Nuestro amoroso Padre Celestial nos ha dado talentos a cada uno de nosotros para desarrollarlos y servir al prójimo. Un claro ejemplo es Elías y Ana, dos jóvenes peruanos que están haciendo algo muy especial para compartir el evangelio con todo Latinoamérica. ¿Cómo lo hacen? A través del idioma universal: la música.
Y como la música expresa más que las palabras muchas veces, deseamos que este artículo sea peculiar, así que primero los invitamos a experimentar hermosos sentimientos al escuchar la siguiente canción interpretada por Elías y Ana, miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones).
De buenos padres que aman a Dios
Al igual que Nefi, Elías y Ana son hijos de buenos padres que desde muy pequeños compartieron el evangelio con sus hijos y los educaron en la música. Estas dos hermosas familias asisten a la Estaca Independencia, Lima, Perú. Elías Alcántara tiene 22 años, estudia música en la Universidad San Martín de Porres, actualmente sirve como miembro del Sumo Consejo en su Estaca y fue un misionero de tiempo completo en la Misión Chiclayo Perú. Por su parte, Anita Guillena tiene 21 años, estudia música, y pronto saldrá en una película peruana como parte de su formación actoral.
El idioma de la música para compartir el evangelio
Cuando Elías servía una misión, le tocó compartir el evangelio con buenas personas que se dedicaban a la agricultura pero que no sabían leer, así que era un poco complicado compartir las enseñanzas del Libro de Mormón, en ese entonces, Élder Alcántara se dejó guiar por el Espíritu Santo y junto a su compañero compartieron los mensajes a través de los himnos de la iglesia. Lograron buenos resultados a través de esa herramienta.
“La música es una de las mejores herramientas que tenemos para compartir el evangelio de Jesucristo. La música con los acordes y letras inspiradas pueden llegar a penetrar hasta lo más profundo del corazón”, comenta Elías para mormonsud.org. Por su parte, Ana complementa: “Los himnos son también mensajes y oraciones que ofrecemos de manera artística”.
Hace poco ellos participaron en la Conferencia Para la Fortaleza de la Juventud (FSY en sus siglas en inglés) como Coordinadores auxiliares y estuvieron a cargo del Programa musical en el que aprendieron junto con otros jóvenes el efecto positivo que las canciones pueden tener. Así lo vivieron cuando entonaban la conocida canción Pide a Dios.
En calidad de primicia, estos jóvenes mormones nos comentan que preparan toda una lista de canciones inéditas en las que se verán reflejadas historias del Libro de Mormón, en especial canciones sobre el pueblo lamanita.
En la última Conferencia general de la Iglesia, élder Jeffrey R. Holland exhortó: “Crean en sí mismos y crean en Él. No menosprecien su valor ni menoscaben sus aportaciones. Sobre todo, no abandonen su función en el coro. ¿Por qué? Porque ustedes son únicos; son irremplazables”. Estamos seguros que Elías y Ana son parte de ese coro celestial que se esfuerza día a día por dar todo ese potencial divino que han heredado y que a través de ello acercarán a muchos hijos del Padre Celestial a él.
Para conocer un poco más del trabajo de Elías pueden visitar su canal en Youtube