‘¿Qué signo eres?’
No es solo una frase de moda en redes sociales o reality shows. Es también el reflejo de una tendencia que está creciendo —o al menos, eso parecía.
Un reciente informe del Pew Research Center analizó el auge de prácticas conocidas como “New Age”, como la astrología, la lectura de cartas del tarot y las consultas a videntes. Y los resultados son… sorprendentes.

Espiritualidad en auge… ¿pero sin religión?
El estudio encontró que muchas personas —especialmente jóvenes y adultos LGBT— están recurriendo a estas prácticas para encontrar orientación, sentido o conexión espiritual. Lo curioso es que la afiliación religiosa no influye tanto como uno pensaría. Tanto creyentes como no creyentes consultan el tarot o el horóscopo con similar frecuencia.
“La diferencia no está en si las personas tienen religión o no, sino en factores como la edad o la identidad de género”, explicó Chip Rotolo, investigador principal del estudio.
¿Realmente está creciendo la astrología?
Aunque pareciera que todo el mundo habla de signos zodiacales, la realidad es otra. Según Pew, la creencia en la influencia de los astros ha bajado ligeramente: de un 29% en 2017 a un 27% en 2024.
Aun así, los jóvenes siguen mostrando más interés que los adultos mayores. Por ejemplo, un 43% de las mujeres entre 18 y 49 años creen en la astrología, frente a solo el 16% de los hombres mayores de 50.

Y aunque muchos no basan su vida en estas creencias, sí las usan como una especie de brújula emocional. El 13% de los jóvenes encuestados dijo que toma decisiones importantes basándose al menos un poco en estas prácticas.
¿Espiritualidad sin Dios?
Una de las preguntas más profundas que plantea el informe es: ¿Qué significa hoy “ser espiritual”?
Para muchos jóvenes estadounidenses, la espiritualidad tiene menos que ver con Dios y más con conectarse con su “verdadero yo”, cultivar la mente abierta y experimentar lo místico sin compromisos formales.

Este fenómeno explica por qué tantas personas están “probando un poco de todo”: una carta astral aquí, un cuarzo allá, una lectura de tarot “por si acaso”.
Una reflexión desde la fe
Como creyentes, esto nos invita a reflexionar: ¿Qué están buscando estas almas?
Tal vez no buscan entretenimiento. Tal vez anhelan guía, consuelo, propósito, conexión… algo que tú y yo también necesitamos, y que encontramos en Jesucristo.
La diferencia es que nuestra fe no se basa en el azar ni en las estrellas, sino en un Dios viviente que nos conoce por nombre y tiene un plan eterno para nosotros.
¿Qué podemos hacer?
En lugar de juzgar o burlarnos de quienes se interesan por estas prácticas, podemos escuchar, entender y compartir lo que realmente da luz: el Evangelio restaurado de Jesucristo.
Porque no hay tarot que supere una bendición.
No hay carta astral que reemplace una oración sincera.
Y no hay futuro más brillante que el que se construye de la mano del Salvador.
¿Conoces a alguien que busca respuestas en estas prácticas? Comparte este artículo y ábrele una nueva conversación… con fe.
Fuente: Deseret News