Durante su visita de diez días al Área Sudamérica Noroeste, el élder Neil L. Andersen habló sobre el gran progreso de la Iglesia de Jesucristo en Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú.
El apóstol informó que hace poco más de medio siglo, la Iglesia tenía una sola estaca en esos cuatro países. Una de las primeras estacas se creó en febrero de 1970 en Lima, Perú.
En la actualidad, los cuatro países representan 250 estacas y 56 distritos.
Perú lidera la lista con 112 estacas, una de las cinco naciones del mundo con al menos 100 estacas. Los otros países son Estados Unidos (1671), Brasil (281), México (222) y Filipinas (123).
Líderes jóvenes y fuertes
Foto: La Iglesia de Jesucristo
Sobre el aumento de líderes de estaca en esta área en las últimas cinco décadas, el élder Andersen señaló que la mayoría se encuentra en el rango de edad de 35 a 50 años y expresó:
“Se pueden contar las semillas de una manzana, pero no se pueden contar las manzanas de una semilla. Hay muchos presidentes de estaca que son miembros de primera generación y casi todos son misioneros retornados. Esto es algo que me sorprendió… Y están criando generaciones justas para que los sigan”.
Esta fue la primera vez en casi veinte años desde que un apóstol se reunió con presidentes de estaca de Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú en un solo lugar.
Foto: La Iglesia de Jesucristo
Además, élder Andersen se llevó una grata sorpresa al observar el crecimiento considerable de la Iglesia en el Área Sudamérica Noroeste no solo en estacas, sino también líderes jóvenes y fuertes del sacerdocio que dirigen dichas estacas.
Sobre la visita del élder Anderson a los Santos en el Área Sudamérica Noroeste
Foto: La Iglesia de Jesucristo
El élder Anderson dirigió devocionales para miembros, reuniones misiones y de instrucción con Setentas de Área y presidentes de estaca en Santa Cruz, Bolivia; Lima, Perú; Quito, Ecuador; y Bogotá, Colombia.
El élder Andersen estrechó la mano de cada líder, misionero y miembro.
“Cada vez que se encontraba con una persona mayor, alguien en silla de ruedas, un niño o un nuevo converso, pasaba más tiempo con ellos. Estos sinceros toques personales agregaron dulzura al espíritu maravilloso que disfrutamos en cada reunión”, expresó el élder Zevallos.
Foto: La Iglesia de Jesucristo
El apóstol dijo lo siguiente sobre el fruto de la obra misional en Sudamérica Noroeste:
“Las estacas, los líderes y los miembros son evidencia del ‘poder del trabajo de las personas durante las últimas cinco décadas’”.
Agregó:
“Cuando le mencioné este viaje a Sudamérica al presidente Nelson en el templo recientemente, dijo que recordaba haber ido a Lima cuando solo había un presidente de estaca”, expresó el élder Andersen, señalando que habría sido cuando el presidente Nelson era presidente general de la Escuela Dominical de 1971 a 1979.
Foto: La Iglesia de Jesucristo
Durante su visita, el élder Anderson también fue al templo con un grupo de presidentes de estaca y setentas de área en Quito, Ecuador.
Allí, el élder Andersen guió a unos 55 líderes a través del bautisterio y las salas de instrucción, sellamiento y el salón celestial, enseñando durante una hora.
“Tuvimos una experiencia espiritual increíble juntos”, dijo, y agregó, “No fue algo anticipado… pero eso es lo que van a recordar”.
Foto: La Iglesia de Jesucristo
Al reunirse con los presidentes de estaca en Perú, el élder Andersen les dio una bendición para que expresaran su amor por sus esposas.
Más adelante en el devocional para los miembros, brindó una oportunidad improvisada para que tres presidentes de estaca hicieran precisamente eso, invitándolos al frente con sus esposas. En un caso, la expresión terminó en un beso entre una pareja.
Las expresiones “realmente conmovieron a estas hermanas porque los presidentes de estaca son realmente buenos hombres. Les expresaron su amor y aprecio por lo que trajeron a sus vidas”, dijo el élder Andersen.
El futuro del Área Sudamérica Noroeste
Foto: La Iglesia de Jesucristo
El élder Zeballos ve un crecimiento continuo ahora y en el futuro para la Iglesia en el Área Sudamérica Noroeste.
Mencionó que, tras la pandemia, el área demuestra una gran recuperación en la cantidad de jóvenes Santos de los Últimos Días que van a la misión y la cantidad de bautismos de conversos, así como los aumentos en la asistencia a la reunión sacramental y en la adoración y la obra en el templo.
“Los miembros fieles de la Iglesia en nuestros países son humildes, obedientes y deseosos de seguir a los profetas y servir en el reino de Dios en la tierra. El futuro es brillante para la Iglesia de Jesucristo en esta parte del mundo”, dijo.
El élder Andersen está de acuerdo:
“Estas son personas muy impresionantes — cuando estás hombro con hombro con ellos. Te das cuenta de que el reino de Dios es mucho más que el ‘corredor de los pioneros’ [el oeste intermontañoso de los Estados Unidos] y mucho más que las caras caucásicas de Norteamérica. Es mundial, y estos son hijos e hijas escogidos de Dios”.
Fuente: Church News
