Dale paz a tu alma, permite que el Señor alivie tus cargas

Comenzaremos este artículo con una escritura de Doctrina y Convenios:

“Por tanto, de cierto os digo que para mí todas las cosas son espirituales; y en ninguna ocasión os he dado una ley que fuese temporal” (DyC 29:34).

Todas las cosas son espirituales para el Señor. Por eso, aquí abordaremos algunas cosas que te ayudarán a dar paz a tu alma:

1. Más deportes y actividades físicas

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Muchas personas creen de manera errónea que para guardar la Palabra de Sabiduría es suficiente con no tomar bebidas alcohólicas, no usar drogas ni tabaco; pero, eso no es todo.

El sedentarismo también puede quebrantar la Palabra de Sabiduría, ya que esta ley declara que “debemos cuidar nuestros cuerpos” y el sedentarismo no nos beneficia en nada.

En el folleto “Para la Fortaleza de la Juventud”, leemos:

“Para cuidar bien de tu cuerpo, consume alimentos nutritivos, ejercítate regularmente y duerme lo suficiente: Practica el equilibrio y se moderado en todos los aspectos de tu salud física”.

¿Cómo el deporte y las actividades físicas pueden darle paz a tu alma? ¡Es simple! Cuando enfocas tu atención en ello, tu carga de preocupaciones diarias deja de ser tu foco de atención y con eso ¡le darás paz a tu alma!

La próxima vez que te sientas triste, preocupado y sin saber qué hacer, sal a caminar y ¡verás cómo eso te cambiará de humor!

2. Menos WiFi

Muchas veces, ¡nosotros mismos ocasionamos muchas de las preocupaciones que tenemos! ¿Pensaste en eso? Te daré un ejemplo simple: ¡Nos comparamos con las personas que vemos en las redes sociales!

¡Deja de compararte con los demás! Esa es una práctica destructiva.

Pasamos mucho tiempo en línea, más de lo que necesitamos y deberíamos. Una de las cosas que puede traer alivio a tu alma es disminuir el uso de Internet.

¡Pasa menos tiempo conectado a Internet y más tiempo conectado a Dios!

3. Más oración

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La oración no es un número de teléfono de una pizzería al que llamamos, hacemos nuestro pedido y colgamos. La oración es literalmente una conversación con nuestro Padre Celestial.

Si le pedimos ayuda al Padre Celestial, Él nos ayudará a través de Jesucristo.

Jesucristo nos conoce, sabe quiénes somos y entiende todo lo que nos pasa. Muchas de nuestras angustias y problemas profundos de nuestra alma se podrían resolver mediante una oración sincera.

Buscar al Padre Celestial a través de una oración sincera y con verdadera intención, sin lugar a dudas, trae alivio a nuestra alma.

4. Arrepentimiento

El arrepentimiento siempre nos traerá paz y felicidad. Por eso, lo necesitamos en diferentes aspectos de nuestra vida.

El Élder Dale G. Renlund dijo:

“El arrepentimiento no solo es posible, sino que también es gozoso gracias a nuestro Salvador”.

Cuando nos arrepentimos verdaderamente de nuestros errores y pecados, volvemos nuestro corazón al Señor y buscamos mejorar. Esa actitud de reconocer el error y buscar mejorar, siempre traerá alivio a nuestra alma.

Tal vez después de hacer todo lo posible para buscar felicidad y alivio para nuestra alma, lo que nos falta es un arrepentimiento profundo y sincero.

Fuente: maisfe.org

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