El inicio de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en Perú fue en 1956, cuando Frederick & Williams, ex presidente de misión en argentina y Uruguay, se mudó a Perú con su familia y se puso en contacto con la sede central de la Iglesia solicitando el permiso para empezar la obra misional y organizar una rama – una pequeña congregación – con pocas personas.
La primera rama fue organizada el 8 de julio de 1956 por el Elder Henry D. Moyle, miembro del Quórum de los Doce Apóstoles (el segundo cuerpo de gobierno en importancia de la iglesia). Los misioneros llegaron el 7 de agosto de 1956. El edificio a ser utilizado como centro de reuniones en Perú fue adquirido en noviembre de ese año.
A partir de los humildes comienzos, la Iglesia ha crecido rápidamente y ha contribuido significativamente con el bienestar espiritual y humanitario del pueblo peruano.
La iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días también es conocida en Perú por la ayuda humanitaria y las respuestas en emergencia. Luego del terremoto de junio del 2001 en el sur de Perú, la Iglesia envió 50 toneladas, entre alimento, frazadas, útiles de higiene y suministros de primero auxilios a fin de ayudar a las víctimas en Moquegua y ciudades cercanas.
Cuando el terremoto, de 8.0 grados, azocó al Perú en agosto del 2007, la Iglesia respondió de inmediato. Trabajando de cerca con Defensa Civil, la Iglesia proveyó 10,000 frazadas y suministros de emergencia como carpas, entre otros. Los líderes de la Iglesia en las ciudades afectadas instalaron refugios y dieron alimentos y agua a los damnificados. Además la Iglesia envió desde Lago Salado, Utah, un avión de carga 747 conteniendo instrumentos médicos, cajas de alimentos, kits de higiene y otro artículos al área afectada. En los siguientes dos meses llegaron otros seis contenedores de suministros, incluyendo varios miles de kits escolares y 70,000 cajitas de leche para beber, a fin de ayudar al reinicio de las actividades escolares en la zona.
En años recientes la Iglesia ha recibido reconocimiento de las instituciones nacionales tales como Defensa Civil, el Ministerio de Salud, El ministerio el Interior, el Ministerio de Educación y el Ministerio de la Mujer. También la Primera Dama del Perú ha expresado su complacencia por la ayuda humanitaria que la Iglesia brinda.
La notable continua ayuda de la Iglesia a la comunidad es el resultado directo del rápido crecimiento de la Iglesia en el país. En los años 70’s muchos peruanos deseosos de fortalecer espiritualmente a sus familias se unieron a la iglesia en números crecientes. Uno de los primeros conversos: Roberto Vidal, fue llamado como líder de la primera estaca, organizada en Lima el 22 de febrero de 1970 (un estaca es similar a una diócesis)s Hacia 1977, el número de líderes eclesiásticos laicos en Perú Lledó a ser lo suficientemente numeroso como para congregarse en dos días de conferencias a las cuales asistieron 7,900 líderes. Estas reuniones fueron presididas por el entonces Presidente de la Iglesia Spencer W. Kimball. Cuatro años mas tarde, en1981, él anunció la construcción de un templo en Lima, mismo que fue dedicado el 10 de enero de 1986.
Poco más de tres décadas que empezó la obra misional en Lima, Perú, el Elder M, Russell Ballard de Quórum de los Doce Apóstoles organizó siete estacas durante e fin de semana del 30 y 31 de enero de 1998. En este momento, Lima tenia el segundo mayor numero de estacas en un área metropolitana fuera de los Estados Unidos
En 2006 los Santos de los Últimos Días celebraron el aniversario número 50 de la presencia de la Iglesia en Perú, participando en una jornada de servicio a nivel nacional. A lo largo del país, trabajaron en conjunto para servir a un comunidad mediante la limpieza de calles, parques, campos deportivos y cementerios. En Lima y Callao, más de 6,200 miembros participaron en la limpieza de los principales cementerios. (El Angel, Presbitero Maestro y Baquijano y Carrillo). El servicio masivo a la comunidad es una constante en los miembros de la Iglesia de Jesucristo. Cada año se organiza a nivel nacional la campaña de donación de sangre y la campaña de limpieza de riveras. Miles de horas de servicio han generado el rotundo éxito de estas campañas en los últimos años.
Los misioneros Santos de los Últimos Días empezaron la predicación en Trujillo 1960. Los primeros bautismos en la primera rama Trujillo (entonces parte de la Misión Andina) tuvieron lugar en febrero de 1961. En junio de ese mismo año, se bautizaron los primero cinco miembros. Alfredo Peñarrieta Parker, Isabel Luna de Peñarrieta, Alfredo Peñarrieta Luna, Juan Alva Navarrete y Albires Alván. En 1963 se dedicó el primer centro de reuniones o capilla en Trujillo.
La primera estaca en Trujillo tuvo como presidente a Teófilo Puertas Vega, fue organizada en junio de 1978 por Thomas S. Monson, entonces miembro del Quórum de los Doces Apóstoles y hoy el líder de la Iglesia a nivel mundial.
El 13 de diciembre de 2008, La Primera Presidencia (el más alto órgano del gobierno de la Iglesia) anuncio los planes para construir el Templo de Trujillo Perú, el segundo templo en el país. Esto eleva a 17 el número de templo en operación o en etapa de planeamiento o construcción en América Latina, y a 146 a nivel mundial. De los países de habla hispana en Sudamérica, hasta ahora, solo Perú y Argentina tendrían dos templos.
El templo es una hermosa realidad de la fe de los miembros de Trujillo y del norte del país. La celebración de tan importante acontecimiento se iniciara el 5 de mayo y concluirá el domingo 21 de junio con la inauguración y dedicación a Dios el Padre como su Santa Casa. El Templo de Trujillo, Perú está ubicado en el kilómetro 3,5 de la Avenida Mansiche, en una zona residencial en el noroeste de la ciudad, en el Distrito de Huanchaco. Servirá a más de 100,000 miembros de la Iglesia en la región. La cifra de miembros de la Iglesia en el Perú se aproxima a medio millón.