Una generación elegida.
Este año 2024, el número de misioneros que se encuentran sirviendo en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha alcanzado una notable marca de alrededor de 80,000. Alcanzando, además, entusiastas cifras de bautismos.
Las buenas nuevas las compartió el élder W. Mark Bassett, Setenta Autoridad General y director ejecutivo del Departamento Misional de la Iglesia:
“Cuando [el evangelio] llega al corazón de una persona, cambia lo que hace y la manera en que ve a otras personas; cada individuo en el mundo es un hijo de Dios y podemos traerlo de regreso a casa al hacer convenios”.
Los misioneros, tal como indica su propósito misional, invitan a las personas a venir a Cristo. Y, de acuerdo con David N. Weidman, director general del Departamento Misionero, la gente está respondiendo a esa invitación:
“Todas las regiones del mundo están viendo una aceleración en el crecimiento de los bautismos de conversos”.
Las personas no solo están aceptando la invitación de entrar en el convenio del bautismo, sino que también continúan progresando en el camino del convenio, agregó el élder Bassett:
“La realidad es que más personas están llegando a la Iglesia de Jesucristo de las que hemos visto en décadas”.
Nuevo curso de preparación misional
Además de estos esperanzadores anuncios, el élder Bassett y el hermano Weidman relataron en el podcast Church News otros cambios que esperan a la obra misional en el 2025.
En enero, por ejemplo, se ofrecerá un nuevo curso de preparación misional para toda la Iglesia, basado en “Predicad Mi Evangelio”, para padres, barrios, estacas, seminarios, institutos y otros, con el fin de ayudar a los hombres y mujeres jóvenes a prepararse para servir en misiones.
“Este curso ayuda a los maestros a enseñar de una manera que resulte interesante y permita que los jóvenes participen. Realmente nos sentimos muy bien al respecto y creemos que será un gran recurso para nuestros maestros que están en estas clases”, explicó el élder Bassett.
El curso, añadió, también se puede realizar como un programa de autoaprendizaje, con módulos, contenido visual, actividades para poner en práctica y mucho más.
“Cuanto mejor preparado esté un misionero, más rápido podrá participar y sentirse como si realmente estuviera siendo una bendición para los demás. Y eso les ayuda a entender cómo será la experiencia y en qué se concentrarán”.
Acelerando la obra de salvación
Estas alegres noticias se suman al anuncio reciente de la Primera Presidencia sobre la oportunidad de los hombres solteros de edad avanzada, quienes ahora pueden servir en misiones de tiempo completo.
Otro cambio que contribuyó a este crecimiento se dio el año pasado, cuando se anunció que los misioneros de servicio se podían integrar a las misiones de enseñanza.
Esto ha cambiado a los misioneros de servicio, a los misioneros de enseñanza y la cultura de la misión en general, reveló Weidman.
Los misioneros solían tocar puertas y eran invitados a entrar a las casas para enseñar. Ahora, los misioneros están teniendo mucho más éxito invitando a la gente a la iglesia los domingos.
El élder Bassett contó que cuanto más rápido asistan las personas a una reunión sacramental, más participarán en el aprendizaje. Los miembros están allí para darles la bienvenida y ellos encuentran amigos que son sus vecinos.
Weidman dijo que cuando las personas asisten a la reunión sacramental, el Espíritu puede convertirlas y cambiar sus corazones.
“Encontramos un cambio enorme en la vida de las personas con solo asistir a una reunión en la Iglesia”.
Compartir actividades: invitación abierta
Weidman, asimismo, aseguró que los miembros de la Iglesia son una parte clave del trabajo de amar, compartir, invitar; y no tiene por qué ser complicado: se trata de compartir creencias y fe de formas normales y naturales.
Una nueva herramienta anunciada en la reunión de líderes de la conferencia general de octubre de 2024 se llama “compartir actividades”.
Cuando un consejo de barrio tiene una actividad o una reunión sacramental o cualquier otra celebración, pueden ponerla en su calendario de la Iglesia y luego se publicará en un sitio web. Esto hace que invitar sea sencillo, comentó el élder Bassett.
Por ejemplo, un barrio de Texas publicó una actividad de Halloween en la que se repartían dulces y golosinas y que luego se compartió en las redes sociales.
Los vecinos encontraron la actividad y asistieron. La respuesta fue tan buena que el barrio se quedó sin comida. Luego, varias de esas familias fueron a la capilla el domingo.
Weidman dijo que, en América del Norte en particular, más del 50% de los que se bautizan en la Iglesia lo hacen mediante el uso de tecnología de un tipo u otro, como publicaciones en redes sociales o anuncios digitales en sus feeds.
Una época notable
El élder Bassett recordó que nuestro Padre Celestial y Jesucristo están plenamente involucrados en la obra.
“Los conversos recientes se quedan. Se están bautizando más personas, hay más misioneros sirviendo y por eso tuvimos que crear 36 nuevas misiones.
Y ahora tenemos más misioneros de los que habíamos estimado y es probable que siga siendo así a medida que más personas respondan al llamado de un profeta. Es una bendición ser testigo de ello”.
Weidman, finalmente, recalcó que es una época extraordinaria en la historia de la Iglesia: “Creo que todos sentimos, de muchas maneras, que presenciamos milagros día tras día”.
En los tiempos turbulentos que vivimos, el crecimiento de la Iglesia de Jesucristo es una noticia que trae paz y gozo en el mundo.
Fuente: Church News