Durante la sesión de mujeres del sábado por la noche de la Conferencia General, la Presidenta General de las Mujeres Jóvenes, la hermana Bonnie H. Cordon compartió una versión actualizada del lema de las Mujeres Jóvenes:
Soy una hija amada de Padres Celestiales, con una naturaleza divina y un destino eterno.
Como discípula de Jesucristo, me esfuerzo por llegar a ser semejante a Él. Busco revelación personal y actúo en conformidad con ella y ministro a otras personas en Su santo nombre.
Seré testigo de Dios en todo momento, en todas las cosas y en todo lugar.
A medida que me esfuerzo por ser merecedora de la exaltación, valoro el don del arrepentimiento y procuro mejorar cada día. Con fe fortaleceré mi hogar y mi familia, haré y guardaré convenios sagrados y recibiré las ordenanzas y las bendiciones del santo templo.
Este lema les recuerda a las mujeres jóvenes quiénes son, cuál es el propósito de su vida y cómo deben vivir. Cada domingo, las mujeres jóvenes de todo el mundo repetirán este nuevo lema, se repetirán a sí mismas y a las demás mujeres jóvenes que cada una de ellas es una hija especial de Padres Celestiales.
El nuevo lema proporciona un enfoque maravilloso para las mujeres jóvenes y, si se entiende, también puede ser un enfoque maravilloso para los hombres jóvenes.
También te puede interesar: Las Presidencias de los Hombres Jóvenes de Barrio serán descontinuadas
Con demasiada frecuencia, escuchamos sobre las actualizaciones que ocurren en organizaciones de las que no formamos parte y suponemos que no se aplican a nosotros. Esta idea está lejos de la verdad. El Evangelio de Jesucristo se aplica a todas las personas. Este nuevo tema puede proporcionar la misma dirección para los hombres jóvenes, las mujeres y los hombres que para las mujeres jóvenes.
Cuando estaba en los Hombres Jóvenes, sabía que las Mujeres Jóvenes tenían un lema que repetían cada semana. Sin embargo, nunca estudié su lema ni supe qué significaba exactamente lo que decían. Ahora, años después, desearía haberlo hecho.
Los hombres jóvenes y sus líderes tienen la oportunidad de leer, estudiar y enseñar el nuevo lema en clase y por su cuenta. Las doctrinas enseñadas en este lema son eternas y poderosas.
Aplicar el lema a los hombres jóvenes es fácil. Al igual que a las mujeres de la Iglesia se les enseña con frecuencia que las palabras “hombre”, “hombres” o “humanidad” en las Escrituras se pueden aplicar a ellas, los hombres pueden leer la palabra “hija” con el significado de “hijo”.
Con esta edición personal, el lema dice:
Soy [un hijo amado] de Padres Celestiales, con una naturaleza divina y un destino eterno.
Como [discípulo] de Jesucristo, me esfuerzo por llegar a ser semejante a Él. Busco revelación personal y actúo en conformidad con ella y ministro a otras personas en Su santo nombre.
Seré testigo de Dios en todo momento, en todas las cosas y en todo lugar.
A medida que me esfuerzo por ser [merecedor] de la exaltación, valoro el don del arrepentimiento y procuro mejorar cada día. Con fe fortaleceré mi hogar y mi familia, haré y guardaré convenios sagrados y recibiré las ordenanzas y las bendiciones del santo templo.
No, no se espera que el nuevo lema sea modificado y repetido por cada quórum del sacerdocio cada domingo. Las verdades que se enseñan son universales.
Con frecuencia, un hombre joven debe recordarse a sí mismo que es un hijo de Padres Celestiales y que existe un plan para su salvación. Asimismo, un hombre joven debe repetir su compromiso de ser testigo de Dios y vivir el Evangelio.
Me encanta el nuevo lema de las mujeres jóvenes y espero que los hombres jóvenes lo lean y estudien tanto como sus hermanas en el Evangelio. Si lo hacen, calificarán para la experiencia que la hermana Cordon prometió poco después de compartir el nuevo lema, dijo:
“Estas verdades se aplican a ustedes de manera individual… Tú eres un discípulo de nuestro salvador, Jesucristo, bajo convenio. Te invito a estudiar y meditar estas palabras. Sé que al hacerlo obtendrás un testimonio de su veracidad. Entender esas verdades cambiará la manera en la que afrontes los desafíos. Conocer tu identidad y tu propósito te ayudará a ajustar tu voluntad a la del Salvador”.
Esta es una traducción del artículo que fue escrito originalmente por Tommy Johnson y fue publicado en ldsliving.com con el título “Why Young Men Should Study the New Young Women Theme”.