Días dolorosos para la Misión Francia Lyon.
Jason Michael Soulier, quien servía desde hace 6 meses como presidente de misión en dicha área, falleció inesperadamente mientras dormía este sábado 28 de diciembre.
Aunque durante unos días antes de su partida el presidente Soluier se había sentido enfermo, todavía no se ha determinado la causa oficial de su fallecimiento.
La sensible muerte del presidente Soulier, de 54 años, de la Estaca Salt Lake East Mill Creek, fue reconocida en una declaración en la sala de prensa por Sam Penrod, portavoz de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El presidente Soulier y la hermana Jennifer H. Soulier, su esposa y compañera en este noble llamamiento, comenzaron su servicio como líderes en junio de 2024.
“Expresamos nuestro amor y nuestro más sentido pésame a la familia del presidente Soulier y a todos los misioneros de la Misión Francia Lyon durante este momento difícil.
“Oramos para que todos sientan el amor del Salvador mientras honran y recuerdan el fiel servicio del presidente Soulier”.
Décadas de dedicado servicio
Anteriormente, el presidente Soulier había servido como consejero en una presidencia de estaca, consejero en una presidencia de misión, secretario ejecutivo de misión, miembro del sumo consejo, obispo, consejero de obispado, líder misional de barrio, presidente de los Hombres Jóvenes de barrio y misionero en la Misión Suiza Ginebra. Nació en Richmond, Virginia, hijo de Michael Wesley Soulier y Barbara Frost Soulier.
El loable legado del presidente Soulier continúa con su esposa y sus 4 hijos adultos.
Temporalmente, el élder James W. McConkie III, Setenta Autoridad General y segundo consejero de la presidencia del Área Europa Central, y su esposa, la hermana Laurel McConkie, proporcionarán liderazgo a la misión, que actualmente cuenta con aproximadamente 200 misioneros de tiempo completo en servicio.
Acompañamos en oración a la familia del presidente Soluier y a toda la Misión Francia Lyon, recordando que, mediante la gracia de Cristo, este dolor es solo temporal; y las bendiciones son eternas.
Fuente: Deseret News