Danilo Gimenes tiene 17 años, nació en Brasil y es miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Creció aprendiendo acerca del Salvador en su hogar y en la Iglesia. Desde muy joven, fue autosuficiente y decidió buscar su propio testimonio.
Además de estudiar sobre el evangelio de Jesucristo, Danilo también se dedica a aprender cosas nuevas todos los días, incluidas las matemáticas.
Danilo es un muy buen estudiante y nos contó cómo empezó a participar en las Olimpiadas Brasileñas de Matemáticas para Escuelas Públicas (OBMEP):
“En la escuela primaria, vi a casualidad la prueba OBMEP por primera vez.
Pasé por el proceso de selección y gané mi primera medalla de plata. Esto me motivó a seguir compitiendo en los siguientes años y buscar una medalla de oro. La primera llegó en el 2018 y fue una gran alegría para mis padres y para mí. Supe que el Señor me había ayudado con las pruebas que estaba tomando.
Tengo la costumbre de hacer siempre una oración antes de los exámenes, ya que cuando no oro las cosas no salen tan bien. En los años siguientes, seguí compitiendo y gané mi segunda medalla de oro en 2019. Hoy estoy en el último año de secundaria y he ganado la medalla de OBMEP cuatro veces”.
Danilo compartió con el equipo de Más Fe que el evangelio siempre lo ha ayudado y animado a estudiar y buscar conocimiento. Comentó sobre la importancia del programa de jóvenes, que lo ayuda a desarrollar cuatro áreas importantes de la vida: espiritual, intelectual, física y social.
“Con frecuencia, en la Iglesia escuchamos sobre el ejemplo de Jesucristo, que creció de gracia en gracia. Esto involucra las 4 áreas que aprendemos en el programa para jóvenes. No solo aprendemos lo que debemos hacer, sino también cómo debemos mejorar. Saber cómo el Señor me puede ayudar también en el área académica siempre ha sido una gran motivación para mí.
No me dará las respuestas que estoy buscando, pero me dará la claridad y la perspectiva para saber dónde buscarlas por mi cuenta. Ya sea en un examen escolar o en la vida. Este es el patrón del Señor”.
El joven también habló sobre el papel de la educación en su vida y cómo obtener más conocimiento nos ayuda a ser más como nuestro Salvador Jesucristo.
“No tendremos un conocimiento perfecto en esta vida, pero siempre podemos aprender más y más en diferentes áreas. Varias oportunidades ya han aparecido en mi vida gracias a las olimpiadas y los procesos de selección en la educación secundaria y fundamental. Todo esto gracias al tiempo que pasé estudiando y dedicándome, y sé que es la forma más segura de encontrar oportunidades en la vida”, dijo.
El próximo año, Danilo tiene la intención de asumir un desafío aún más importante que OBMEP. El joven quiere estar en el campo misional a principios de 2023. Compartió:
“Es una gran expectativa que todos tienen sobre mí. He querido servir en una misión desde que era un niño pequeño y me he estado preparando desde entonces. Sin embargo, cuanto más se acerca la fecha de salida, más surrealistas se vuelven las cosas. Estoy muy feliz, pero todavía es difícil imaginar que ir a una misión ya no es una meta y se está convirtiendo en una realidad.
Espero poder servir tanto como pueda, divertirme mucho, aprender cosas nuevas y conocer mejor al Salvador en este período de servicio, porque sé que la mejor oportunidad que tenemos de conocerlo es aprendiendo y viviendo como Él: sirviendo a la gente y siguiendo Sus pasos”.
Fuente: Mais Fe