El pasado 22 de julio, fallecieron en un accidente automovilístico en la reserva india Ramah Navajo en Nuevo México dos jóvenes misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
El élder Marcus B. Nash, Setenta Autoridad General, llevó consigo una carta de la Primera Presidencia al funeral del élder Mike Davis, una de las víctimas.
El élder Sam Wong, Setenta Autoridad General, llevó el mismo mensaje al funeral del élder Tyson Gene Haycock.
El élder Nash compartió que su mensaje también representaba el sentir de muchas personas que “sufren a la distancia” por lo sucedido.
“El fallecimiento de un misionero es un golpe compartido que todos sentimos profundamente. Vengo a expresarles amor, compasión y apoyo”.
Luego el élder Nash hizo entrega de la carta de la Primera Presidencia a la familia.
En aquella carta el presidente de la Iglesia y sus consejeros expresaron su pesar, compasión, amor y una oración para que la paz del Padre Celestial sostenga a cada familia.
Los presidentes Russell M. Nelson, Dallin H. Oaks y Henry B. Eyring expresaron:
“Oramos fervientemente para que el espíritu consolador de nuestro Padre Celestial los acompañe en este momento difícil. Los misioneros son muy queridos por toda la Iglesia.
La pérdida de un [misionero] es sentida profundamente por todos los que lo conocen. Por eso, les expresamos no solo nuestro pésame, sino el de todos aquellos que apoyan la causa misional en todo el mundo”.
El élder Davis y el élder Haycock fallecieron a causa de las lesiones sufridas durante una colisión frontal entre dos vehículos el 22 de julio del presente año.
El tercer misionero que acompañaba al élder Haycock y al élder Davis, el élder Britton Jeremie Berrett, de 19 años, de Roberts, Idaho, se está recuperando de heridas graves sufridas en el accidente.
Asimismo, el élder Nash también compartió las bendiciones del plan de salvación. Dijo que la tierra fue creada para que los hijos de Dios pudieran desarrollarse de una manera que no habrían logrado si hubiéramos seguido viviendo con Él.
Parte de eso es aprender a conocer lo amargo para valorar lo bueno. Nuestro Padre Celestial envió a Jesucristo para proporcionar resurrección y redención a todos.
El élder Nash dijo sobre el élder Mike Davis.
“Realmente se esforzaba por parecerse más a Cristo. Nuestro estándar es [Cristo]. Son las personas como el élder Davis las que nos ayudan a comprender, en persona, lo que realmente significan algunos de aquellos atributos en la vida mortal.
Mi invitación, si me permiten el atrevimiento, con todo el amor desde lo más profundo de mi corazón, es valorar lo bueno”.
Kim Davis, madre del élder Mike Davis, lo plasmó en su charla.
“Si alguno de ustedes se pregunta, duda o trata de averiguar cómo ser feliz, llame a los misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días porque ellos tienen un mensaje que los hará felices. Ustedes serán felices junto con su familia por la eternidad. Puedo contar con eso”.