La Presidencia General de la Escuela Dominical habla sobre cómo abordar el plan de estudios 2019 de “Ven, Sígueme”

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Al igual que otros miembros de las presidencias generales y el personal de la Iglesia que están probando el nuevo plan de estudios integrado “Ven, sígueme” de 2019, el Hermano Tad R. Callister ha buscado oportunidades para implementar sus patrones, principios y prácticas en los entornos de estudio del Evangelio a nivel personal y familiar.

Cuando el presidente general de la Escuela Dominical y los miembros de su familia extensa estuvieron leyendo los capítulos sobre Isaías de 2 Nefi en el Libro de Mormón, un tramo desafiante de los escritos y expresiones del Antiguo Testamento, el hermano Callister atrapó a uno de sus nietos adolescentes con una pregunta acerca de si podía identificarse con 2 Nefi 15, un capítulo sobre las profecías de Isaías con respecto a los medios de transporte modernos.

El nieto identificó un tren por la descripción de sus ruedas y las chispas de la vía. Ese diálogo, a su vez, condujo a más conversaciones sobre cómo y por qué Isaías profetizó milenios antes sobre el recogimiento de Israel en los últimos días y cómo el antiguo profeta describió un transporte desconocido para su época.

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Este fue un vistazo al potencial del nuevo plan de estudios del Evangelio “centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia” y el énfasis que lo acompaña, una experiencia elevada de aprendizaje para las personas y las familias, con beneficios independientemente de la edad del alumno o el maestro.

“Creo que si desarrollamos ese patrón, al intentar hacer preguntas inspiradas y al dar la oportunidad a nuestros hijos de responder, nos sorprenderemos de cuanto entendimiento y revelación vendrá sobre ellos,” dijo el hermano Callister, agregando, “si en verdad les das una oportunidad, recibirás comentarios increíbles de estos pequeños de 8 años o de un adolescente de 13 años.”

El hermano Callister se unió recientemente a sus consejeros en la Presidencia General de la Escuela Dominical: el hermano Devin G. Durrant, primer consejero, y el hermano Brian K. Ashton, segundo consejero, para discutir con Church News sus ideas y esperanzas sobre el plan de estudios 2019 y el papel de la Escuela Dominical.

Un nuevo comienzo

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Manuales “Ven,Sígueme” 2019.

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El hermano Durrant ve la novedad a su alrededor: nuevo año, nuevo plan de estudios, nuevo tema de estudio (el Nuevo Testamento) así como nuevas oportunidades de decidir cómo se usará el tiempo disponible durante el día de reposo y refinará las nuevas prácticas de estudio y discusión en el hogar.

“De cierta manera, es una oportunidad para arrepentirse, cambiar, empezar de nuevo y ser más diligente en el estudio personal así como en el estudio familiar del Evangelio,” dijo.

El hermano Ashton agregó: “Tenemos la oportunidad de hacer lo que el Presidente Nelson dijo, convertir nuestros hogares en centros de aprendizaje del Evangelio.”

“Oferta con todo incluido”

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El hermano Callister dice que escuchó a los hermanos hablar durante cierto tiempo sobre un cambio en los horarios de las reuniones de la Iglesia, pero siempre faltaba algo en las discusiones.

“Luego, el plan de estudios integrado apareció y no solo se trata de la reducción de tiempo en la Iglesia, sino también de brindar un medio y un énfasis para enseñar el Evangelio en el hogar, que no teníamos antes,” dijo. “Es una especie de oferta con todo incluido, va de 3 a 2 horas (de reuniones), pero aquí están los materiales para ayudarlo a utilizarlo los domingos con prudencia.”

La enseñanza en el hogar no es nada nuevo, dado que las décadas de manuales y siglos de Escrituras como Deuteronomio 6 y Doctrina y Convenios 68 enfatizan dichas responsabilidades.

“Entonces, aunque siempre comprendimos que los padres son los principales maestros de los hijos,” dijo el hermano Durrant, “ahora tenemos un recurso que nos ayuda a implementar y brindar esas experiencias de aprendizaje y enseñanza en el hogar.”

El hermano Ashton llama al énfasis del estudio del Evangelio de 2019 “un nuevo patrón” en vez de un nuevo programa. “En mi opinión, gran parte de lo que hemos hecho en la Iglesia es solo leer las Escrituras. El mandamiento es deleitarnos, y este es un patrón de cómo deleitarnos [en las Escrituras]”

El ajuste centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia es sinérgico: estudiar en casa para prepararse para las reuniones de la Iglesia y compartir buenas experiencias de la Iglesia, a su vez, mejora el estudio en el hogar, dijo el hermano Callister. Y, un aumento en la frecuencia de estudio debe fomentar una mayor calidad recíproca.

“Tal como el Presidente Nelson dijo estamos yendo de la enseñanza en el hogar a ministrar, una manera más elevada y santa en que esperamos pasar de solo leer las Escrituras a reflexionar sobre ellas, que es una forma más elevada y santa de invitar a la revelación,” dijo.

Más que solo el domingo

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En lugar de ser una serie de clases semanales separadas, la Escuela Dominical ahora comparte un espacio de reuniones de segunda hora con los quórums del sacerdocio y otras organizaciones auxiliares.

El hermano Durrant dijo que espera que los miembros regresen de las clases dominicales y continúen compartiendo y discutiendo el Evangelio “hasta que regresemos a la Iglesia… para que el Evangelio se convierta en parte de cada día, una parte de nuestra conversación y los hilos que se tejen durante toda la semana, no solo se contengan cierto tiempo.”

Pero, uno no solo debe centrarse en una mejor experiencia de estudio dominical, explica el hermano Callister.

“La visión aquí es que el domingo sea una parte clave, pero queremos que nuestros hermanos estudien las Escrituras en familia todos los días y esto nos permite hacerlo,” dijo y agregó que si bien el domingo permite un tiempo más enfocado de estudio y discusión, oportunidades similares pero más breves pueden venir a lo largo de la semana.

“Es un total de experiencias familiares y personales, diarias y semanales, que nos ayuda a interesarnos en las Escrituras”.

Preparación y revelación

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El Presidente General de la Escuela Dominical, el hermano Tad R. Callister, en el centro, y sus consejeros, el hermano Devin G. Durrant, a la izquierda, y el hermano Brian K. Ashton, a la derecha.

Ahora más que nunca, los maestros de la Escuela Dominical tendrán más material de discusión del que posiblemente se pueda enseñar en un marco de 50 minutos. Y, con las clases de la Escuela Dominical programadas para el primer y tercer domingo del mes, puede haber entre 2 y 5 semanas entre las discusiones de la clase, teniendo en cuenta los ajustes del calendario y los posibles conflictos con las conferencias programadas.

La premisa del nuevo plan de estudios es que el maestro “comience leyendo el bloque de Escrituras y orando para saber lo que el Señor desea que enseñe, y si necesita ayuda, entonces, recurra al manual,” dijo el hermano Ashton.

La lógica, explicó el hermano Callister, “es que si lo haces, incrementarás tu revelación personal y el resto del material se convertirá en un complemento de tu revelación, no en un reemplazo de tu revelación.

“Está diseñado para que los maestros no solo den lecciones sino también den revelación personal,” dijo.

Asumir la responsabilidad

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Con maestros que han recibido la capacitación de “enseñar a la manera del Salvador” durante varios años, el hermano Durrant ve el nuevo plan de estudios como una oportunidad para aplicar esos principios: amar a los que enseñamos, prepararnos por el Espíritu, enseñar la doctrina, enseñar por el Espíritu y extender invitaciones a los miembros de la clase para actuar.

“Con el nuevo plan de estudios, todos somos invitados a asumir la responsabilidad de nuestro propio aprendizaje,” dijo. “Y, un maestro puede ayudar en ese proceso.”

Al combinar los principios de “enseñar a la manera del Salvador” con el plan de estudios integrado 2019 “Ven, sígueme”, el estudio del Nuevo Testamento constituye un “ejemplo maravilloso y una excelente oportunidad… no solo para enseñar la doctrina sino para ver cómo enseñó el Salvador.” Dijo el hermano Durrant.

El Hermano Callister enfatizó que las declaraciones de los temas del manual no son simplemente declaraciones objetivas sino doctrinales, no simplemente “Jesús fue al jardín de Getsemaní”, sino que “Jesús sufrió en el jardín de Getsemaní para poder pagar el precio de nuestros pecados.” Todos los siguientes materiales en el manual (historias, preguntas, videos y más) se alinean con la doctrina que se enseña.

“Todo está diseñado para apoyar la doctrina, que sabemos que es el mayor poder de conversión, cuando el Espíritu la enseña,” dijo.

Al asemejar a los maestros con pastores, el hermano Ashton dice que una reducción de instrucción en el aula puede resultar en un mayor tiempo disponible para que los maestros salgan del aula de clases para satisfacer las necesidades de los alumnos, como alentarlos o ayudarlos en el hogar del maestro o del alumno.

Otra vía para mejorar la preparación anticipada es fomentar el estudio a través de las redes sociales u otros métodos en línea, con un grupo en Facebook o WhatsApp para compartir ideas a lo largo de las semanas. “Se puede obtener más que una conversación”, dijo el Hermano Ashton, “alentará a las personas a estudiar.”

Posibilidades infinitas

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Para las familias con hijos más pequeños y la capacidad de atención más joven o las familias que sienten que el nuevo plan de estudios es demasiado exigente o más que una carga, el hermano Durrant dice:

“Los padres deben sentirse libres de seguir al Espíritu y hacer lo que ellos sientan que es bueno al estudiar el Evangelio personalmente y con sus hijos, y cómo compartir esta información. No estamos prescribiendo una “forma correcta.” Solo los estamos invitando a permitir que el aprendizaje del Evangelio se dé en el hogar como mejor les parezca.”

Los padres pueden proporcionar a sus hijos una ventaja aún mayor si les enseñan a no solo ser buenos alumnos, sino buenos maestros, agregó el Hermano Callister.

“Podemos hacer esto mucho mejor en nuestros salones de clase y en nuestros hogares a fin de capacitar a nuestros hijos no solo para aprender el Evangelio, sino también para enseñar el Evangelio. Profundiza más en tu alma cuando lo meditas y lo dices. Desarrolla tu propio testimonio así como tus capacidades y serás un mejor siervo en el Evangelio.”

Artículo originalmente escrito por Scott Taylor y publicado en thechurchnews.com con el título “Sunday School general presidency talks about how to approach ‘Come Follow Me’ 2019 curriculum.”

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