Si serviste una misión de tiempo completo por dos años para los varones y año y medio para las mujeres, entenderás que fue una época única para recordar toda la vida. Por esos maravillosos momentos, te presentamos estas 10 cosas inolvidables:
1. Tu primer día en el campo misional
Te invaden diferentes sentimientos y emociones, las expectativas de cómo será la misión dan vueltas por tu cabeza. Aunque muchos te han hablado de cómo es la misión, tú lo estás experimentando y es emocionante.
2. Los compañeros
¡Cómo no recordarlos! Cada uno tan único y diferente en su carácter. Gracias a ellos pudimos progresar al vivir experiencias buenas y otras no tanto. El caso es que cada compañero te deja una gran lección.
3. Los cambios (algunos tristes, otros son una bendición)
Un día esperado por toda la misión, inclusive los miembros y conversos están a la expectativa de lo que sucederá este día.
4. Las “Mamitas”
¿Quién no tuvo por lo menos una hermana que era como una mamá en la misión? Te lavaba la ropa, te daba comida rica, te engreía, te buscaba personas para enseñar y hasta te acompañaba en las lecciones. Definitivamente las “mamitas” son un tesoro en la misión.
5. Sentir la compañía del Espíritu
Hay un idioma que todos los misioneros entienden: Es el lenguaje del espíritu. Lo aprende aquel que procura con todo su corazón conocer a Dios y obedecer sus mandamientos.
6. Los hábitos diarios
Gracias a ellos desarrollamos la disciplina y un entendimiento mayor de la obediencia en las pequeñas cosas como levantarse y acostarse a tiempo, los ejercicios en las mañanas, hacer la cama, orar, estudiar las Escrituras de forma personal y con el compañero, entre otros.
7. Los miembros que siempre acompañan
En muchas unidades hay personas que tienen un entendimiento de la obra misional y la expiación de Jesucristo, debido a este conocimiento siempre sacaban de su tiempo para ayudarnos en la obra.
8. Los Conversos
Son de los mayores recuerdos que nos deja la misión, son personas que marcan nuestra vida, nuestro testimonio y seguramente nosotros también dejamos un buen impacto en ellos.
9. Los perros
Si serviste en cualquier misión en Latinoamérica fuiste enemigo de algún perro que te ladraba cada vez que te veía…
10. El “querido Juan”
Esa carta o ahora el mail en la que te das cuenta que debes enfocarte al 100% en tu misión, y descubres que tu exaltación esta solo después de la misión.
Existen muchos más hermosos momentos en la misión para recordar, así que te animamos con compartirlos con nosotros en los comentarios.
