En el año 2022, como parte de su viaje de ministración a tres países de Europa, el presidente Jeffrey R. Holland visitó Suecia, su segundo destino.
En esta visita, el apóstol reflexionó sobre la importancia de Suecia en la historia de la Iglesia.
“Sería difícil que los Santos de los Últimos Días recordaran la vida de aquellos que han vivido en Suecia y no entendieran lo que esta tierra significó para la Iglesia y para la posteridad de los primeros miembros”.
El presidente Holland expresó que cuando la obra misional comenzó en esta área a mediados del siglo XIX, muchos de los primeros conversos a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días abandonaron Suecia.
Esto para reunirse con los Santos en los Estados Unidos que estaban tratando de edificar Sion.
“Los tiempos eran difíciles en Suecia y había una esperanza de que sería mejor en Sion”.
En una reunión especial con misioneros del país, el presidente Holland preguntó a los élderes y hermanas quiénes tenían lazos familiares con esta nación. Más del 75% de los misioneros levantaron la mano.
“No hay mejor manera de rendirles tributo que a través del servicio misional y la devoción a la Iglesia por la que sacrificaron tanto para unirse”.
El Libro de Mormón: La “herramienta misional más grande”
Mientras se dirigía a los miembros y misioneros de Suecia, el presidente Holland reflexionó sobre sus propios recuerdos de la nación. El apóstol sirvió como presidente del Área Europa Norte de la Iglesia de 1990 a 1993 y realizó numerosos viajes a Escandinavia.
El presidente Holland también reflexionó sobre su propia misión en Inglaterra.
“Todo lo que aprecio, de alguna manera surgió o fue moldeado, modificado, alentado o eliminado debido a esa decisión [de servir en una misión]. Nadie empezó con menos y volvió con más que yo”.
Lo más importante de todo, dijo el presidente Holland, era “llegar a conocer al Salvador del mundo”.
“No ha habido un día en estos últimos 60 años en el que no haya pensado en mi misión”.
El presidente Holland compartió su testimonio del Libro de Mormón, el mismo libro que encendió la llama de la conversión de los primeros Santos de los Últimos Días al evangelio restaurado de Jesucristo.
“Por mucho que usen [el Libro de Mormón], no lo están usando lo suficiente. Esta es la herramienta misional más grande que Dios le ha dado a la Iglesia o que alguna vez le dará”, les dijo a los miembros y misioneros en Suecia.
Fuente: Church News