Hace casi cinco años, la familia Alcantar decidió viajar por el mundo con un propósito específico: servir en cada templo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por un periodo de dos años.
Fue una meta ambiciosa que ha ido adaptándose con el tiempo, pero es una que toda la familia sigue aceptando, incluso después de más de 100 visitas a templos.
Este trayecto inició hace 7 años. Créditos: Familia Alcantar
Previamente, en 2017, la familia Alcantar comenzó sus viajes en una casa rodante y finalmente logró visitar casi todos los templos en Estados Unidos, excepto tres, dentro de los primeros dos años.
En algún momento durante esa primera etapa, dejaron atrás la casa rodante y regresaron a su hogar en Mesa, Arizona, antes de mudarse al pueblo natal de Sal, Snowflake, Arizona, donde continuaron haciendo viajes ocasionales a templos en Canadá y otros lugares, según el tiempo y la pandemia se lo permitían.
Sin embargo, en enero de 2024, decidieron viajar a tiempo completo nuevamente e incluir a Europa en su segunda “gira visitando templos”.
Recorridos por Templos en Europa
Templo de Roma, Italia. Créditos: Deseret News
De los 7 templos en los que sirvieron mientras estaban en Europa, el Templo de París, Francia, fue uno de sus favoritos ya que toda la familia pudo realizar la obra vicaria de muchas personas que lo necesitaban.
Fuera del templo, quedarse en el albergue del templo (una especie de hospedaje para las personas que vienen desde lejos y pueden quedarse durante la noche) fue lo más especial para ellos.
El padre de la familia, Sal compartió lo siguiente:
“Una noche, después de la cena, hicimos servicio dentro del albergue. Para los niños fue muy lindo servir, tuvieron la oportunidad de conocer y hablar, especialmente con miembros mayores que estaban allí”.
Templo de París, Francia. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Para Drezen, de 16 años, visitar la Capilla Sixtina y el Templo de Roma, Italia, el mismo día fue una experiencia que fortaleció su testimonio. Él expresó:
“Debido a que la Capilla Sixtina es un lugar sagrado, hay una cierta reverencia en el lugar y te sientes diferente. Un día, tuvimos una gran visita y fue genial ver toda esa [historia] y cultura.
Más tarde ese día, visitamos el Templo de Roma, Italia, y la sensación fue incomparable porque la reverencia y el Espíritu eran muy fuertes. Fue solo otra confirmación para mí y un gran fortalecedor de mi testimonio”.
Zander, de 14 años, está de acuerdo en que aunque extraña a sus amigos mientras viaja, pero estas experiencias lo han ayudado a hacer nuevas conexiones y acercarse más a su familia.
Toda la familia también vio su testimonio y conocimiento de la Biblia crecer al pasar tiempo mirando la frase “Venid a Mí” por la ventana en el centro de visitantes del Templo de Roma.
Para Ange, una parada no planeada en el Templo de La Haya, Países Bajos, fortaleció su creencia en las relaciones y amistades eternas. Durante su visita, conocieron a otra familia en la pila bautismal, con la que sintieron como si se conocieran de toda la vida.
Centro de Visitantes del Templo de Roma, Italia. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
De hecho, se llevaron tan bien que ambas familias reorganizaron sus respectivos planes de vacaciones para pasar tiempo juntas.
“Ya se sienten como si fueran parte de la familia y eso, para mí, es esencialmente lo que significa el templo: Tenemos estas conexiones que estamos ayudando a encontrar y construir a través de las ordenanzas de sellamiento. Sí, estamos haciendo la obra al otro lado del velo, pero también nos ayuda de este lado del velo”.
El especial templo número 100
Templo de República Dominicana. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
La familia Alcantar sabía que su visita al templo número 100 debería tener un significado especial, así que decidieron dejar Europa y dirigirse al Templo de Santo Domingo, República Dominicana.
Sal sirvió como misionero en República Dominicana cuando el élder Richard G. Scott dedicó el terreno para un templo y también sería la primera vez que toda la familia viajaba allí juntos.
Richard G. Scott Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Había una escasez de obreros del templo cuando llegaron, pero la visita fue más significativa cuando Sal ofreció sus habilidades en español para ayudar a realizar más de 300 bautismos durante varias horas.
Sal describe la visita como una experiencia especial, ayudando a un nuevo miembro que venía al templo por primera vez, así como a jóvenes de varias islas cercanas que de otra manera no habrían podido hacer la obra en el templo.
Él compartió:
“Pude servir al Señor en República Dominicana de una manera diferente, la primera vez fue por mís; la segunda vez fue para quienes habían fallecido. No era el plan en absoluto, pero realmente me llenó el corazón”.
Planes para el futuro
Toda la familia está lista para visitar más templos. Créditos: Familia Alcantar
Con los niños creciendo y un familiar de ellos con un diagnóstico un cáncer terminal, el futuro de la meta de la familia Alcantar está un poco fuera de su alcance.
Actualmente, el plan es que los niños regresen a la escuela antes de que Drezen, quien será un estudiante de último año de secundaria, sirva una misión. Sal comenta:
“Para ser honesto, esperaba que pudiéramos haber servido en todos los templos para ahora, pero están creciendo tan rápido. Cada vez que hay una conferencia general y el profeta anuncia los nuevos templos, los esperamos probablemente más que la mayoría porque sabemos que se cnvertirá en una meta continua para siempre”.
Con más de 200 templos por delante, la familia Alcantar tendrá que decidir si visitar los templos individualmente para llegar hacia su meta.
Templo de Salta, Argentina. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
No importa lo que decidan, no hay duda de que este enfoque especial ha unido a cada miembro de la familia y los ha preparado para el futuro, incluyendo ayudar a Drezen a prepararse para la obra misional, lo cual explica:
“A veces, leo las escrituras y veo todos estos milagros increíbles, y pienso: ‘Oh, no tenemos muchos hoy en día, pero poder ir personalmente a 100 de nuestros templos y tener tantos templos alrededor de todo el mundo me muestra el amor que Dios tiene por todos Sus hijos en la Tierra”.
Ssu familia anima a todos a encontrar su camino a la Casa del Señor sin importar sus circunstancias.
Sal y Ange reconocen que asistir a tantos templos puede no ser un enfoque necesario o factible para todos, pero reconocen que ha hecho del templo una pieza central importante en su familia y ambos poseen el testimonio de que las ordenanzas del templo tienen un significado universal, sin importar la ubicación. Como dice Ange:
“Mi consejo sería no tomar [los templos] por sentado, y si tienes uno cerca, aprovéchalo tan a menudo como puedas. Estés en el lugar que estés en el mundo, las ordenanzas son las mismas y ese es el verdadero poder del templo”.
Fuente: LDS Living
