En el ajetreo de la vida universitaria, es fácil sentir que no hay suficientes horas en el día para cumplir con todas las responsabilidades. Entre clases exigentes, trabajos de medio tiempo y actividades extracurriculares, el tiempo parece escapar.
Sin embargo, el élder Ronald A. Rasband, del Cuórum de los Doce Apóstoles, tiene un consejo claro y poderoso para los jóvenes Santos de los Últimos Días: dedícale al Señor la misma cantidad de tiempo que dedicas a tus estudios.
Una invitación a priorizar lo eterno
En su reciente mensaje, el élder Rasband reconoció las múltiples demandas que enfrentan los jóvenes en la universidad:
“Quizás estés pensando: ‘No tengo tiempo para eso, élder Rasband. Ya estoy demasiado comprometido; tengo que sacar buenas notas; estoy tomando demasiadas horas de crédito; tengo profesores exigentes que esperan toda mi atención; estoy trabajando; y apenas puedo ir a la iglesia los domingos’”.
A pesar de estas preocupaciones legítimas, el élder Rasband extendió una invitación que puede transformar vidas:
“Dale al Señor la misma cantidad de tiempo durante tu experiencia universitaria, y luego hazlo durante el resto de tu vida”.
El poder de poner al Señor primero
El élder Rasband prometió bendiciones tangibles para quienes acepten este desafío:
- Mejor rendimiento académico: El Espíritu puede mejorar tus capacidades, ayudándote a comprender mejor y aprender más rápido.
- Gestión del tiempo: Descubrirás que, al priorizar al Señor, milagrosamente encontrarás tiempo y energía adicionales para cumplir con tus compromisos.
- Oportunidades abiertas: Se te abrirán puertas que de otro modo habrían permanecido cerradas.
No pongas tu testimonio en pausa
Un testimonio no es algo que pueda mantenerse en un estante mientras se persiguen otros objetivos. Según el élder Rasband, dedicar tiempo al Señor no es una carga extra, sino una inversión en tu crecimiento espiritual y personal que amplifica tus esfuerzos en todas las áreas de la vida.
Algunos jóvenes han compartido que encontrar tiempo para la oración, el estudio de las Escrituras y el servicio en la iglesia los ayuda a mantenerse enfocados y encontrar paz en medio del estrés.
El desafío está en tus manos
El mensaje del élder Rasband no es solo un consejo; es un llamado a confiar en el Señor y experimentar Sus bendiciones. Así que, la próxima vez que te sientas abrumado por las exigencias académicas, recuerda esta promesa: “Dedícale tiempo al Señor, y Él te dará lo que necesitas para triunfar”.
¿Te atreves a aceptar este desafío y comprobar el poder de poner al Señor en primer lugar? Inténtalo y observa cómo tu vida se transforma.
Fuente: Ronald A. Rasband en Facebook