Creo que no me equivoco al decir que todas las iglesias afirman ser “la única y verdadera iglesia o religión”, ¿cierto? De hecho, afirmamos ser la Iglesia restaurada de Cristo. Pero, ¿qué creen los Santos de los Últimos Días (también conocidos como “mormones”) que te va a pasar si no te bautizas en su Iglesia?
Creo que no me equivoco al decir que todas las iglesias afirman ser “la única y verdadera iglesia o religión”, ¿cierto?
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días no es una excepción. Afirmamos ser la Iglesia restaurada de Cristo.
Pero, ¿qué creen los Santos de los Últimos Días que te va a suceder si no te bautizas en nuestra Iglesia?
¡¿Infierno y condenación?! Respira hondo, hablaremos del tema.
El cielo y el infierno
No todas, pero algunas denominaciones cristianas simplemente enseñan que si no crees que Jesucristo es tu Salvador, te irás al infierno.
De ser cierto eso, la gran mayoría de la humanidad estaría condenada al tormento eterno.
No es tan simple para los Santos de los Últimos Días. Nuestras creencias sobre el cielo y el infierno son un poco diferentes.
Por ejemplo, creemos que el “Cielo” tiene algunos niveles diferentes, a los que a menudo nos referimos como “Reinos de Gloria”.
El Reino Celestial
El reino donde viven Dios el Padre y Jesucristo se llama Reino Celestial.
Los que estarán ahí son aquellos que aceptan a Jesucristo, se arrepienten de sus pecados, se esfuerzan por guardar los mandamientos y reciben ciertas ordenanzas por alguien con la debida autoridad, como el bautismo.
El Reino Terrestre
El reino debajo del anterior se llama Reino Terrestre.
Los que estarán aquí son buenas personas que fueron “cegadas por las artimañas de los hombres” o personas, incluso Santos de los Últimos Días, que no fueron “valientes en el testimonio de Jesús” estando en vida.
Si bien es posible que Cristo no viva en este reino, creemos que visitará y ministrará a estas personas de vez en cuando.
Entonces, ¿es este reino el “Infierno”?
No. Osea, podrías considerarlo un Infierno en el sentido que deberás vivir con el hecho de que pudiste haber heredado el Reino Celestial.
Aún así, este sigue siendo un reino de los Cielos. Cristo todavía estará aquí. La gente será feliz en ese lugar.
El Reino Telestial
El último reino se llama Reino Telestial.
Aquí es donde irá lo peor que la humanidad tiene para dar. Pero incluso aquí las personas obtendrán un cierto nivel de felicidad.
Cristo no los visitará, pero el Espíritu Santo lo hará de vez en cuando.
El punto es que, sin importar a qué religión pertenezcas, los Santos de los Últimos Días creen que un reino de cielo te espera.
No me malinterpretes, si hay cosas de las que no nos hemos arrepentido, sufriremos por ellas, pero eventualmente todos terminarán en el Reino Celestial, Terrestre o Telestial.
No todos son igual de geniales, pero todos son parte del cielo.
¿Tengo que ser un Santo de los Últimos Días para ingresar al Reino Celestial?
Mucha gente siente que esa es una doctrina condescendiente porque obviamente nadie quiere estar en un reino inferior, pero en realidad es bastante misericordioso si es que la única otra opción es un infierno eterno, como lo es en muchas religiones.
Por supuesto, el objetivo de todos debería ser vivir dignos del Reino Celestial.
Entonces, la siguiente pregunta es: ¿tengo que ser un Santo de los Últimos Días para ingresar al Reino Celestial?
La respuesta corta es NO.
Las personas en los días de Cristo no eran llamados Santos de los Últimos Días. Técnicamente Moisés no era un Santo de los Últimos Días.
Lo que importa es que cumplamos con los requisitos que Cristo estableció. Uno de esos requisitos es el bautismo por la autoridad del sacerdocio.
Creemos que esa autoridad sólo se encuentra dentro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, así que ahí está el asunto. La respuesta es no, pero por inferencia, sí.
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Templo de Saporo, Japón
Uno de los propósitos de los templos de los Santos de los Últimos Días es realizar bautismos indirectos por las personas que han fallecido y que no tuvieron la oportunidad de aprender sobre Cristo y ser bautizados en vida.
Las personas que han fallecido, ahora espíritus, tendrán la oportunidad de aceptar o rechazar ese bautismo.
No consideramos a las personas que han sido bautizadas después de morir como Santos de los Últimos Días, porque no sabemos si aceptaron o no ese bautismo.
Incluso si lo aceptan, dudo que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días exista en la otra vida de la misma forma que lo hace aquí.
Templo de Durban, Sudáfrica
Nuestras escrituras simplemente enseñan:
“Todos los que han muerto sin el conocimiento de este evangelio, quienes lo habrían recibido si se les hubiese permitido permanecer, serán herederos del reino celestial de Dios;
también todos aquellos que de aquí en adelante mueran sin un conocimiento de él, quienes lo habrían recibido de todo corazón, serán herederos de este reino;
pues yo, el Señor, juzgaré a todos los hombres según sus obras, según el deseo de sus corazones”. -DyC 137: 7-9
Un Dios de amor, misericordia y justicia
El último punto que quiero hacer es este: Dios es justo. Él no está buscando excusas para excluirte del cielo. Él te quiere allá. Él es tu Juez y lo verá todo al tomar Su decisión final.
Tus circunstancias, creencias, biología, genética, cultura, todo.
Si estás haciendo todo lo posible para vivir una vida como la de Cristo durante tu tiempo en este pequeño planeta azul, estoy seguro de que, sin importar tu religión, te sentirás a gusto con el lugar donde estarás en las eternidades.
O, si la perspectiva de los Santos de los Últimos Días es errónea, todos estaremos en serios problemas.
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