El presidente Henry B. Eyring, primer consejero en la Primera Presidencia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, visitó a funcionarios del gobierno y a líderes mormones locales y residentes en el Caribe el viernes 15 de septiembre de 2017, una semana después que el huracán Irma golpeó las islas.
“Algunos de ustedes tienen familia o amigos que han tenido más estrés emocional de lo que ustedes incluso saben”, dijo el Presidente Eyring a los Santos de los Últimos Días reunidos en un devocional improvisado en Santo Tomás. “Visitar a las familias y los vecinos durante un largo período de tiempo les dará una confianza que Dios vive. Él está cerca”.
El huracán Irma fue uno de los huracanes más poderosos del Atlántico y sus vientos convirtieron los exuberantes barrios tropicales en calles apenas reconocibles.
Obispo Dean M. Davies del Obispado Presidente. Créditos: mormonnewsroom.org
El Presidente Eyring estuvo acompañado por el Obispo Dean M. Davies del Obispado Presidente y por el miembro de losSetenta, Elder Jörg Klebingat. Por la mañana, se detuvieron en San Juan, Puerto Rico, y luego volaron por la tarde a Santo Tomás.
Los líderes de la Iglesia visitaron y alentaron a los Santos de los Últimos Días a recuperarse una semana después de que la devastadora tormenta causara daños a los negocios, arrancara árboles, y los techos de centenares de viviendas.
“La reconstrucción en algunos de estos lugares puede llevar años”, dijo el presidente Eyring. “Cuando se pierde infraestructura, se necesita mucho tiempo para volver a ponerla. No sé qué parte jugaremos en eso, pero debemos ser tan útiles como podamos a las agencias gubernamentales responsables. No podemos hacerlo todo, pero podemos ayudar donde podamos”.
En San Juan, una área menos dañada que Santo. Tomás, los escombros fueron notablemente menos visibles gracias a la preparación previa a la tormenta. “Nuestro chofer pensó que era un milagro de Puerto Rico”, dijo el presidente Eyring. -Dijo que lo habían limpiado inmediatamente, realmente increíble.”
Créditos: mormonnewsroom.org
En una reunión vespertina de unos 600 miembros y amigos de la Iglesia que se celebró en la sala de reuniones del Barrio Trujillo Alto en San Juan, el presidente Eyring dijo a la gente que siempre pueden encontrar luz en tiempos de oscuridad centrándose en Jesucristo.
“Yo estaba con algunas personas hoy que perdieron mucho”, dijo. “Miré en sus ojos y pude ver que estas personas aparentemente ordinarias estaban sobre la roca del Señor Jesucristo. Vieron la luz incluso en la oscuridad. Y así, las cosas para ellos se resuelven. Lo que sea necesario, se reconstruirán. Y no sólo reconstruirán sus casas y sus negocios. Lo que construirán es un amor del Señor Jesucristo y un sentimiento de que no importa lo que venga, se sentirán alegres y seguros”.
Ninguno de los Santos de los Últimos Días murió en la tormenta, y tres edificios de la Iglesia (uno propiedad de Santo Tomás, el otro alquilado en San Martín) fueron dañados, mientras que un edificio alquilado en la vecina isla de Tortola se perdió completamente.
Actualización: El presidente Eyring y otros líderes de la Iglesia continuaron sus viajes el sábado y el domingo, 16-17 de septiembre de 2017, ofreciendo amor y apoyo en la Florida a los afectados por el huracán Irma.
Fuente: mormonnewsroom.org
