¿Te cuesta concentrarte en las reuniones dominicales de la Iglesia? ¿Es complicado entender todo lo que se dice? ¿Te distares con facilidad? Esta situación nos puede estar pasando, y es probable que nos esforcemos por cambiar esta situación puesto que asistimos a la iglesia con la intención de aprender y salir fortalecidos.
A continuación 3 consejos que pueden ayudarte para que tu experiencia en las reuniones de la Iglesia sea la más significativa:
No trates con liviandad las cosas sagradas
El presidente Spencer W. Kimball enseñó que en nuestra vida hay fuerzas poderosas, parecidas a las corrientes invisibles del océano. Esas fuerzas son reales y nunca debemos ignorarlas.
Cuando estamos en la iglesia debemos entender que estamos atendiendo los asuntos más sagrados que podamos atender. Como enseñó el presidente N. Eldon Tanner, aprendí “cuánto más sabio y mejor es que el hombre acepte las verdades sencillas del Evangelio… y que acepte mediante la fe aquellas cosas… que no puede comprender”.
Prepara ese tiempo valioso, organiza tus asignaciones de tal forma que no seas preso de los dispositivos electrónicos para comunicarte con otras personas cuando puedes hacerlo después.
Establece una sintonía
Para atender las cosas sagradas del evangelio es menester también que establezcas una sintonía con el Espíritu Santo. Se nos ha prometido que él será una guía constante. Cuando estamos en compañía de esta guía, nuestro entendimiento es abierto y se nos revela conocimiento que necesitamos.
Élder Larry S. Kacher dijo: “Nuestro Padre Celestial nos ha bendecido con el don divino del Espíritu Santo para guiarnos en nuestras decisiones. Nos ha prometido inspiración y revelación si vivimos dignos de recibirlas. Les invito a que aprovechen este divino don y examinen sus decisiones haciéndose esta pregunta: “¿Están mis decisiones firmemente asentadas en la rica tierra del evangelio de Jesucristo?”
Toma apuntes
Prepara una libreta de apuntes exclusivo para cada vez que asistes a la Iglesia en este cuaderno. Separa las hojas en dos espacios. En la primera sección apuntarás todo lo que aprendas en cuanto a doctrina y principios del Evangelio y en la otra sección apunta todas las impresiones e inspiraciones que tengas en cada reunión de la Iglesia. Cuando hagas esta actividad, te darás cuenta que recibes mucho conocimiento y respuestas a tus oraciones.
Esto te permitirá estar concentrado que no te darás cuenta que el tiempo está pasando.
Recuerda siempre lo que dijo el Presidente Ezra Taft Benson: “Vivimos en un mundo muy inicuo. Estamos rodeados de propaganda de que lo malo es bueno y lo bueno es malo, y hay abundan las enseñanzas falsas que nos afectan. Se está combatiendo como nunca antes casi todo lo que es sano, bueno, puro, edificante y que fortalece.
Una de las razones por las que estamos en la tierra es para discernir entre la verdad y el error. Ese discernimiento se recibe mediante el Espíritu Santo y no sólo con nuestras facultades intelectuales.”