Mark Jorgensen llevó a su esposa, Jerri Jorgensen, a visitar su misión en Hong Kong y pasar unos días descansando de la rutina. La pareja de esposos abordaron el crucero Diamond Princess, que inició su recorrido en Tokio, pasó por Vietnam, después por Hong Kong y Taiwán.
Un hombre que pasó 5 días en el crucero, que embarcó en Yokohama y desembarcó en Hong Kong, fue diagnosticado con coronavirus en un hospital local. Por ese motivo, todos los pasajeros del crucero tuvieron que ser sometidos a análisis y muchos fueron puestos en cuarentena, en un intento de impedir la propagación del virus.
Al principio, solo 10 pasajeros contrajeron el virus. El número de personas infectadas aumentó a 42, luego a 64 en menos de 24 horas. Mark Jorgensen no presentó ningún síntoma, por lo que fue preparado junto con más de 350 estadounidenses para volver a los Estados Unidos. Sin embargo, Jerri Jorgensen presentó síntomas del coronavirus y fue enviada a un hospital en Japón, donde permaneció en cuarentena.
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Mark y los otros 350 pasajeros permanecieron en cuarentena en una base de la fuerza aérea estadounidense en California durante aproximadamente 15 días y fueron sometidos a análisis regularmente. Después de algunos días, Mark también fue diagnosticado con el coronavirus y, luego, fue transferido a un hospital en Murray, Utah.
Jerri y Mark estuvieron separados durante casi un mes, ya que Jerri tuvo que recibir todo el tratamiento en Japón. Muchas personas le preguntaron, “¿Por qué eres tan optimista?”, ya que estaba lejos de su país, su familia, en cuarentena en un hospital y diagnosticada con una enfermedad que había matado a muchas personas.
Jerri dijo que vio su situación como una oportunidad para compartir el Evangelio, ayudar a las personas a conocer a Cristo y fortalecer su propio testimonio. La pareja se unió en ferviente oración y también en la lectura del Libro de Mormón mientras estuvieron en cuarentena, y agradecen el apoyo y las oraciones de las personas de todo el mundo.
Tanto Jerri como Mark se encuentran bien hasta el momento. Jerri ya ha sido dada de alta y volverá a los Estados Unidos esta semana. Mark sigue en cuarentena en Intermountain Medical Center, en Murray.
Fuente: LDS Living
