para el recogimiento de Israel en ambos lados del velo y para preparar a la Iglesia y al mundo para la Segunda Venida de Jesucristo. Hermanos y hermanas, esta es la Iglesia del Señor… y el profeta es Su profeta, escogido e instruido por Él”.