Recuerdas el momento en el que tuviste una conversación con alguien y luego te dijo: “necesitas aprender a comunicarte”, a lo que respondiste, “estás bromeando … eres tú el que no sabe cómo comunicarse …” Y así y así hasta que dijiste cosas de las que probablemente te arrepentiste unas horas más tarde.
La mayoría de las personas creen que saben cómo comunicarse y todos los demás están mal de la cabeza.
Mientras estaba en la universidad, un profesor nos obligó a leer un libro llamado “Crucial Conversations”. Estoy seguro de que no he cumplido con todo su sabio consejo, pero lo estoy intentando. El libro provee “Herramientas para hablar cuando lo que está en juego es alto” y ahora me doy cuenta de que el riesgo es más alto de lo que jamás habría imaginado en mi juventud.
Si estás tratando de comunicarte con tu cónyuge, cerrar un trato con un posible cliente, o darle en el clavo en la entrevista para el trabajo que deseas … la forma en que te comunicas será muy probablemente el determinante número uno de los resultados en cada situación.
¡La forma de comunicarse es la clave del éxito! ¡Podría llegar la chica de tus sueños, el cliente perfecto, o ese trabajo ideal!
Aquí verás las 5 características que debes evitar para comunicarte bien con otros:
1. ¿Olvidaste escuchar?
¡Primero lo primero! Necesitas escuchar a la gente si alguna vez quieres entender. Henry B. Eyring dijo una vez a un grupo de estudiantes que “no mucha gente durante una conversación escucha atentamente a la otra persona.
Generalmente se están enfocando en lo que dijeron por última vez o lo que dirán a continuación”. Esto se llama escucha autocentrada.
Estos tipos de personas se olvidan de hacer la parte más importante al comunicarse. Ya sabes… la parte en la que se escucha. Lo que dijiste por última vez o lo que vas a decir a continuación no es tan importante como lo que la persona con la que estás hablando está diciendo en ese mismo momento. Además … si realmente escuchaste a la persona, lo que digas a continuación podría ser muy diferente de lo que planeabas decir inicialmente.
Es gracioso realmente … Voy a tener una conversación con alguien y son fuertes y enérgicos y se emocionan cuando están hablando … pero el minuto en que voy a responder, sus ojos vidriosos, me dicen que no me están escuchando. En realidad me ha pasado que converso con algunas personas que comienzan a dormirse en segundos después de que respondo a sus discursos.
Normalmente sucede cuando estoy hablando con personas mayores más educadas. Sé que son más inteligentes que yo … pero cuando hacen eso, es como si escuchara a gritos: “¿Qué podrías decir que valga la pena para mí?” ¡Clásico! Entonces cuando es su turno de nuevo, se “despiertan” y se sientan como si una abeja los hubiera picado. Deberíamos gastar más energía escuchando que hablando …
2. ¡Deja de interrumpirme!
Una de las cosas más irritantes del mundo es tener una conversación con alguien y no ser capaz de incluso terminar tu pensamiento antes de que la otra persona te interrumpa. Si sucede una vez … está bien, dos veces … tú como “¡puf!” … pero tres veces y ya estás empezando a preguntarte de si eres parte de la conversación.
La persona parece estar muy bien sin ti, respondiendo a sus propias preguntas y terminando tus oraciones. Es como si creyeran que pueden leer tu mente para que también pudieran ahorrarte el esfuerzo de hablar ¿no?
3. ¿Pueden responderme por favor?
Los buenos comunicadores encuentran una manera de responder cada vez que tienen la oportunidad. Incluso si no tienen nada que decir, todavía encuentran una manera de lanzar algo por ahí para que la otra persona sepa que están vivos.
Vivimos en una era digital donde gran parte de nuestra comunicación se hace a través de texto, correo electrónico o mensajes privados.
¿Alguna vez has enviado un mensaje a alguien y nunca recibiste una respuesta? Luego les preguntas más tarde si recibieron tu mensaje y simplemente dicen algo como … “mmm, no me hiciste una pregunta directa” o “No pensé que necesitaba responder”. ¿En serio? ¿Qué?… ¿acaso ignorarían la pregunta si se los dijeras en persona? No … responderían con un “ok”, o, “lo tengo”, o ¡algo!
Responde a las personas y hazles saber que no están perdiendo el tiempo en tí. La única vez que esto está permitido es, si estás soltero y estás tratando de hacérsela difícil a tu futuro amor…
4. ¿Por qué siempre tienes que usar ese tono?
“¡Amigo! Solo estamos teniendo una conversación … ¿por qué siempre tienes que hacer que todo sea raro, tan serio y a la defensiva?”
Las conversaciones no son ataques. Los malos comunicadores siempre parecen sentir que alguien los está acusando o atacando.
Cuando eso sucede, ponen un tono único que es difícil de saber el porqué. Todo lo que sabes es que está ahí … y están haciendo que sea muy difícil para ti concentrarte en una fructífera conversación.
Ese tono parece estar siempre acompañado por una cara fría y larga, desprovista de cualquier tipo de emoción.
Saca una sonrisa, haz una broma o finge una expresión para que alguien sepa que no estás pensando en golpearlos en la cara.
5. Déjate de rodeos
¡Simplemente ve al grano! La gente está ocupada y tú también. El tiempo es precioso y ellos te apreciarán mucho más por respetar su tiempo. Si estás sentado alrededor de una fogata en el bosque y realmente no hay nada que hacer, entonces podrás hablar todo lo que quieras, pero cuando estás tratando de conseguir algo… solo ve directo a él.
Grandes resultados en las conversaciones cruciales dependen en gran medida de la honestidad y la franqueza de las personas involucradas. Todos los problemas de comunicación se pueden arreglar con solo ponerse en los zapatos de la otra persona con la que uno se está comunicando.
Si puedes hacer esto … entenderás que no te gustaría hablar con alguien que no te escucha o que se pone a la defensiva cuando hablas. También notarás que nada es más molesto que ser interrumpido cada vez que abres la boca o no que no se te responda.
Así que ve al grano y escucha sinceramente otras respuestas. No elabores tu respuesta antes de que la otra persona haya terminado y asegúrate de responderles de una forma u otra.
Una persona que puede eliminar estas 5 características de su perfil de comunicación se destacará en todo lo que haga.
¡Tendrás que espantar a las personas con un bate, porque es raro encontrar un buen comunicador!
Los buenos comunicadores están más interesados en los demás en vez de solo en sí mismos. Se vuelven más atractivos para los que los rodean y son infinitamente más inteligentes cuando humildemente escuchan e interiorizan las palabras de los demás.
Este artículo fue escrito originalmente por Greg Trimble y fue publicado en gregtrimble.com, con el título The Most Frustrating 5 Attributes of Horrible Communicators Español © 2017