Aplicaciones móviles sud
Los deberes que el Señor ha confiado a los obispos, de ministrar a las ovejas y el cuidado de todos los hijos de Nuestro Padre Celestial, se encuentran entre los más sagrados de la Iglesia. Estas responsabilidades hacia los miembros incluyen a los recién conversos, los que se mudan a la unidad, los que participan plenamente en la Iglesia y los miembros con necesidades especiales; incluyendo a aquellos que se hayan alejado por un tiempo.
Con el cada vez mayor crecimiento de la Iglesia, muchos de nuestros obispos a veces luchan por mantener el ritmo con el aumento de su membresía y saber cuáles personas podrían necesitar un poco más de atención y cuidado. Aunque nada puede sustituir la inspiración del Espíritu Santo en el ministerio de un obispo, la tecnología moderna a veces puede ayudar .
A partir de esta semana, en algunas estacas seleccionadas de Guatemala y Costa Rica, la Iglesia estará realizando el plan piloto de una aplicación sencilla que los obispos podrán utilizar en sus dispositivos móviles para que les ayuden a mantener y mejorar el ritmo para con sus miembros. Esto incluye saber quien está asistiendo a la reunión sacramental, o quienes podrían estar visitando otras unidades, o no estar asistiendo en lo absoluto. Los obispos pronto recibirán instrucciones sobre cómo utilizar la aplicación y ellos a su vez lo explicarán en las reuniones del consejo de barrio.
Debido a que este es un plan piloto en el Área de Centroamérica, los miembros que escuchen al respecto deberán sentirse libres de hacer preguntas y compartir sus pensamientos sobre ello con el obispado del barrio si así lo desean.
Y después que habían sido recibidos por el bautismo, y el poder del Espíritu Santo había obrado en ellos y los había purificado, eran contados entre los del pueblo de la iglesia de Cristo; y se inscribían sus nombres, a fin de que se hiciese memoria de ellos y fuesen nutridos por la buena palabra de Dios, para guardarlos en la vía correcta, para conservarlos continuamente atentos a orar, confiando solamente en los méritos de Cristo, que era el autor y perfeccionador de su fe.
Y la iglesia se reunía a menudo para ayunar y orar, y para hablar unos con otros concerniente al bienestar de sus almas.
Nota extraida de Sala de Prensa Mormona Guatemala