La jornada de puertas abiertas del Templo de Bahía Blanca, Argentina, inició el 16 de octubre. Mientras el templo abría sus puertas a todo el público, el Bahía Blanca Plaza Shopping también abría sus puertas para ofrecer algo más grande que ropa y entretenimiento: el poder de la historia familiar.
Durante toda una semana, del 6 al 13 de octtubre, FamilySearch, la organización de historia familiar patrocinada por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, invitó a los visitantes a construir su árbol genealógico, conocer el origen de su apellido y llevarse recuerdos impresos.
Más de dos mil personas participaron de esta experiencia interactiva disfrutando de la emoción de establecer vínculos con sus antepasados a través del tiempo. ¿Cómo se vivió esta experiencia?
Historias que viven en nosotros

Pablo Schpilman, gerente de Comunicación de FamilySearch, estuvo presente en la inauguración del stand interactivo de historia familiar y explicó que en solo minutos, cada visitante podía llevarse impresa una parte de su historia familiar.
Esta iniciativa llamó la atención de muchos que, con emoción, participaron para reencontrarse con sus antepasados y conocer su historia familiar. Durante toda esa semana, ellos experimentaron el cumplimiento de la profecía descrita por Malaquías:
“Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres”.
Cada árbol familiar que se imprimió durante esa semana en el stand de historia familiar se convirtió en un recordatorio de que aunque no lo creamos, somos parte de una historia más grande de lo que podemos imaginar. En cuanto a esto, el presidente Nelson enseñó:
“Cuando nuestro corazón se vuelve a nuestros antepasados, algo cambia dentro de nosotros; nos sentimos parte de algo más grande que nosotros mismos”.
Templo, milagro y una invitación

Durante las jornadas, el élder Mark A. Bragg, director ejecutivo de FamilySearch, compartió algo que marcó profundamente a quienes lo escucharon:
“Es un milagro tener una Casa del Señor en Bahía Blanca… Debemos nutrir los templos con los nombres de nuestros antepasados, especialmente con la ayuda de los jóvenes”.
Sus palabras nos recuerdan que la obra de historia familiar refuerza la obra del templo. Cada nombre encontrado a través de la historia familiar se puede llevar al templo a fin de realizar las ordenanzas necesarias a favor de esa persona. Solo así, el proceso está completo.
El evangelio de Jesucristo enseña que las bendiciones de Dios se extienden aún después de la muerte. Por eso, la obra del templo es crucial. Su impacto transforma vidas más allá del velo y nos recuerda que las familias pueden ser eternas.
Muchos voluntarios que ayudaron en el stand comprendieron la relevancia de la obra de historia familiar gracias a esta experiencia.
“Al principio pensé que la genealogía podría parecer aburrida, pero descubrí que a la gente le entusiasma conocer a sus antepasados… Ver cómo se conmueven al entender que sus vínculos familiares pueden ser eternos es una experiencia muy especial”, afirmó Erik Soza, uno de los jóvenes voluntarios.
El puente hacia el pasado

Hoy, FamilySearch cuenta con registros de más de 200 países. Este alcance global ayuda a más hijos de Dios a conectarse con sus antepasados y conocer su historia a fin de mirar al futuro con fe, así como aquellos que participaron del stand en el Bahía Blanca Plaza Shopping.
¿Por qué es esto importante? Porque así como enseñó el élder Marlin K. Jensen, del Primer Cuórum de los Setenta:
“Al mantener vivo nuestro pasado, él nos conecta con las personas, los lugares y los acontecimientos que componen nuestro legado espiritual”.
Mantener vivo nuestro pasado es clave para hallar identidad y además, encontrar un propósito de vida mayor. En ese sentido, FamilySearch se establece como un ancla firme para todo el que desee conocer su historia.
En esta oportunidad FamilySearch se hizo presente en Bahía Blanca, pero este programa está disponible en todo el mundo a través de su página web. ¿Te animas a conocer tu historia familiar? Puede que descubras cosas que ni imaginabas.
Fuente: Sala de Prensa Argentina



