El manuscrito para la impresión del Libro de Mormón es una copia completa del manuscrito del libro realizada por Oliver Cowdery y Hyrum Smith entre abril de 1829 y enero de 1830.
Este manuscrito fue adquirido en el año 2017 por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por $ 35,000,000.
Sin embargo, el manuscrito original tal como lo dictó el profeta José Smith a sus escribas, existe solo en fragmentos. Solo se ha conservado el 28% del documento original.
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En 1841, José Smith invitó a los miembros de la Iglesia a una charla fogonera para colocar la piedra angular de la Mansión de Nauvoo, un hotel que el Señor había mandado construir a los Santos mediante la revelación, no lejos de las orillas del río Misisipi en Nauvoo, Illinois, entonces la Sede de la Iglesia.
La invitación incluía traer artículos de importancia espiritual. Algunos llevaron escrituras, folletos e incluso monedas (las fechas de las monedas eran importantes para su bautismo, matrimonio u otros eventos de importancia).
Según el diario de Ebeneazer Robinson, se registra que estos objetos estaban a punto de ser sellados en la piedra angular, cuando el Profeta dijo de repente: “Esperen un momento. Tengo algo que deseo colocar ahí”, y cruzó la calle hacia el Hotel, luego a su casa, y trajo una pila de papeles de diferentes tamaños de largo.
José le dijo a la congregación reunida que tenía en sus manos el Manuscrito Original del Libro de Mormón y que había tenido “suficientes problemas” con él, habiendo tenido que recuperarlo a lo largo de los años de varias personas que habían abandonado la Iglesia (como Oliver Cowdery y John Whitmer
El profeta mencionó que finalmente el manuscrito estaría a salvo en la piedra angular sellada, ya que en ese momento no había bóvedas de banco disponibles en el lugar para que pudiera ser guardado y preservado.
El manuscrito original permaneció dentro de la piedra angular durante los siguientes 41 años, hasta que Lewis Bidamon, el segundo esposo de Emma Smith, descubrió la piedra angular en 1882, cuando hizo una remodelación en su casa.
Aquella casa fue originalmente construida a partir de una parte de la inacabada de la Mansión de Nauvoo, la cual contenía la piedra angular.
El profeta José Smith y el patriarca Hyrum Smith habían sido asesinados en la cárcel de Carthage el 27 de junio de 1844 y, posteriormente, Emma Smith contrajo matrimonio con Lewis Bidamon. Emma Smith falleció en 1879 mientras que Bidamon falleció en 1891.
Los objetos encontrados en la piedra angular habían estado a salvo de todos y de todo, excepto de los elementos naturales. Los libros y folletos e incluso el Manuscrito original del Libro de Mormón habían sido casi destruidos por el agua filtrada en la piedra angular durante el paso de cuarenta años.
Solo se podían leer ciertas partes de los fragmentos restantes del manuscrito, principalmente los que estaban al inicio del libro, como 1 Nefi, debido a que se encontraba en la parte superior.
Es a partir del libro Alma donde se encuentran la mayoría de fragmentos de hojas, muchas ilegibles. Fue una pérdida lamentable, porque algunas de las páginas existentes del Manuscrito Original aclararon algunas secciones que fueron modificadas, sin duda por error en el esfuerzo de copiar el Manuscrito para su impresión.
Cada fragmento sobreviviente del manuscrito original es valioso, debido a que fue traducido de las planchas de oro “por el don y el poder de Dios”.
Tras el descubrimiento de los restos del manuscrito original en la piedra angular, Bidamon comenzó a repartir los fragmentos, pieza por pieza, a cualquier número de visitantes y personas interesadas, incluidos algunos misioneros de la Iglesia que pasaban de visita por Nauvoo de camino a la costa este.
De hecho, las Autoridades Generales de Salt Lake City instruyeron a los misioneros a que pasaran por Nauvoo y solicitaran los fragmentos del manuscrito para que fueran devueltos a la Iglesia.
Estos esfuerzos, incluidos los de otras personas, como el historiador de la Iglesia Franklin D. Richards y la hermana Sarah M. Kimball de la Sociedad de Socorro, dieron como resultado la adquisición del 28% del Manuscrito Original del Libro de Mormón.
El fragmento de nuestra colección cuenta con Alma 60, los versículos 8-9 y los versículos 16-17. Es uno de los tres o cuatro fragmentos conocidos que quedan en manos seguras.
Estos versículos contienen la carta del Capitán Moroni al juez principal Pahoran, parte de la falta de comunicación que provocó la preocupación de Moroni por la falta de apoyo a su ejército durante el tiempo en que Pahorán se enfrentaba a los hombres del Rey y no podía ayudarlo.
Este fragmento existente no contiene puntuaciones, por lo que una vez más atestigua la manera inspirada del proceso de traducción, la cual se escribió tal y como salió de los labios del Profeta, escrita por la mano de Oliver Cowdery.
Algunas personas creen que Oliver Cowdery estaba confabulado con José, y en lugar de simplemente escribir lo que José estaba diciendo, los dos en realidad estaban intercambiando ideas en secreto para crear una obra de ficción llena de mentiras.
Pero según la evidencia del manuscrito, eso solo hubiera sido posible si de alguna manera hubieran escrito un manuscrito previo para que luego José le dictase a Oliver lo que acababan de escribir y a propósito escribir mal los nombres que él mismo había ayudado a crear, todo en aproximadamente 57 días.
Dado que la evidencia sugiere que Oliver es totalmente inocente, algunos creen que José, probablemente comenzó a escribir el manuscrito cuando era un adolescente, creando un libro de 514 páginas por sí mismo para luego leérselo a Oliver.
Esto conduce a una serie de preguntas difíciles de responder.
¿Cómo lo escondió?
¿Cómo leyó cientos de páginas sin que Oliver se diera cuenta?
¿Cómo es que nadie en la familia de José se dio cuenta de que él escribió incesantemente por años en su pequeña casa de Palmyra?
¿Estaba toda su familia involucrada y simplemente se llevaron el secreto a la tumba a pesar de que muchos miembros de la familia parecían estar bastante contentos en la Iglesia presbiteriana a la que acababan de unirse cuando todo esto comenzó a suceder?
¿O podrían haber estado diciendo todos la verdad sobre la salida a la luz del Libro de Mormón?
Fuente: Meridian Magazine
