Pregunta
¿El Señor aprueba que participemos en actividades que ponen nuestras vidas en riesgo, como el paracaidismo, bungee u otros deportes extremos? Tu opinión sobre el asunto sería de gran ayuda.
Robert
Respuesta
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El riesgo es algo divertido. Al principio, creemos que nuestras actividades diarias no son muy riesgosas, en parte porque las realizamos con mucha frecuencia. Sin embargo, conducir un auto para ir al trabajo puede ser peligroso. Solo ve las noticias o lee un periódico y verás con qué frecuencia se chocan los autos.
En mi ciudad, el alguacil local les recuerda con frecuencia a los ciclistas que obedezcan todas las leyes de la carretera y anden en sus bicicletas con cuidado. Incluso andar en bicicleta puede ser peligroso si no estás acostumbrado a eso. No quiero asustarte a ti o a nuestros ciclistas, pero la vida cotidiana conlleva cierto riesgo y no hay nada que puedas hacer al respecto.
Nuestras actividades de ocio no son diferentes. En mi barrio, a veces, los jóvenes van de excursión y acampan. Hay muchas cosas que pueden salir mal mientras están de excursión y acampan, ambas actividades pueden ser muy peligrosas. ¿Deberíamos prohibir a nuestros jóvenes ir a acampar, pescar o ir de excursión? Por supuesto que no.
De hecho, las actividades de alto riesgo como las que mencionaste son mucho más peligrosas que hacer excursiones, nadar o andar en bicicleta. Pero, no hay nada intrínsecamente malo con participar en ellas.
Habiendo dicho que no hay nada intrínsecamente malo con participar en ellas, no significa que todas las actividades de alto riesgo sean una buena idea. Si eres padre de jóvenes y el único sustento de tu familia, es posible que quieras pensar en otras maneras de pasar el tiempo en lugar de saltar de aviones o luchar con tiburones en los trópicos.
La simple verdad es que ese tipo de actividades y cosas son más riesgosas que unirse al gimnasio o jugar golf un sábado y el riesgo de resultar lesionado es mucho mayor. Si algo te sucede, tu familia podría verse en grandes dificultades debido a tu elección en dichas actividades.
Robert, el Señor nos ha dado sentido común y sabiduría. Por supuesto, es importante pensar en qué actividades le agradan a Él y que no hay nada de malo con la diversión sana y buena.
Los pasatiempos y las actividades de ocio brindan gran alegría y felicidad a nuestras vidas y, a menudo, pueden acercar más a nuestras familias. Debemos tener cuidado con respecto a las actividades y los pasatiempos de los que participamos tanto para nuestra protección espiritual como para nuestra protección física.
Fuente: Askgramps.org
