Aunque el área Utah es la más grande de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en términos de membresía, actividad e influencia, los Santos de los Últimos Días que viven en Utah se enfrentan a desafíos únicos.
Hay que destacar que Utah es el hogar de la sede de La Iglesia de Jesucristo, del 13 % de la población de miembros y de 28 templos dedicados, en construcción o anunciados.
Así que los miembros de todo el mundo consideran que Utah “representa lo que es la Iglesia de Jesucristo”, dijo el élder Kevin W. Pearson, Setenta Autoridad General y presidente del Área Utah.
El Templo de Draper (en el fondo) y el Templo de Oquirrh Mountain en Utah. Foto vía Church News.
Las preocupaciones en Utah
“A veces me preocupa que los miembros de la Iglesia den por sentado el hecho de que el profeta vivo de Dios está aquí”, explicó el élder Pearson. “No quiero exagerar, porque algunos de los miembros más fieles y maravillosos de la Iglesia en el mundo están aquí, pero me preocupa que no sólo seamos despreocupados con respecto al profeta, sino que eso nos lleve a ser despreocupados con respecto a nuestra membresía en la Iglesia del Salvador”.
Otra de las preocupaciones del élder Pearson por el área de Utah es cómo la pertenencia a la Iglesia se convierte en parte de la cultura. “Se convierte más en un aspecto social que en una aspecto espiritual profundamente personal en tu vida cuando estás en un grupo grande de miembros de la Iglesia, a diferencia de cuando estás por tu cuenta y tienes que valerte por ti mismo espiritualmente”.
Una visión centrada en el Salvador
Como presidencia de área, el élder Pearson y sus consejeros tienen la visión de que los miembros de la Iglesia en Utah centren sus vidas en el Salvador y pongan los convenios sagrados en el centro de sus vidas.
“No sólo en algún lugar en el fondo, pero intencionalmente ponerlos en el centro mismo de sus vidas”, dijo. “Entonces, una vez que haces eso, te concentras realmente en hacer y mantener los convenios sagrados, te vuelves más intencional en convertirte realmente en un discípulo de Jesucristo, alguien que estudia su vida, que lo sigue, que trata de aprender más sobre Él, cuyas enseñanzas son importantes en tu vida. Y cuando haces eso, lo natural es mirar a la generación naciente, a la fuerza en la generación naciente. Así que esas cuatro cosas ligadas a esa visión son realmente el foco de la presidencia en este momento”.
Uno de los retos que conlleva vivir en una población muy concentrada de miembros de la Iglesia o de cualquier otro tipo de afiliación, dijo el élder Pearson, es que “es fácil que tu perspectiva sobre lo que es la Iglesia y lo que hace la Iglesia se reduzca a las cuatro cuadras que constituyen tu barrio. Así que su barrio es su mundo cuando se trata de la Iglesia. No hay un barrio en el mundo, y mucho menos en Utah, que represente lo que es la Iglesia a nivel global”.
El élder Pearson y sus consejeros en la presidencia del Área Utah esperan y oran para que los miembros de la Iglesia aprecien plenamente el peligro espiritual de los tiempos y sean intencionales en cuanto a sus convenios y a la forma de criar a los hijos.
“Me preocupa que seamos demasiado despreocupados, y tal vez seamos despreocupados porque estamos demasiado distraídos”, dijo. “Nuestra esperanza y oración es que los padres escuchen al presidente [Russell M. Nelson], cuando dice: ‘no sobrevivirás espiritualmente, a menos que tengas la constante influencia sanadora y reconfortante del Espíritu Santo’. Y tenemos que ser más intencionales en cuanto a vivir de una manera y estar enfocados en lo que hacemos para que tengamos acceso a esa capacidad”.
“Hay gente fiel en todas partes en Utah”, dijo el élder Pearson. “Fin de semana tras fin de semana, me siento realmente abrumado por la capacidad, la fidelidad y la devoción de las personas”.
Fuente: The Church News
