Jenna Carson es una ex misionera y alumna de la facultad de teología de la Universidad de Harvard. Actualmente, se está preparando para servir como capellana de la Fuerza Aérea de EE.UU. y cuenta con el respaldo de la Iglesia de Jesucristo.
Cuando Jenna se ponga el uniforme azul oficial de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos la próxima semana, no solo seguirá el legado militar de su familia, sino que también hará historia como Santo de los Últimos Días.
Tanto su abuelo como uno de sus tíos fueron pilotos de la Fuerza Aérea. Por otro lado, su padre sirvió en el ejército de los Estados Unidos. Ella dice que es un honor seguir sus pasos profesionales al comenzar su propia carrera militar.
La primera capellana militar respaldada por la Iglesia de Jesucristo
Carson está abriendo un camino nuevo: Se convertirá en la primera capellana militar respaldada por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
A principios de este mes, fue apartada por el élder Jeremy R. Jaggi, Setenta Autoridad General, y comenzará su servicio militar como primera teniente de la Fuerza Aérea de EE.UU.
“Ser apartada como capellana militar fue hermoso. Definitivamente, fue uno de los mejores momentos de mi vida”, expresó.
Asimismo, Carson dijo que está comprometida a ayudar a aquellos a quienes pronto servirá para que “sepan que Dios los ama incondicionalmente”.
Carson recibió una revelación personal durante su misión de que seguiría estudios de posgrado después de terminar su licenciatura en inglés en la Universidad Brigham Young. Sin embargo, al principio, no estaba segura de qué campo académico avanzado seguir.
Más adelante, Amy Easton-Flake, profesora del departamento de educación religiosa de BYU, le preguntó: “Jenna, ¿has pensado en la facultad de teología de Harvard?”
La respuesta fue no.
“Pero, el Espíritu dijo ‘sí’”, dijo Carson, sonriendo. “Sentí una impresión muy fuerte de que la facultad de teología era a donde debía ir, aunque no sabía qué era la facultad de teología”.
Inmediatamente buscó en Google “facultad de teología de Harvard” y aprendió más.
Aunque se sentía emocionada, no fue una decisión fácil de tomar. Carson acababa de casarse y se preguntaba si continuar sus estudios en Massachusetts era la decisión correcta. Sin embargo, después de mucha oración y ayuno, solicitó ingresar a Harvard y fue aceptada.
En ese tiempo, pensó que sus estudios de posgrado en teología la pondrían en el camino hacia una carrera legal o académica.
“Sin embargo, durante mi primer semestre, en el otoño de 2015, aprendí lo que era la capellanía. Una vez más, recibí una fuerte revelación del Espíritu… Sentí que Dios me estaba llamando a ser capellana militar”.
Se comunicó con la oficina de servicios de capellanes y relaciones militares de la Iglesia. Ella expresó su deseo de convertirse en capellana militar y ser respaldada por la Iglesia.
Un capellán de las fuerzas armadas de los EE. UU. es un oficial comisionado no combatiente encargado de brindar servicios religiosos y apoyo espiritual a sus compañeros soldados, marineros, aviadores, infantes de marina y guardacostas.
Un capellán también es responsable de asesorar a los comandantes sobre cuestiones morales y religiosas.
La Iglesia ha seleccionado y respaldado capellanes en las fuerzas armadas de los EE. UU. durante más de un siglo. Muchos Santos de los Últimos Días han servido a su país y al cuerpo militar tanto en tiempos de paz como de conflicto.
Sin embargo, hasta el reciente respaldo de Carson, ninguno de los capellanes Santos de los Últimos Días había sido mujer.
Su proceso de aprobación se prolongó durante varios años. Hubo reveses y no todos fueron alentadores. Al mismo tiempo, también estaba lidiando con los desafíos personales de un divorcio. No obstante, Carson estaba segura de que el Señor deseaba que fuera capellana de la Fuerza Aérea respaldada por la Iglesia.
A pesar de episodios ocasionales de dudas, Carson finalmente depositó su confianza en Dios.
“Confiaba en que el Padre Celestial me devolvería algo mejor de lo que podía imaginar”, dijo,
A principios de 2020, Carson se acercó nuevamente a la Iglesia en busca de un respaldo para la capellanía militar y pronto lo recibió.
Carson comenzará un curso de capacitación para oficiales de nueve semanas en agosto en Alabama. Posteriormente, iniciará su capellanía y trabajará con aviadores en la Base de la Fuerza Aérea Keesler en Biloxi, Misisipi.
Mientras tanto, actualmente, otras mujeres Santos de los Últimos Días son candidatas para convertirse en capellanas militares y ser respaldadas por la Iglesia.
Carson puede ser la primera capellana militar respaldada por la Iglesia, pero no será la última.
Fuente: Church News