No es una novedad que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días promueva la autosuficiencia.
Recientemente, la Iglesia decidió apoyar la iniciativa de una emprendedora italiana que busca ayudar a mujeres refugiadas a aprender nuevas habilidades, encontrar apoyo y ganar autosuficiencia a través de la moda.
“Tenía que encontrar una forma de ayudar a estas mujeres. Creo que Dios hizo que las conociera por alguna razón”, dijo Barba Spenzini para la Sala de Prensa de Italia.
Imagen: La Iglesia de Jesucristo
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Spenzini fundó Colori Vivi en 2017 en Turín, Italia, para hacer ropa y accesorios para mujeres.
La empresa ofrece trabajos de sastrería y capacitación para madres refugiadas provenientes de distintas regiones, tales como Nigeria, Somalia y Libia.
Latter-day Saint Charities ha comprado suministros y telas nuevas a lo largo de los años para Colori Vivi y ha contribuido con máquinas de coser y otras máquinas de sastrería especializadas.
“Barbara ha hecho que ayudar a otras mujeres se convierta en el trabajo de su vida.
Es un privilegio para nosotros contribuir a sus buenas obras y apoyar su visión inspirada”, dijo Kraig Christensen, un misionero mayor de servicio a la Iglesia.
Imagen: La Iglesia de Jesucristo
Las mujeres que llegan a Italia han escapado de la guerra, el abuso conyugal o la vida en las calles.
Spezini dijo que la creatividad en el diseño de moda también ha sido una habilidad valiosa para ellas mientras trabajan en la construcción de sus nuevas vidas.
“Un nuevo miembro de nuestro equipo, Sadia, creó un patrón de tela sobre la noche estrellada para una prenda en especial.
Cuando huía de una prisión en Libia, la oscuridad de la noche y la luz de las estrellas la guiaron hacia la libertad.
Sadia tomó ese evento traumático y lo convirtió en algo inspirador y hermoso”, dijo Spezini.
Fuente: Church News
