El Año Nuevo Chino 2025, que se celebra hoy, 29 de enero, marca el inicio del Año del Serpiente de Madera según el calendario lunar. Para millones de personas en todo el mundo, esta festividad es un tiempo de reflexión, renovación y esperanza para el futuro.
Año Nuevo Chino. Créditos: Amril Izan Imran, Alamy Stock Photo
Como Santos de los Últimos Días, también creemos en la importancia de los nuevos comienzos, y no hay mejor fuente de renovación que nuestro Salvador Jesucristo.
El Año Nuevo y la oportunidad de empezar de nuevo
El Año Nuevo Chino es una época llena de simbolismo: la limpieza del hogar para deshacerse de la mala suerte, el compartir en familia, los sobres rojos con buenos deseos y los fuegos artificiales que iluminan el cielo.
Todo apunta a un mismo propósito: comenzar el año con un corazón renovado y lleno de esperanza.
El Evangelio de Jesucristo realmente es buenas nuevas de gran gozo. Es un mensaje de una esperanza sin igual.
De la misma manera, en el Evangelio de Jesucristo tenemos la oportunidad de comenzar de nuevo, sin importar lo que hayamos vivido en el pasado. Gracias a Su Expiación infinita, podemos dejar atrás nuestras cargas, errores y debilidades, y mirar al futuro con fe. Como el Señor enseñó:
“Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar” (Mateo 11:28).
La verdadera renovación viene de Cristo
Mientras que en el Año Nuevo Chino muchos escriben sus propósitos y se esfuerzan por atraer la buena fortuna, nosotros sabemos que la verdadera paz, fortaleza y transformación vienen al seguir a Cristo. En Él encontramos:
- Una nueva identidad: No somos definidos por nuestros errores, sino por nuestro potencial divino.
- Esperanza en el futuro: No importa cuán difícil haya sido nuestro pasado, Cristo nos ofrece un nuevo comienzo.
- Poder para cambiar: A través del arrepentimiento y el poder del Espíritu Santo, podemos convertirnos en mejores discípulos.
El profeta Isaías expresó esta promesa del Señor de una manera hermosa:
“No os acordéis de las cosas pasadas, ni traigáis a memoria las cosas antiguas. He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz” (Isaías 43:18-19).
Haciendo espacio para Cristo en este nuevo año
Así como las familias chinas limpian sus hogares antes del Año Nuevo para recibir bendiciones, podemos hacer lo mismo espiritualmente. Algunas formas de hacerlo incluyen:
- Perdonar y dejar atrás el pasado. Cristo nos enseña a perdonar a los demás y a nosotros mismos.
Fortalecer nuestra relación con Dios. Orar, leer las Escrituras y asistir al templo nos ayuda a recibir Su guía. - Servir a los demás. Un corazón generoso es un corazón renovado.
Este Año Nuevo Chino, ya sea que celebremos con una cena familiar o simplemente reflexionemos en nuestras metas, recordemos que en Cristo siempre hay nuevos comienzos.
¡Feliz Año Nuevo Chino! 新年快乐 (Xīnnián kuàilè)!
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@masfe.org Hoy empieza el año nuevo chino y esta es una muy buena oportunidad para desechar malos hábitos, limpiar nuestros corazones, superarnos a nosotros mismos y poner en práctica lo que enseñó el apóstol Pablo: “si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí, todas son hechas nuevas” ✨ 2 Corintios 5:17. #añonuevochino #añodelaserpiente #corintios #biblia #versiculo #iglesia #consejo #2025 #reflexion #cambios #superacion ♬ sonido original – Masfe.org
