La mañana del jueves 22 de agosto se llevó a cabo una sesión especial en la Asamblea Legislativa de Bahía, Brasil, para celebrar la construcción del Templo de Salvador, Brasil. Esta Casa del Señor estará abierta para visitas públicas hasta el 7 de septiembre de 2024.
Templo del Salvador, Brasil. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
En la sesión especial, propuesta por el diputado estatal Vitor Bonfim, el élder Ulisses Soares, del Cuórum de los Doce Apóstoles de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, habló sobre la importancia de construir una casa del Señor en el estado para que “las personas tengan esperanza en el futuro y en la eternidad”.
El élder Soares habla con el representante Vitor Bonfim durante la sesión legislativa para reconocer la construcción del Templo de Salvador Brasil. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
El diputado Bonfim mencionó que el templo “ya se ha convertido en una postal de Salvador. Gracias por regalarnos este templo, y también por cuidar de los corazones y almas de los necesitados”.
El templo proporciona sanación y fortaleza
El élder Soares dijo que reuniones como esta, para celebrar una casa del Señor, son “inspiradoras y divinas” porque ayudan a que más personas se acerquen a Jesucristo.
“La humanidad ha estado sufriendo guerras y aflicciones de todo tipo, y en este sentido, la construcción de templos proporciona sanación y fortaleza para nuestra libertad espiritual”, dijo el Apóstol. “Nuestra fe nos enseña a superar debilidades internas e injusticias, permitiéndonos convertirnos en una fuerza transformadora en la sociedad. Y de esta manera, la Iglesia de Jesucristo une esfuerzos y construye puentes con otras entidades para ofrecer alivio y mejorar las condiciones de los hijos de Dios”.
Élder Soares. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días
Tomando prestada una metáfora de un escritor de The New York Times, el élder Soares comparó la pérdida de valores en la sociedad con el debilitamiento de los manglares (que protegen el medio ambiente) en la naturaleza. El élder Soares dijo que la fe fortalece a todos los que guardan los mandamientos, lo que a su vez fortalece a la sociedad.
“Todos tenemos una naturaleza y un potencial divinos y somos vistos como iguales ante Dios”, dijo. “En el templo, estas [verdades] se refuerzan, especialmente para los jóvenes que tendrán un papel importante en el futuro de la humanidad”.
Un estandarte para hacer lo correcto
Élder Joni L. Koch, presidente del área de Brasil. Imagen: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El élder Joni L. Koch, presidente del Área Brasil, también habló durante la sesión especial. Destacó la importancia de la naturaleza y la rica historia de Bahía. Brasil fue descubierto aquí, y Salvador fue la primera capital del país. De Bahía provienen figuras notables, como el poeta Castro Alves y Rui Barbosa, quien luchó por abolir la esclavitud, así como María Filipa, hija de esclavos, que utilizó tácticas de guerrilla para atacar barcos portugueses que venían a oprimir a los que vivían aquí.
“Lo que más admiro de estas personas es su valentía para defender lo que es correcto y no ser cobardes, incluso cuando la mayoría está en contra de sus convicciones”, dijo el élder Koch. “La construcción del templo de la Iglesia aquí es un estandarte, un monumento al valor de hacer lo correcto, de predicar lo correcto, incluso cuando la mayoría no lo acepta, no lo entiende y nos ataca. Pero Jesucristo nunca tuvo miedo. Y nosotros, como miembros de Su Iglesia, tampoco podemos tener miedo”.
También participaron en la sesión especial el élder Ciro Schmeil y su esposa, Alessandra, y el élder Mark D. Eddy y su esposa, Annette.
Un coro, compuesto por miembros de las estacas de Salvador, concluyó la reunión cantando el himno: “Con Fervor Elevaste la Oración”. Al final de la sesión, el élder Soares entregó una estatua de Cristo al diputado Bonfim.
Fuente: newsroom.churchofjesuschrist.org
