El domingo 28 de septiembre, el programa “Música y Palabras de Inspiración” se convirtió en un homenaje especial al presidente Russell M. Nelson, quien ha partido a la edad de 101 años el 27 de septiembre del 2025.
Ese día, el Coro y la Orquesta del Tabernáculo en la Manzana del Templo ofrecieron un programa lleno de música, recuerdos y mensajes que reflejaban la vida de un profeta que dedicó todo al Señor y a Sus hijos.
Un recuerdo que marcó toda una vida

La música significó de manera personal una de las formas más divinas de poder conectarse con Nuestro Padre Celestial. En una ocasión, el presidente Nelson comentó:
“No puedo recordar mi vida sin Música y Palabras de Inspiración. Nací en 1924 y la primera transmisión fue en 1929. Recuerdo, siendo un niño, escuchar las emisiones de los domingos”.
Esa conexión personal con el programa hizo que este homenaje fuera aún más significativo.
Una vida dedicada al Salvador

Durante la transmisión, Derrick Porter, productor y presentador, recordó que el presidente Nelson tuvo muchos títulos en su vida profesional: médico, cirujano, investigador y profesor. Sin embargo, lo más importante para él fue ser “hijo de Dios, hijo del convenio, discípulo de Cristo, esposo, padre y Apóstol del Señor Jesucristo”.
Porter resumió así su legado:
“A través de sus mensajes aprendimos a ‘hacerlo mejor y ser mejores’. Nos enseñó a ‘dejar que Dios prevalezca’ en nuestra vida, a ‘pensar de manera celestial’ y a reconocer la voz del Señor”.
Música como oración de despedida

El programa incluyó himnos y piezas especiales como “Simple Gifts” y “Por la Belleza Terrenal”. Pero el momento más emotivo llegó con la interpretación de “God Be With You Till We Meet Again” (Para Siempre Dios Esté con Vos, un himno que suele cantarse al final de cada transmisión, pero que esta vez fue presentado como el cierre oficial en honor al profeta.
En el Tabernáculo, la última imagen proyectada fue la sonrisa del presidente Nelson mientras el público guardaba un minuto de silencio. Fue un recordatorio de que su vida estuvo dedicada a sanar corazones y a señalar el camino hacia Cristo.
El legado espiritual

El presidente Nelson contribuyó con avances médicos que salvaron vidas, pero su misión principal fue sanar corazones y elevar espíritus. Porter lo expresó con claridad:
“Para el mundo, sobre todo, él fue un discípulo y testigo de Jesucristo. Su misión fue ayudar a las personas, sanar corazones y espíritus”.
Ese domingo, el Coro y la Orquesta no solo ofrecieron un concierto, sino una oración musical que parecía decir: “Hasta vernos con el Rey Hasta ver. Para siempre Dios esté con Vos”.
Fuente: Church News




Hay fiesta en el cielo un gran guerrero y represente ha sido llamado a la diestra de nuestro padre celestial nuestro corazón está triste por su partida pero también feliz porque ahora toma un llamamiento más importante al lado del rey mi más sentido pésame a toda su familia y para todos los millones de miembros de nuestra verdadera fé
Gracias Presidente, sé que si somos fieles volveremos a vernos más de una vez