Las últimas semanas hemos sido testigos de como los líderes de la iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días han defendido nuestras creencias y principios frente a las nuevas normas jurídicas que permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo y la posible adopción que los gay puedan adoptar hijos y constituir una familia.
El manual de instrucciones de la iglesia ha tipificado una normativa clara con respecto a este hecho, generando conmoción en todo el mundo pero el pasado 23 de noviembre, los medios informaban que aproximadamente 1500 mormones protestaban a las fueras del Templo de Salt Lake, EE.UU, contra la propia iglesia. Esto fue muy triste y desconcertante.
Sin embrago, la cantidad de mormones que han apoyado y sostenido la postura de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha sido mucho mayor que a la cantidad de protestantes. A continuación 5 argumentos para entender a los mormones con respecto a esta postura:
- La Ley de los hombres puede ser mutable pero las leyes divinas no. Si bien es cierto, las leyes son generales y aplicables a un contexto determinado según el hecho a regular, es por eso que algunas leyes se derogan y otras se promulgan. Sin embargo, el Presidente Boyd K. Packer explicó que existen leyes como la ley de la gravedad que aunque puede ser desafiante no es inmutable. De esa misma forma, existen leyes eternas o divinas; esta forma aplica al mandamiento del matrimonio que siempre ha sido entre un hombre y una mujer. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días siempre se regirán por las leyes divinas.
- No siempre lo legal es lo correcto. ¿Cuántos de nosotros sabemos que existen leyes que no necesariamente son justas? Con las últimas decisiones por parte de los legisladores alrededor del mundo con respecto al matrimonio gay es necesario que la iglesia mormona aclare que hay una distinción entre lo que es legal, lo que es de la iglesia y la ley del Señor y cómo respondemos a ella. Entonces es una manera de entender lo correcto y el error. Es una manera firme que no da a lugar para las peguntas o dudas.
- Jamás le daremos la espalda a las personas gay. Como seguidores de Cristo creemos que es posible y requiere de la incumbencia sobre nosotros de no rendirse en el amor, ayuda, en el compañerismo y el servicio haciendo todo lo que podamos hacer para cualquier persona y de la misma manera mantener los estándares que él mantuvo. Este fue el patrón del Salvador. No nos rendiremos en los esfuerzos para ayudar a nuestros semejantes a encontrar lo que trae felicidad.
- Esta política se origina en el deseo de proteger a los niños. No queremos lidiar con los problemas que puedan haber donde sus familias se sientan de una manera y las expectativas de la iglesia son muy diferentes. Estos niños no serán puesto en una posición donde se enfrentarán a estos desafíos y conflictos que puedan perjudicar su desarrollo en estos tiernos años.
- No se les pide a las personas que tienes padres del mismo sexo a rechazarlos o repudiarlos. Cuando la persona haya alcanzado la mayoría de edad. Puede ser miembro de la iglesia ya que ha alcanzado un grado mayor de discernimiento. Si esta persona viene de un matrimonio gay, es un requisito que rechacen la práctica de un matrimonio de personas del mismo sexo pero no estarían rechazando a su familia.
Los mormones saben que todos somos hijos de un amoroso Padre Celestial. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, defienden a la familia bajo ese mismo amor. Este afecto es para todo el género humano.