Libro de Mormón clase 18 – Escuela Dominical
El objetivo de esta clase es apreciar la importancia de la expiación de Jesucristo y a seguir fieles a su testimonio de la Expiación. Es menester comprender que Dios mismo redimirá a su pueblo.
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Abinadí llama a Noé y a sus sacerdotes al arrepentimiento, les exhorta a guardar los mandamientos y les enseña acerca de la Expiación.
Analicemos los capítulos 12 y 13 de Mosíah:
- Dos años después de que Abinadí predicó por primera vez al pueblo de Noé, regresó para decirles que debido a que no se habían arrepentido, sufrirían y serían llevados al cautiverio (Mosíah 12:1-7). También les dijo que serían destruidos si no se arrepentían (Mosíah 12:8).
- Después de que Abinadí resistió los refuerzos de los sacerdotes por “confundirlo”, uno de ellos le hizo una pregunta acerca de un pasaje de las Escrituras (Mosíah 12:20-24). ¿Qué significa aplicar nuestro corazón para entender?
- ¿Por qué es importante aplicar nuestro corazón al estudiar y al enseñar el Evangelio? (DyC 8:2-3).
- Después de llamar a Noé y a sus sacerdotes al arrepentimiento por no guardar la ley de Moisés, Abinadí dijo: “… la salvación no viene sólo por la ley” (Mosíah 13:28). ¿Cómo viene la salvación?
- Las prácticas y las ordenanzas de la ley de Moisés eran símbolos de cosas futuras. Se dieron para ayudar al pueblo a mirar hacia Cristo.)
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Abinadí cita a Isaías, testifica de la Expiación y exhorta a los sacerdotes de Noé a enseñar al pueblo que la redención se recibe por medio de Cristo.
Analicemos Mosíah 14-16
- Como parte de su testimonio de Jesucristo, Abinadí citó al profeta Isaías. Entre las enseñanzas encontramos las siguientes:
- El Salvador vivió con mansedumbre y humildad (Mosíah 14:2).
- Muchas personas lo rechazaron (Mosíah 14:3).
- Llevó nuestros pesares y nuestros dolores (Mosíah 14:4).
- Tomó sobre Sí los pecados de todas las personas (Mosíah 14:5-6, 8,10-12).
- Se sujetó voluntariamente a la persecución y la muerte (Mosíah 14:7-9).
- No tenía pecado (Mosíah 14:9).
- Abinadí habló de la posteridad, o sea, los hijos y las hijas de Jesucristo.(Mosíah 15:10) ¿Qué significa ser los hijos y las hijas del Salvador? Jesucristo es el autor de la salvación. Existe una relación de Padre e hijo entre Él y los que acepten Su Evangelio. Llegamos a ser Su posteridad, o sea, Su hijos e hijas cuando creemos en Él, nos arrepentimos de nuestros pecados y concertamos un convenio de hacer Su voluntad y obedecer sus mandamientos.
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Abinadí sella su testimonio del Salvador con su vida.
Analicemos Mosíah 17
- ¿Tuvo éxito la misión de Abinadí ante el Rey Noé su pueblo? (Mosíah 17:2-4; Alma 5:11-12)
- Abinadí fue llevado a muerte por no retractarse sobre su testimonio y las cosas que predicó. Aunque no es probable que tengamos que morir por nuestra fe, ¿cómo podemos seguir el ejemplo de Abinadí?
El presidente Ezra Taft Benson dijo: “… Cristo cambia a las personas, y aquellos que hayan cambiado pueden a su vez cambiar al mundo. Los que se transforman por Cristo permitirán que Él los guíe… los que siguen a Cristo se amalgamarán con Él… Ellos hacen la voluntad de Dios en lugar de la propia. (Véase Juan 5:30) Hacen siempre lo que complace al Señor. No sólo son capaces de morir por el Señor, sino, lo que es más importante aún, desean viciar para ÉL. (“Nacidos de Dios”, Liahona, enero, página de 1986, pág.2).