Nota del editor: Artículo escrito por Arantxa Contreras
Alarmante, esa fue la reacción de Brent Roberts, gerente del Departamento de Proyectos Especiales de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, cuando leyó el informe sísmico sobre la estabilidad del histórico Templo de Salt Lake en el 2001.
Estos preocupantes resultados, junto al sismo del 2020 que sacudió la trompeta, los labios y la mano de la estatua del ángel Moroni, explican la razón del proyecto de presevervación de 6 años del Templo de Salt Lake: desde más de 10 metros y medio bajo tierra hasta 64 metros por encima.
Si bien conservar el templo era, por supuesto, el objetivo principal, de acuerdo con Roberts, también se buscaba duplicar potencialmente la capacidad del templo, tal como sucedió en el bautisterio con una segunda pila bautismal.
Devolver el estilo e historia pionera
Debido a las múltiples renovaciones anteriores, cuando los trabajadores de la construcción entraron en el templo en enero de 2020 para comenzar la renovación, la mayor parte del interior del templo era totalmente distinta al aspecto que tenía cuando los pioneros lo abrieron en 1893. El proyecto que se está llevando a cabo ahora le devolverá ese estilo y será más fiel a su historia.
“Creo firmemente que este es el mayor proyecto de conservación en el que hemos participado o participaremos jamás, porque se trata de preservar el templo de Salt Lake. Parecerá un templo de la época victoriana”.
Los dos directores del proyecto y un historiador explicaron a Deseret News que conservar el Templo de Salt Lake en su conjunto y duplicar con creces su capacidad garantizará que sea más accesible a personas de todo el mundo en las generaciones venideras.
Duplicar la cantidad de sellamientos
Por encima de cualquiera, el Templo de Salt Lake siempre ha sido un destino especial para los sellamientos, alcanzando los 125 al día en las semanas previas a su cierre por reformas.
Roberts comentó que se ha logrado hasta duplicar la capacidad de los sellamientos. “Algunos sábados por la tarde, habrá 22 habitaciones diferentes al mismo tiempo con sellamientos para vivos”. Las nuevas salas también son más grandes.
En cuanto a las sesiones de investidura, ahora el templo contará con 5 salas con 150 asientos cada una, donde se proyectarán en simultáneo los videos correspondientes y, además, comenzarán con mayor frecuencia.
Finalmente, explicó Roberts, el bautisterio tendrá, con la renovación, dos pilas bautismales en lugar de una. Además, se estima que se duplicará la capacidad para las ordenanzas iniciatorias.
Fuente: Deseret News